Capítulo 20

1.8K 38 10
                                    

Hello my tweetties! ¿Cómo andan? Espero que sea de lo mejor. Por mi parte ando media enferma, creo que mi mamá me contagió... ¡Y yo que estaba festejando que había sido la única de la familia que no había sido infectada!

Bueno, después de un largo tramo recorrido, llegó el final de la novela... Por ahora. El sábado les subiré el epílogo :)

Quiero agradecerles por su apoyo incondicional, sus votos y todos esos hermosos comentarios que me dejan y que me alegran el día sobremanera. Me hacen muy feliz.

No se pongan tristes. El lunes 18/02 voy a empezar a subir Shamrock Fields. Me tomo una semana de descanso para poder adelantar con los capítulos, porque va a ser una novela donde actualizaré seguido por diferentes motivos (probablemente, tres veces por semana).

Espero que disfruten de este capítulo y que les guste la sorpresa que Harry le preparó a Tory porque las vi a todas muy entusiasmadas con eso.

Enjoy!

********************

Luego de una hora de viaje, llegamos a destino. El lugar elegido era una reserva que se encontraba en las afueras de la ciudad. Era un lugar enorme al aire libre y completamente hermoso.

Harry bajó del auto y a los poco segundos estaba abriéndome la puerta, ofreciéndome su mano, para que yo también bajase.

—¿Te gusta? —preguntó al verme tan asombrada por lo que estaba viendo.

—Me encanta —admití tomándolo de la mano y comenzando a caminar.

El pasto era de ese color verde que jamás había visto, de esos que sólo existen en las películas. Las copas de los árboles estaban todas florecidas y las flores que comenzaban a florecer, brindaban más color al lugar. Era un lugar de ensueño, al que se le sumaba una gran laguna en el medio de la reserva.

Me senté a orillas de la laguna, mientras esperaba que Harry sacase del auto todo lo que había preparado para ese día. Luego de unos minutos, una enorme manta a cuadros estaba tirada en el pasto con muchas de las cosas que, según Harry, había cocinado o preparado él mismo: tostadas, un bizcochuelo de limón, jugo de naranja, té helado, galletitas y varios dulces frutales para acompañar las tostadas.

Harry pensaba que tenía el estómago de un rinoceronte por toda la comida que había traído. Por más que me gustara mucho comer, no era un caníbal. Pero creía que Harry lo era. ¡Se había comido prácticamente todo! Mientras que yo apenas había comido un pedazo de bizcochuelo y dos tostadas… Todo porque ya había desayunado en mi casa. Esa había sido una mala idea.

Nos acostamos sobre el pasto, luego de haber guardado todo lo que había sobrado en el auto, para digerir todo lo que habíamos comido. Mientras estábamos ahí, hablábamos de cosas sin sentido, admirábamos el paisaje y nos mirábamos como dos tórtolos enamorados. Y así era cómo estábamos. Pero no queriendo dar el brazo a torcer, no quería acelerar la reconciliación. Prefería seguir estando de la manera en que estábamos en esos momentos, disfrutando de la compañía del otro sin que nada importara, sin tener que llegar a formalizar la relación.

—¿Qué tienes ganas de hacer? —preguntó Harry en un momento.

—Es casi la hora del mediodía —dije observando mi reloj—. No creo que almorcemos debido a todo lo que hemos comido ya, así que… ¿Te parece ir a recorrer el lugar? —propuse.

—Con una condición: te reto a una carrera.

—Trato —dije parándome. Él me miró divertido—. ¿Qué?

That Thing Called Love (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora