Cuando finalmente llegó el sábado, Susan volvió a despertar antes del amanecer a su hijastro. "Vamos Susan" se quejó Timothy cubriéndose la cabeza con una manta. "Déjame dormir un poco más. ¡No tengo que ir a la escuela hoy!"
- "Lo sé dormilona, pero tenemos un día ajetreado por delante. Bien sabes que el trabajo de una mujer nunca termina, así que despierta".
El chico se levantó de mala gana yendosé al baño. Después de una ducha rápida regresó a su habitación y se quedó sin aliento cuando vio lo que había en su cama. "Realmente no esperaras que me ponga esto, ¿verdad?" preguntó con horror señalando a una prenda de color rosa claro.
- "¡Ni se te ocurra volver a empezar señorita! ¿No recuerdas lo que hablamos hace dos días?"
- "Claro que lo recuerdo pero... ¡no puedo usar sujetador!"
- "¿Por qué no? Todas las chicas lo usan"
- "No soy una chica Susan"
La mujer suspiró molesta. "Mira Timmy si vas a seguir actuando de esta manera, ¿por qué no simplemente renuncias a toda esta guerra con tu padre y vas a esa academia militar a la que tanto desea mandarte?"
-"¿Qué?"
- "Te lo he dicho un millón de veces... no lo derrotarás a menos que realmente te esfuerces. Tienes que creer que quieres ser una chica, y en lugar de eso estás haciendo un gran escándalo por una idea tan tonta como usar un simple sujetador"
- "Lo siento Susan" dijo el chico mirando sus pies, "Supongo que tienes razón, pero... me veré ridiculo con sujetador", afirmó convencido de que era una buena excusa. "No es como si tuviera algo para llenarlo, ¿verdad?"
- "Cielo de verdad, todavía tienes mucho que aprender" dijo la mujer mirándolo con algo de lástima. "¿De verdad crees que todas las chicas pueden llenar naturalmente sus sujetadores?"
- "Umm... ¿sí?" Dijo Timothy sintiéndose estúpido y avergonzado a la vez ya que estaba demostrando su más que evidente inexperiencia con las chicas.
- "Estás equivocada, muchas chicas de tu edad necesitan ayuda en este sentido ya que sus cuerpos tardan un poco más en desarrollarse, es por eso hay inserciones de almohadillas de sostén". Dijo, mostrándole al chico dos pequeños implantes de silicona. Timothy miró esas cosas con los ojos muy abiertos, era evidente que Susan estaba realmente comprometida para hacer que su pequeño plan fuera un éxito, parecía tener siempre todo bien atado de antemano. "Entonces, ¿Y ahora vas a ser una buena chica y te probarás tu bonito sujetador por favor?"
- "Esta bien Susan" Dijo Timothy cediendo finalmente, sabiendo que era inútil seguir resistiendo. Primero se puso el par de bragas a juego con el sujetador recordando meter sus partes íntimas entre las piernas. A continuación agarró el sujetador y deslizó los brazos por los tirantes, pero no tenía idea de cómo se suponía que debía abrocharlo a la espalda.
Susan acudió de nuevo en su ayuda. "Ya se que esto es algo nuevo para ti, pero te será más fácil si lo abrochas al frente y le das la vuelta, déjame mostrarte como se hace" Mientras Timothy la observaba no pudo evitar el sentirse una vez más como un perfecto mariquita. "¿Ves? Así es como se supone que debes hacerlo. Ahora toma tu sujetador para que puedas hacerlo tú misma"
Fueron necesarios tres intentos hasta que la mujer finalmente estuvo satisfecha con los esfuerzos del chico. Luego lo ayudó a ajustar los tirantes e insertó las implantes en las copas. No eran tan grandes Susan le dijo que sus senos eran solo del tamaño de una copa 75A... por ahora. Pero aun así Timothy sintió que era muy extraño tener ese volumen extra en su pecho.
- "Ya te acostumbrarás cariño" le aseguró la mujer al notar su malestar. "En unos días ni siquiera te darás cuenta de que estás usando sujetador pero al mismo tiempo no podrás vivir sin el apoyo que le brinda a tus chicas", agregó en broma "¿Quieres ver cómo te ves? "
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Tira y afloja
AlteleTimothy comienza una nueva batalla contra las normas militares de su padre