That Thing Called Love (Harry Styles)

Capítulo 16

Hello tweetties! ¿Cómo andan? Espero que tengan el mejor de los días porque se lo merecen.

Quiero disculparme de antemano por las malas palabras que van a leer en este capítulo. Son necesarias para la escena en donde se llevan a cabo. Pero si alguna se siente ofendida, por favor, dicúlpenme.

Cuatro capítulos más le quedan a esta novela. Pero pueden encontrar adelantos de la próxima que voy a subir cuando esta se acabe: "Shamrock Fields" en mi tumblr. Ya la he actualizado con las carátulas, el argumento y los personajes. Pronto aparecerán los adelantos.

¡Disfruten del capítulo!

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Habían pasado dos semanas desde que Harry y yo habíamos terminado. Y de su vida no tenía noticias.

Me asustaba al pensar qué le podría haber pasado. No venía al colegio; no salía con sus amigos; y cada vez que pasaba por su casa, esta parecía estar deshabitada. Lo único que me aliviaba era el hecho de que al menos asistía a los entrenamientos de básquet, según lo que me decía Zayn.

La campana que avisaba que la hora de historia había terminado comenzó a sonar. Me levanté de mi asiento y me acerqué a Zayn, que estaba saliendo de la clase junto a Gaby.

—Zayn —llamé su atención—, ¿puedo hacerte una pregunta?

—Claro —respondió sonriendo.

—¿Por qué Harry no está viniendo al colegio? ¿Qué es lo que le está pasando?

—Esas fueron dos preguntas —comentó Gaby, tratando de ponerle humor a la situación, cosa que no funcionó.

El silencio que se había formado me resultaba muy incómodo. No era una respuesta difícil, no sé por qué tardaba tanto en responderla.

—Ya conoces la respuesta —terminó diciendo antes de irse.

La mirada en sus ojos me dio a entender que Harry estaba faltando por mí. No quería cruzarse conmigo en ningún lado, por eso no venía al colegio y sólo asistía a los entrenamientos.

¿Por qué? ¿Por qué Harry hacía todo más difícil?

Me dirigí a mi casillero para dejar los libros de historia y buscar los de literatura, que iba a ser mi última clase por ese día. Cuando lo abrí un pequeño papel cayó al suelo. Lo levanté y lo leí:

“Eres peor de lo que creía, mosquita muerta. De esta no sales más —A.”

Miré para el costado y mi vista se centró en Leslie, quién también me estaba observando. Ella sólo negó con la cabeza, dándome a entender que ella no había sido la autora de la nota.

—¡Eres una perra! —escuché a alguien gritarme.

Me di vuelta para encontrarme con una Moon completamente irreconocible. Sus cabellos estaban completamente alborotados y su ropa estaba rota, como si hubiera sido víctima de un asalto en la calle.

No me dio tiempo a responder que ya me había empujado fuertemente contra los casilleros. Los libros se me cayeron de los brazos y tuve que sostenerme de algo para no caerme.

—¡Eres peor de lo que pensaba, hija de puta! —dijo pegándome una cachetada— ¿Cómo pudiste hacerle eso a Harry? ¿Eh? ¿Cómo te atreviste? ¡Eres una zorra!

Me tomó por los hombros y me empujó más fuerte que esta vez sí caí al piso. No podía reaccionar, el golpe en la cabeza me había dejado casi inconsciente.

Aún podía sentir a Moon encima de mí, pegándome, tironeándome del pelo, pero al poco tiempo mis fuerzas se desvanecieron y terminé introduciéndome en una nube negra.

.

La brillantez de una luz blanca sobre mis ojos hizo que me despertara.

Me dolía todo. No podía moverme.

¿Dónde estaba? No me acordaba cómo había llegado a la cama de un hospital.

—Estás despierta —comentó una voz femenina. Leslie.

—¿Qué pasó? ¿Por qué estoy aquí?

—Moon tuvo otro ataque de locura y se desquitó contigo, dejándote en el hospital —mi cara debió de representar mucho miedo, porque se apresuró a agregar algo más—. Quédate tranquila, las autoridades del colegio la encerraron en un centro de rehabilitación.

—¿Dónde están mis padres?

—Están en la sala de espera. Se acaban de ir de la habitación —explicó—. Gaby y Zayn también vinieron a verte más temprano… Lo mismo que Harry —informó.

—¿Harry estuvo aquí? —pregunté esperanzada.

—Fue el primero que vino cuando le conté que estabas aquí.

Los ojos se me llenaron de lágrimas. Harry había venido a verme… ¿Significaba eso que me quería?

—Vicky, tienes que escucharme —comenzó Leslie. Yo sólo la miré esperando que continuara—. Conozco a Harry, es mi hermano. Así que sé distinguir cuando miente, cuando dice la verdad, cuando está triste, cuando está feliz. Por eso sé que le afectó demasiado su separación.

—No tendría por qué, si nuestra relación nunca significó nada para él —comenté dolorida.

—Victoria, ¿puedes abrir los ojos, por favor? —rogó—. ¿Crees que Harry faltaría dos semanas al colegio si hubiese sido Moon la que lo hubiese dejado? —enfoqué mi vista en un ramo de flores que había en una mesa— Vicky, por favor, escúchame. Harry está enamorado de ti.

—No es cierto —dije con la voz quebrada.

—Vicky, soy su hermana. Sé lo que te digo —no iba a creerle. No—. Hablé con él… Y fue la primera vez que lo vi llorar por una chica —ese comentario llamó mi atención—. Harry no llora nunca. Por nada en el mundo. ¿Sabes lo desgarrador que fue verlo en ese estado?

—¿Por qué me cuentas esto? —las lágrimas comenzaron a mojar mis mejillas.

—Porque los quiero ver a ambos felices —dijo seriamente—. Mira, no voy a contarte la historia porque eso es algo que debe contarte él, pero debo decirte que él está muy arrepentido de lo que hizo y si no va al colegio, es porque no sabe cómo enfrentarte.

—Gracias, Leslie —dije luego de un momento—. Pero necesito que te vayas.

—Está bien —dijo—. Ya cumplí mi misión aquí. Ya te dije lo que debía decirte.

—Bien.

—Sólo lo último —dijo cuando se encontraba en la puerta—, las flores te las envía él, pero no volverá a visitarte.

—Está bien.

—Vicky, Harry realmente te ama —dijo por último y desapareció.

Dejé que mi llanto me consumiera. Necesitaba descargarme a más no poder. No sólo por Harry, sino también por lo sucedido con Moon.

No quería ver a nadie. Necesitaba estar sola.

Sin embargo, estaba tan cansada que luego de unos minutos volví a adentrarme en los brazos de Morfeo.