enemies? | eren jaeger.

41 | te lo dije.

Narra Eren:

Estoy quedándome dormido.

¿Te imaginas estudiar un domingo en la mañana?

La resaca no me cayó muy bien, sobre todo que ahora tengo menos resistencia al alcohol.

¡Qué va! solo tomé tres vasos, antes aguantaba una botella pura y súper fresco al siguiente día.

—Y es por eso que, la convergencia digital es un fenómeno que abarca un mayor incremento de los campos digitales. —Nanaba explicaba la clase, lamentablemente su tono de voz es tan fuerte y el tema tan interesante que mis ojos se cerraban.

Es sarcasmo, por cierto.

Odiaba tener que llevar cursos por segunda, siempre me hizo sentir como un idiota que no entendía a la primera y un desorganizado. Ahora simplemente me da igual de verdad, me estoy esmerando esta vez.

Había tomado varios apuntes y ayudándome de técnicas de memoria que me habían enseñado en terapia, simplemente me puse a organizar mis ideas para comprender mucho mejor. —Y con esto, finalizamos la clase pueden irse. —Al fin, dijo la profesora.

Podía jurar que escuchaba a alguien roncar.

Todos se estaban yendo del salón mientras yo solo miraba la hoja de mi cuaderno, mi lapicero está muy sucio, debería limpiarlo, agh esta clase estuvo bien cansada o simplemente yo estoy con flojera.

—¿Por qué te quedas pensando en la nada? —escucho una voz femenina a la vez que dos manos en mis hombros despertándome de mis pensamientos.

Era ella.

—Lo siento bonita. —sonrío mientras volteo a verla, también está mostrándome esas facciones tan lindas que la hacen única.

Cómo me encanta esta chica.

—No pidas disculpas. —me dice a la vez se sienta a mi lado, me siento feliz de que lo haga. —¿Tomaste apuntes? —me pregunta.

______ no deja de mirarme con esos ojitos bonitos.

—Sip, todo organizado mira. —le mostré algo emocionado, me deleitó con una sonrisa y observó la hoja. —A pesar de que moría de sueño.

—Me alegro por ti. —acarició levemente mi mejilla y sentí palpitar mi corazón de esa forma que solo ella me hace sentir, percibí mis mejillas calentarse y notaba un leve sonrojo en su rostro también. —Mi chico lindo. —me llamó.

—De verdad tengo unas ganas de decirte "te amo" —solté y ella ladeó la cabeza alzando las cejas. —Pero te dije que te demostraría la razón por la cual me podrías dar otra oportunidad.

—Está bien Eren. —me da una sonrisa bonita que estoy seguro que hace que mis ojos brillen.

Ella está por irse pero la tomo de la mano.—Uhm ¿Preciosa?

—Dime. —ella contesta de inmediato sin dejar de verme a los ojos.

—¿Quieres hacer algo más tarde? Es domingo y creo que toca relajarse. —ofrecí y vi como sus labios ligeramente formaban una sonrisa.

—Claro, está bien por mi. —me respondió de forma dulce, se notaba en sus ojos la emoción que tenía, no pensaba decepcionarla.

—¿Le sigues teniendo el mismo amor a las hamburguesas que antes de que me vaya? —pregunto apoyando en una de las carpetas.