Es un libro necesario para aquellos que están deambulando; niños y adultos que quieren encontrarse a si mismos, y a todos los que están cansados de trabajar y ser adultos. Kim soo hyun abre el libro diciendo: "cuando me convertí en adulto, me di cue...
En la película El club de los poetas muertos, Neil creció bajo la tutela de su estricto padre, quien lo obligó a ser médico. Un día, Neil interpretó al personaje principal en la obra de Shakespeare, Sueño de una noche de verano. Estaba pasando sus días más felices demostrando su talento y habilidades, pero su padre amenazó con transferirlo a otra escuela si no renunciaba. Neil trató de rebelarse contra su padre, pero se dio por vencido cuando vio a su madre. Parecía tan desesperada y patética. Neil estaba lleno de impotencia y desesperanza.
Esa misma noche, acabó con su vida con el arma de su padre.
Las personas se desesperan cuando no pueden soportar su vida y cuando simplemente no pueden vivir de la manera que quieren. Un psiquiatra dijo que lo que tienen en común Hungría, Japón y Corea es que "estas sociedades no permiten que la gente deambule".
Estos tres países tienen otra cosa en común: una alta tasa de suicidios.
En Corea, deambular es un tabú, ya que se considera un atajo para arruinar tu vida. Por eso se creó el término 'adolescentes errantes'. Ir a la universidad, conseguir un trabajo, casarse, tener un hijo, comprar una casa y una serie de tareas deben completarse antes de la fecha límite de "edad óptima", y no se permite un segundo de deambular. De lo contrario, uno no puede evitar decepcionar a sus padres, chismear a la gente que lo ve como un fracaso y el miedo al aislamiento social.
Como resultado, Corea tiene dos índices: la tasa de suicidios más alta y la tasa de natalidad más baja. Estos dos índices muestran que muchos abandonaron incluso el instinto humano más básico, la supervivencia y la reproducción. Esto muestra cómo su gente no considera a Corea como un país habitable. En una sociedad que monitorea si los individuos cumplen con las tareas dadas, los individuos se ponen nerviosos y sofocados incluso por estar estancados momentáneamente.
Algunos dirían que la gente es llorona porque la vida era más difícil en el pasado y hay países que están luchando más que Corea. Pero lo que hace que los coreanos se tensen y sufran es una paradoja social más que un índice económico absoluto. El miedo que hace infelices a las personas no es la pobreza, es el sentimiento de miseria y aislamiento por no ser aceptados en la sociedad.
Es por eso que la gente llamaría a Corea "Hell Joseon". La gente es infeliz, como si viviera en el infierno. ¿No podemos ser felices?
Mucha gente piensa que los países del norte de Europa con un alto índice de felicidad son lugares ideales para vivir. Pero según Leo Bormans, su alto índice de felicidad depende de la libertad suficiente, la confianza en otras personas y el respeto por las habilidades e intereses, en lugar de altos ingresos o un sistema de bienestar social.
Y ahora estamos en el lado opuesto: un lugar donde se priva de libertad, las personas se ven obligadas a vivir una vida uniformada y las personas desconfían entre sí.
No importa qué tipo de vida vivamos, si creemos que seremos respetados por lo que realmente somos, imagina cuán libres podríamos ser en realidad.
El bienestar social tan importante como nuestra existencia, que necesitamos para sentirnos felices, es la libertad de vagar tanto como queramos y una mente amable y dispuesta a comprender.
Esto no es algo que se encuentre en un libro de texto, pero podría ser una solución esencial.
Ser tolerantes y generosos unos con otros nos permitirá liberarnos de esta infelicidad. De ahora en adelante, dejemos de ser miserables.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
