Capitulo 8 - Grandes avances

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Comienza a escribir tu historia

Asi tras unas cortas vaciones en Paris regresamos a nuestro hogar,  Max seguía dormido en su habitacion el viaje fue largo y cansador, despues de un cambio de pañal cayo rendido asi que lo acoste en su cama, lamentablemente para mi tengo que desempacar todo y aunque me gustaria ir a dormir mañana no tendre tiempo para desempacar.

Mientras ordenaba la ropa escucho ruido desde la piesa de Max, al dirigirme veo que el pobre a tenido una pesadilla. Su rostro estaba lleno de lágrimas y su chupete se había caído de su boca.

"Papi, Papi", me llamaba mi pequeño, "¿Como estas mi amor?, tuviste una pesadilla no te preocupes aca esta tu padre que te defendera de cualquier monstruo" abrazando a mi pequeño ruiseñor lo consolaba y esperaba que cayera en un sueño nuevamente.

"Papi pipi papi",  la pesadilla de mi bebe hizo que llenera todo su pañal, asi que no me quedo de otra que cambiarle el pañal, despues de tantos años, ya tenia una experticie inigualable. Despegue las cintas para encontrarme una gran mancha amarilla en el pañal y un poco de enrogecimiento en el cuerpo de mi niño retiro el pañal y procedo al limpiar todo, levanto un poco sus piernas; el pipi fue tanto que escurrio por todas partes, como estaba enrojecido use un pcoo de balsamo y crema para ayudar  a que se alivie cuando estoy por cerrar el pañal me doy cuenta que mi pequeño ya estaba dormido asi que cierro su pañal y lo acomodo  para arroparlo y volver a ordenar.

A la mañana siguiente ya tenia todo alistado, Max estaba jugando y listo para salir en cualquier momento en lo que me terminaba de alistar escucho el claxon sonar, salgo a ver desde la ventana era él, después de tantas conversaciones por Instagram y Facebookeando, por fin nos volveríamos a ver seria nuestra primera cita, mi corazón palpita como loco creo que se me va a salir, ¿mi cara no estará roja o sí?.

Abrocho mi cinturón en lo que escucho tocar la puerta, me miro en el espejo revisando que este todo es su perfecto lugar, te listo los condones por si algo llega a suceder, vuelvo a ver a Max que seguía jugando, me dirijo a la puerta pero antes de abrirla me mentalizo.

Tom es solo una cita ya haz tenido mil de ellas, debes tranquilizarte sonreírle y decirle buenos días; aunque ya van casi 13 años desde que no sales con nadie y ¿que pasa si lo aburro? ¿me encontrara muy viejo? no me he cuidado desde hace años ¿estaré gordo?, ¿la ropa se me vera bien?, ¡Ya basta Tom! no pienses eso se positivo, se positivo...

Ring... ring...

El sonido del timbre me despierta de mi monólogo interior con toda la valentía que tengo abro la puerta, ahi esta que le digo que hago.

- XXX - Hola Tom, ¿estás listo para salir?

Se podia ver a simple vista el enrojecimiento de su cara cuando me pregunto si estaba listo como podía ser tan lindo.

- Tom - Hola sí, pasa solo estoy esperando que llegue la niñera pasa por favor esta por llegar solo unos 10 minutos más y nos podemos ir.

- XXX - Gracias, que linda casa tienes y ¿donde esta tu hijo?

- Tom -   Max esta en la sala ven sígueme.

Nos dirigimos a la sala no creo que haya escuchado el sonido de mi corazón, siento que se va a salir, maldita sea como me puedo poner tan nervioso si es solo una maldita cita por el amor de dios.

- Tom - eh Sam, si quieres te puedes sentar en el sillón, ¿quieres un cafe un te o algo? mientras esperamos.

- Sam - Un cafe seria genial.

- Tom - Voy a hacer el café vuelvo en seguida.

- Sam - Hola pequeño, ¿cómo estás? ¿A qué estás jugando?

Hola, dice Max sin voltear la cabeza inmerso en su juego, parece que no obtendré mas respuesta que eso así que reviso mi celular aun teníamos 1 hora casi para la reservación teníamos tiempo para esperar que la niñera llegará, espero que todo salga bien esta noche llevo planeando esta cita por varios días, y Tom esta tan guapo no hace notar su verdadera edad si mo supiera que va por lo 40 pensaría que tiene 30.

- Sam - Aquí esta el cafe, no se si te gusta solo o no así que traje el azúcar y endulzándote para que tu veas.

- Sam  -  Gracias.

Recibido la taza y le pongo dos de azúcar no soy muy buena con lo amargo, mientras nos tomábamos el cafe empezamos a platicar, nos contamos nuestros orígenes; donde nacimos, donde crecimos, Tom me contó lo de su esposa, estábamos tan absortos en la conversación que ni nos dimos cuenta de la hora, si no es por la llamada que recibe Tom hubiéramos seguido así por horas.

¡Riiin, riiin!

- Tom - Hola si Cristina... si... aja..... esta bien okey, gracias por avisar, nos vemos adios.

- Tom - Como lo siento Sam no podré ir al restaurant hoy, la niñera que cuidaría a Max no podrá venir al parecer tuvo un inconveniente, perdóname de verdad lo siento mucho.

- Sam - Esta bien Tom no te preocupes podemos hacerlo otro día.

- Tom - De verdad lo siento mucho se que lo tenias todo planeado y que tu horario es complicado nose cómo compensarte, ni siquiera puedo llamar a otra niñera por el poco tiempo que nos queda.

- Sam - Esta bien Sam de verdad entiendo perfectamente son cosas del destino, mira en vez de perder la salida si no te molesta podemos ir a mi casa con Max y preparamos juntos la cena sino te importa claro, la verdad es que soy un excelente chef y no es por que lo diga yo pero los huevos fritos con jamón me quedan para morir. Jajaja

- Tom - ja ja ja  me encantaría cenar en tu casa y de verdad discúlpame por todo.

- Sam - Para Tom si sigues disculpándote me enojare de verdad esto no fue tu culpa y no me molesta.

- Tom - Esta bien dis...

Antes de que terminara la oración le lanzó una mirada amenazadora haciendo que se detenga a la mitad. Es tan lindo cuando se avergüenza creo que fue mejor que la niñera no haya venido, una cita en casa es mucho mejor seremos solo los 2 bueno 3 pero es igual. Justo cuando estábamos riéndonos de la situación llega Max.

- Max - Papi, Papi tengo hambre.

Mi bebé llego corriendo a abrazarme y con su carita bonita me pide algo para comer, miro a Sam y le pido que espere un momento mientras hago una botella de leche para Max y alisto sus cosas para salir.

En unos pocos minutos tengo todo y nos subimos al auto de Sam, Max va en la parte de atrás en su silla de niños tomando su leche, mientras nosotros conversamos.  De verdad espero que esto salga bien.

Así continuamos hasta llegar a la casa de Tom.

Mi pequeño hombrecito Donde viven las historias. Descúbrelo ahora