Es un libro necesario para aquellos que están deambulando; niños y adultos que quieren encontrarse a si mismos, y a todos los que están cansados de trabajar y ser adultos. Kim soo hyun abre el libro diciendo: "cuando me convertí en adulto, me di cue...
Cuando era estudiante de segundo grado, hablamos de nuestro sueño. Escuché sobre Madame Curie en alguna parte. Y dije que me gustaría ser una científica como ella.
Desde que fui concebida en el útero de mi madre, nunca me ha gustado la ciencia, pero solo estaba fanfarroneando porque estaba en segundo grado. Es extraño si una niña pequeña dice que le gustaría estar en el departamento de adquisiciones o convertirse en contadora en una SME. El problema ocurre cuando nuestro sueño de crecer no es "lo que haremos" sino "en qué nos convertiremos".
Una vez hablé con un dermatólogo que se graduó de una escuela de medicina en Seúl y dirigía una clínica de dermatología en Gangnam. Mientras hablaba con el médico, no sentí ninguna personalidad o filosofía única de él. En cambio, me sentí como si fuera un niño, todavía creciendo.
De repente, le pregunté si estaba feliz. Me respondió sin dudarlo: "No".
Otros pueden admirarlo por tener un buen trabajo, pero lamentó no ser de una mejor universidad y trabajar para un hospital más grande.
Muchos libros dicen que muchas personas socialmente reconocidas no son felices en realidad, y él fue uno de ellos. Dedicó su adolescencia a estudiar y entró en la facultad de medicina porque 'simplemente podía'. No tuvo tiempo para pensar en nada más y estaba ocupado con un estudio frenético y su puesto de médico interno.
¿Por qué no está feliz?
Mientras buscaba un estatus socioeconómico estable y reconocimiento, no tuvo la oportunidad de ver su yo interior. Esto finalmente lo hizo sentir vacío. Lo importante para él era ser médico. Depende de su identidad profesional
para compensar su vacío interior y su insignificante identidad. Pero todavía estaba infeliz.
Pensó que todo estaría bien una vez que se convirtiera en médico, pero se encontró atrapado por su propio deseo de obtener ingresos más altos y trabajar para un hospital más grande. Su yo interior estaba todavía vacío y ningún medio materialista podía satisfacerlo por completo.
Un trabajo no se trata solo de ganarse la vida. Hace que alguien se vuelva más de sí mismo, en lugar de crear un nuevo yo. Puede hacer rodar una bola de nieve solo si tiene algo de nieve.
Si persigues los valores externos sin mirar tu yo interior, siempre vivirás con comparaciones y nunca alcanzarás la felicidad real y el respeto por ti mismo.
Lo que es crucial para nosotros no es una tarjeta de presentación para mostrar nuestras credenciales, sino para convertirnos en nosotros mismos, lo cual no necesitamos demostrarle a los demás.
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