Capítulo Diecisiete

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El timbre sonó a primera hora de la mañana en el departamento de Kilian.
Este fue a abrir la puerta y cuando vio a su hermana ante sus ojos, Kilian le abrazo. Ya que, si no fuera por el timbre, el seguiría en aquella misma pesadilla donde él caía a un pozo sin fondo.
Después la hizo pasar hacia la cocina y ahí, Kilian comenzó a hacer los desayunos.
Mientras que él cocina, ambos estuvieron hablando de sus planes de futuro y Katherine le habló de su vida junto a Elizabeth. Por lo que Kilian le dijo que le apoyaría en la decisión que ella tomase.
Tras él desayuno, ambos estuvieron observando como los inspectores intentaban de localizar sin llamada de Anne su rastro. Pero como también intervenían que había en la zona donde daba el localizador de Anne. Y Kilian ya había perdido un poco la esperanza a que ella le llamase.

Anne despertó tras quedarse dormida por madrugada tras forcejear varias veces.
Cuando recordó que Demir le había momificado, Anne comenzó a forcejear para intentar romper la cinta bondage. Pero no le fue posible.
Ella dejó de forcejear, porque no podía más. Pero sabía que tenían que intentar quitarse la cinta para poder salir al menos de la habitación.
Anne comenzó a recordar algo que había olvidado por todo lo que había pasado últimamente. Fue cuando entendió que no debía de haberse comportado mejor con sus padres de morir. Uno que le vino de pronto.

―Es muy bonito el lugar ―dijo Kilian mientras que se paraba junto a ella en el hermoso jardín de su abuela―. No pensé que esta casa tuviera este hermoso jardín pasando la fuente.
―Pues lo hay ―le respondió ella―. Mi abuelo construyó este lugar para mi abuela. Ella necesitaba inspiración y mi abuelo descubrió que la naturaleza lo era. Por eso la construyó.
Hubo un silencio. Uno que a ella le hizo sentir incómoda y a él un poco más nervioso.
―¿De quién era esa canción que tocabas el otro día? ―le preguntó él.
―Era de mi abuela. La compuso para mí y me enseñó a tocarla. El otro día fue el primer día en que le enseñé a mi abuela que me la sabia de memoria.
―Pues tocas bien el piano. Deberías de enseñarme a tocar esa canción.
―Lo haré en otro momento en que os paréis más detenidamente.
―¿Y por qué no cuando tengas tus clases de piano?
―Eso se lo tienes que preguntar a mi abuela.
En pocos segundos, ambos se miraron a los ojos y en breve, él se acercó un poco más ella.
En breve, Anne bajó la mirada de Kilian, pero este se la volvió a subir.
―Eres muy bonita.
―Gracias.
Kilian sentía las ganas de besarle por un breve, pero no quiso hacerlo. Pues tenía miedo de que ella se marchase de su lado.
Anne le dio un beso en la mejilla inesperadamente y él se quedó sin saber que decir.
―Debo de irme. Tengo que prepararme para mis clases
Él asintió.
―Vuelve otro día ―dijo ella.
―Lo haré

Ella escuchó el ruido de los zapatos de alguien en el suelo parqué y paró de moverse. Eso le hizo volver a la realidad y dejar de recordar algo de su pasado.
La puerta se abrió en segundos y cuando las miradas de Demir y ella se cruzaron, él le sonrió malvadamente.
―He venido a darte el escarmiento que no te di ayer.
Ella comenzó a forcejear, pero Demir se acercó a Anne rápidamente.
―Tranquila. Solo voy a desquitarme por lo que me hicieron tus padres. Sin contar que tu padre ha sabido esconder muy bien ese documento que te hacia mia si cambiaba. Pero como no lo hice, lo quiero igualmente. Así tener más poder sobre ti.
Ella forcejeó para evitarlo. Pero enseguida notó el mismo cosquilleó en su sexo.
Demir se puso encima de la cama y le dio la vuelta a Anne.
Él sacó algo de su bolsillo. Fue con la navaja con lo que corto la cinta bondage y ahí, le hizo un corte en la zona de su sexo.
Ella forcejeó más por que comenzó a sentir dolor sobre ambos lados. Su vagina y el clítoris. Pero fue cuando notó que Demir la encorvó y tras lubricarle el ano, cuando forcejeó aún más.
En breve, Demir metió su polla en el ano de Anne y noto un breve cosquilleo. Supo que era por lo que había puesto en el sexo de ella.
Ella forcejeó para quitárselo de encima, pero Demir la cogió por las caderas y comenzó a penetrarla con rapidez.
Las lágrimas comenzaron a brotar en ella y el notó sus sollozos entre sus gemidos. Eso le hizo sonreír.
Cuando Demir consiguió el clímax e hizo de sus embestidas más lentas.
Él sintió el clímax aún más fuerte y volvió a dar embestidas más fuertes.
En pocos segundos, Demir terminó por correrse y Anne continuó con sus gemidos.
Cuando se cercioró que había terminado, Demir volvió a girar a Anne y mirándole a los ojos le dijo:
―Voy a soltarte. Pero no pienses que lo que ha hecho tu padre, se queda así.
Después comenzó a rasgar la cinta bondage y cuando terminó, se marchó. Apagando en breve el vibrador.
Ella se quitó enseguida el vibrador y en breve, la cinta de la boca.
Anne se enroscó en la cama y comenzó a llorar. Tanto que se maldijo por no saber nada de ese documento. Tanto lo hizo que se olvidó del tiempo y de lo que podía pasarle después de que saliera de aquella habitación.

Él volvía a Gales, tras despedirse de la mujer que amaba, mientras que el avión estaba en el aire, pensó tanto en Aysel que quiso dejar esa vida junto a su hermano y estar a su lado.
Osman trabajó en unos documentos de la facultad, mientras que el avión llevaba a su destino. Pero no dejo de pensar en Aysel.
Él se preguntó como estarían las cosas por la casa y como estaría Anne. Pero no se extrañaba que Demir le hiciera de las suyas. Y más con algo con lo que estaba obsesionado.
Osman pidió una copa de licor, mientras que dejaba pensar en lo que estaba ocurriendo. Pero él estaría dispuesto a decir donde estaba Anne con tal de que Demir la dejase en paz.

Él estaba viendo unos informes de trabajo, cuando tuvo un escalofrío intenso.
De pronto, algo se le vino a la mente.
Kilian fue hasta la caja fuerte y saco de ahí unos documentos que Víctor le entregó a la misma vez que la educación de su hija.
Cuando abrió la carpeta y comenzó a leerlo, recordó aquellas palabras de desesperación en ese momento: Recuerda destruir el documento en momentos difíciles. Si él encontrase a Anne, el querría este papel para dominarla y hacerla sentir la mujer más desdichada del mundo.
Y cuando terminó de leerlo, se dio cuenta que no tan solo era un poder para tener bajo control a Anne, si no, un papel que Víctor formó donde le daba el poder para tener todo lo que era suyo. Algo que por fin logro entender tras semanas sin entender por qué tenía ese afán de proteger tanto a su única hija.
Kilian se preguntó por qué Víctor firmaría algo tan delicado como eso. Mas aun cuando sabía que Demir no iba a cambiar.
Él fue hasta la cocina y quemó el documento. Dejando a Anne libre de ese papel. Fue cuando recordó que Víctor le dijo que era el único papel que había. Y lo hizo, pensando en Anne. Pero también en lo mucho que la amaba.
Después de eso, volvió al despacho. Ya que sabía que trabajar es lo único que no le hacía pensar en lo que estaba sucediendo.

Ella no dejó de pensar en lo ocurrido, mientras que a su vez pensaba en Kilian y él bebe.
La puerta de la habitación se abrió y cuando Anne observó que era Demir, no le dijo nada.
Él se acercó a ella y esta comenzó a temblar.
―He venido a buscarte para cenar.
―No tengo hambre.
―Tu misma.
El volvió a marcharse, pero antes de salir de la habitación, Anne le dijo de pronto:
―¿Qué es lo que decía ese convenio?
―Eso es algo que no te importa.
―Si que me importa.
Demir se volvió a girar y ella levantó su cabeza para mirarle.
―Ese convenio me cedía todo lo que tu padre cuando no estuviera. Incluso poder sobre ti. De nada me sirvió matarle.
―Mi padre no firmaría algo así y si lo hizo, destruiría el documento cuando se enteró de que me maltratabas.
Demir cerró la puerta y fue hasta a ella.
―Pero eso a mí me da igual, Anne ―le dijo―. Ahora estás conmigo y tengo poder sobre ti. Ya has visto de lo que soy capaz de hacerte.
Ella se volvió a tumbar y no le dijo nada.
―Como siempre lo hiciste y sigues haciendo ―le respondió ella.
Pero él no le dijo nada.
El silencio fue tan incomodo que el volvió hacia la puerta de la habitación, mientras le decía:
―Le diré a Walter que te suba algo de cenar.
Pero ella no le respondió.
Demir terminó de marcharse. Dejando a Anne muy pensativa.
Tras unos minutos, Walter apareció con la cena y se la dejó encima del tocador. Pero Anne ni siquiera la miró. Pues cerró los ojos para olvidarse de aquella pesadilla.

Tentaciones Ocultas (Mi Amuleto #3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora