CAPÍTULO 8

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SeokJin observaba a su hermano dormir entre sus brazos luego de haber llorado tanto por lo que había sucedido horas atrás. Se sentía culpable pues no había logrado sacarla antes de que él llegara, quería que él olvidara quién era ella pero era algo imposible, nunca olvidaría a la mujer que le había hecho tanto daño a él ni a su hermano.

Luego de un rato más pudo sentir cómo Jungkook se removía en aquella cama para luego despertar. SeokJin sonrió y sólo comenzó a flexionar su brazo pues éste se había "dormido" al tener el peso de Jungkook por tanto tiempo.

- Hyung...

- ¿Te sientes bien? - preguntó sentándose mientras observaba cómo el azabache comenzaba a ponerse su abrigo. - ¿Qué estás haciendo? ¿Vas a salir? - preguntó curioso para luego seguirlo logrando encontrar a Taehyung sentado en el sofá viendo una película.

- ¡Hyung! - sonrió al ver al castaño - mi papá está por venir, ¡voy a presentártelo! De seguro le caes bien - rió levemente poniéndose sus tenis.

Ambos chicos en aquella sala se quedaron viendo entre sí, Taehyung estaba muy confundido, mientras que SeokJin... sólo quería llorar. Sacó su teléfono para así ver que ya eran las 6:30 de la tarde, la hora en que años atrás su padre volvía de trabajar. Jungkook siempre iba a esperarlo en el jardín tal y cómo lo hacía cuando era un niño.

- Jungkook... - musitó SeokJin para luego tomarlo de la muñeca. Ambos se vieron a los ojos, fue ahí cuando el mayor pudo notar el mismo brillo de siempre.

- Se nos hace tarde, papá vendrá pronto, iré por él - sonrió nuevamente para luego soltarse del agarre de su hermano e ir a la calle observando con total esperanza el auto de su padre.

SeokJin suspiró viéndolo desde la puerta hasta que sintió la mano de Taehyung sobre su hombro, éste lo sonrió y sin decir nada caminó hasta dónde estaba el menor quien seguía entusiasmado por ver llegar a su padre.

- Taehyung-ah, estoy... muy seguro de que le caerás muy bien a mi padre - sonrió - Le diré que te prepare espaguetis con albóndigas, es su especialidad, son muy deliciosas - metió sus manos en su abrigo gracias al viento frío que chocaba contra él.

- ¿En serio? - observó al menor con una sonrisa triste - me encantaría probarlas. ¿Crees que yo le puedo caer bien?

- Claro que si, él es... genial, ¡Ya lo verás! - habló emocionado.

Ambos se sentaron en la banqueta, los minutos pasaban y la sonrisa de Jungkook poco a poco se iba desvaneciendo al no ver rastro de llegar. Sus lágrimas comenzaron a salir por lo que Taehyung con algo de timidez rodeó sus hombros para así atraerlo a su cuerpo notando cómo el azabache se acurrucaba en su pecho.

El susodicho abrazó un poco fuerte al adverso para luego tratar de no seguir llorando. De nuevo, su padre no había llegado y ahí es cuando se daba cuenta de nuevo que él ya no estaba en aquel mundo.

- Lo siento... - musitó sorbiendo su nariz - Papá ya no está aquí

- Claro que está aquí - sonrió Taehyung levantando la mirada hasta el cielo viendo la gran y hermosa luna sobre ellos, y a su lado, una brillante estrella - Él está ahí - señaló.

Jungkook limpió sus ojos para luego desviar su mirada hasta la estrella que Taehyung le señalaba.

- Buenas noches, señor Jeon, mi nombre es Kim TaeHyung - se presentó ante aquella estrella, algo que hizo sonreír al menor. - ¿Quién soy yo? Uhmm, soy amigo de su hijo - sonrió.

- Hyung...

- ¿Usted vio todo lo que su pequeño hizo por mí? Wah, es un chico estupendo, ¿no es así? - volteó hacia el adverso que muy conmovido prestaba atención a su mayor.

- Entonces... si papá nos está viendo... vio cómo me coqueteabas hoy - rió leve ante la expresión del castaño.

- ¿Eh? ¿Yo? No le haga caso, señor Jeon, yo no estaba coqueteando, su hijo quería que yo coqueteara con él - levantó sus cejas dos veces seguidas para luego sonreír sin mostrar sus dientes.

- ¡No es cierto! - se quejó el azabache riendo algo apenado.

Ambos se quedaron viéndose mutuamente por unos segundos hasta que fue el mayor quién acarició con delicadeza la mejilla de Jungkook para luego limpiar los rastros de lágrimas bajo sus ojos.

- Debemos volver adentro, hace mucho frío - musitó Taehyung viendo al menor asentir. Fue él quien se puso de pie primero para luego extender extender mano al menor y así ayudarlo a pararse. - Fue un gusto conocerlo, señor Jeon, y no se preocupe, yo cuidaré muy bien de su pequeño - sonrió haciendo una leve reverencia hacia la estrella frente a ellos. - ¿uhm? Oh, claro, yo le digo

- ¿Q-qué te dijo? - preguntó tímido desviando su mirada hasta la estrella por unos segundos hasta volver con Taehyung.

- Dice que... él siempre estará contigo y con tu hermano, también dice que no debes llorar porque no le gusta ver a su pequeño con lágrimas en su linda carita - sonrió tomando su mano e inconscientemente entrelazar sus dedos.

Jungkook sonrió una vez más para luego ver hasta el cielo y así cerrar sus ojos. Frunció un poco su nariz para luego de unos segundos volver a abrir sus ojos.

- ¿Qué haces?

- Le pedí a papá... que me ayude a nunca olvidarlo - musitó triste.

Taehyung soltó un pequeño suspiro para después acariciar el cabello de éste. Ambos volvieron se dieron la vuelta para así comenzar a caminar hacia la casa de nuevo. Jungkook caminó hasta la cocina sin soltar la mano del castaño, fue ahí cuando vio a su hermano cocinar los espaguetis con albóndigas que le había dicho a Taehyung.

SeokJin al darse la vuelta notó sus manos por lo que sólo observó a ambos hasta que el castaño lo soltó un poco tímido y sonrojado pues ni siquiera se había dado cuenta que seguían con sus manos entrelazadas.

- Vayan a lavarse, la cena ya está lista - indicó.

Jungkook asintió y caminó hasta el baño para poder hacer lo que su hermano le había pedido, Taehyung iba a ir detrás pero la voz de SeokJin lo detuvo.

- Taehyung...

- ¿Si? - volteó hacia el mayor.

- Gracias - sonrió - mi hermano no se equivocó en escogerte a ti - bajó la mirada hacia los platos para luego servir la comida. - Pero te estaré vigilando, eh, ya me di cuenta de cómo ves a mi hermano.

- ¿E-eh? Y-yo no lo veo de ninguna forma - respondió tímido rascando su nuca.

- Si, y yo nací ayer. Ahora ve a lavarte - acotó.

Taehyung asintió y fue casi corriendo hasta el baño. Su corazón comenzó a latir rápidamente y fue aún más cuando chocó con el menor cayendo sobre él. Ambos se quedaron quietos y en silencio pues estaban bastante cerca hasta que la voz de SeokJin hizo que Taehyung se levantara rápidamente para luego ayudar a Jungkook. Estaba comportándose muy bobo.

MEMORIES LIKE SHOOTING STARS | Taekook [ HIATUS ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora