MEMORIES LIKE SHOOTING STARS | Taekook [ HIATUS ]

CAPÍTULO 21

SeokJin movía con los palillos los pequeños trozos de carne sobre la parrilla en aquella mesa mientras que Jungkook seguía comiendo de su plato. Ambos chicos charlaban sobre distintas cosas, fue ahí cuando el menos se dio cuenta que su hermano no era cómo antes, ahora ya no contaba sus chistes malos, ya ni siquiera sonreía. Hoseok había dejado un gran vacío en su corazón.

Por su mente pasaban miles de recuerdos junto al susodicho, siempre habían sido una pareja perfecta, veía a su hermano ser cómo nunca hasta que los últimos dos meses todo cambió. Siempre estaba molesto, triste, distraído... y muchas cosas más. Hoseok estaba algunas veces pero ya todo era más incómodo, la tensión entre su hermano y el susodicho era tan evidente que incluso él sufría en sus discusiones. Hoseok había sido el primero en haber sido su amigo. Lo extrañaba tanto.

— Jungkook... — llamó mientras colocaba la carne en ambos platos — nuestra... madre... — tragó saliva — no sé cómo supo mi número de teléfono pero a estado mandándome muchos mensajes pidiéndome dinero. También dijo que la abuela quería hablar con nosotros.

— ¿Abuela? Oh... ¿hace cuanto no la vemos? Fue... cuando...

— Sí. Al parecer ella estuvo presionando todo este tiempo a mamá para que le dijera dónde estábamos nosotros. Ya sabes que no se llevan bien y... la sigue culpando de la muerte de papá.

— ¿Y qué pasó?

— No lo sé — suspiró — a lo que voy es que, vi los mensajes en la mañana y... creo que al fin mamá le dio mi número. Al principio lo ignoré porque pensaba que era un número equivocado pero luego dijo que me llamaría a las 8 — llevó su mirada hasta su muñeca para así ver la hora — bueno, no falta mucho.

— ¿Y si... nos quieren separar?

El mayor sonrió y llevó un poco de fideos hasta la boca de su hermano el cual recibió aquello para luego comerlo.

— Eso es imposible, siempre me tendrás contigo — sonrió — aún si llegase a pasar algo... siempre estaría contigo.

— Hyung, ¿odias a mamá? — levantó la mirada — ¿Qué fue lo que nos hizo?

— ¿No... recuerdas?

— ¿Recordar? No... ¿qué fue lo que nos hizo? Aunque no sé quién sea ella — llevó comida a su boca de nuevo.

SeokJin permaneció en silencio observándolo por unos segundos, de nuevo había olvidado a aquella mujer. Siempre le era difícil recordarla.

Ambos siguieron hablando de otra cosa hasta que por fin terminaron de comer. Fue el mayor quien pagó la cuenta para así salir y regresar a casa. Estaba tan consternado, se sentía cansado y débil. No sabía cómo había llegado a ese punto, y con Jungkook todo era un poco más difícil, no obstante, no le importaba, sólo quería que él se encontrara bien.

— Hyung, ¿podemos pasar a comprar golosinas? Quiero ver una película contigo esta noche — habló el menor.

Al cabo de unos minutos llegaron a una pequeña tienda que se encontraba a unas cuadras de su casa, estacionaron las bicicletas y finalmente entraron a aquella tienda. Había demasiada luz.

Ambos comenzaron a andar por los pasillos siendo Jungkook el que escogía todo lo que quería. Siempre le había gustado ir de compras, aunque algunas veces se excedía y debían dejar cosas para que les alcanzara el dinero.

SeokJin se distanció y fue hasta uno de los refrigeradores para así tomar algunas bebidas hasta que alguien por detrás chocó con él haciendo que aquellas latas cayeran y comenzaran a expulsar el líquido.

— No puede ser... ¡perdón! Yo no pude ver... — se disculpó aquel empleado dejando las cajas que llevaba en brazos sobre el suelo para luego ir rápido por el trapeador.

El castaño suspiró y se puso de cuclillas levantando las latas para así ayudarle a aquel desconocido hasta que llegó a limpiar.

— Discúlpeme — pidió haciendo una pequeña reverencia al terminar.

— No te preocupes — sonrió — no podías ver — desvió la mirada hasta aquellas cajas con productos.

Al volver la mirada hacia el azabache sintió sus mejillas comenzar a calentarse, la forma en que éste lo veía y sonreía al mismo tiempo lo hacían ponerse tímido, además de que era un poco más alto que él.

— Namjoon hyung, Jimin no quiere traer las demás cajas y... — se quedó en silencio al ver quién se encontraba con su compañero — O-olvidalo, iré yo — respondió al instante para luego salir casi corriendo de ahí.

Seokjin se sorprendió un poco por haber visto a Taehyung de nuevo, se sentía apenado por lo que había sucedido con él, no obstante, no le gustaba mucho su presencia, aún así, se sorprendió de saber que había conseguido trabajo.

— ¿Te gustan las de limonada? — preguntó Namjoon tomando las latas dañas para así meterlas sobre una bolsa — ya que fue mi culpa esto... puedes llevarte otras dos completamente gratis — sonrió.

El castaño llevó su mirada hacia aquellos hoyuelos, nunca había visto una persona con ellos y... le parecían muy lindos... al igual que el chico frente a él.

— N-no... no es necesario, no quiero que te cobren todo a ti — respondió nervioso — te pagaré por estas y por las que se cayeron.

— Por favor... — pidió tomando aquellas dos latas llevándolas hasta las manos del más bajo — tómalas, haz de cuenta que son cómo un regalo de mi para ti — sonrió de nuevo.

Por otro lado Jungkook seguía escogiendo qué bolsas de frituras se llevaría. Estaba tan indeciso que quería llevarse ambas pero no sabía si su hermano tenía el suficiente dinero para llevar tanto.

— Disculpe hermoso jovencito, ¿necesita ayuda para escoger?

El menor rápidamente se asustó al escuchar aquello por lo que volteó hacia atrás. En ese momento una enorme sonrisa se formó en sus labios y sin decir nada se lanzó hacia los brazos de Taehyung quién con mucha felicidad correspondió. 

— Hyung, ¿qué haces aquí? — preguntó curioso aún sin separarse.

— Pues... trabajo aquí, ¿no te lo dije? — sonrió acariciando el cabello adverso.

— Estas muy cerca de mi casa, yo creí que estarías más lejos.

— Claro que no, qué pereza — rió — además, así es cómo te puedo ir a ver todas las tardes antes de venir al trabajo.

— ¿Hola? Yo también estoy aquí — habló Jimin cruzándose de brazos al lado de aquellos dos — Claro, consiguen novio y se olvidan de los amigos — exageró.

— ¿Novio? — preguntaron ambos al unísono.

En ese momento los tres comenzaron a hablar sobre lo cerca que estaban trabajando. Jungkook se veía tan feliz de ver que Taehyung estaba logrando avanzar en su vida, estaba muy orgulloso.

— Jungkook.

Al escuchar aquella voz rápidamente se separó del mayor para así voltear hacia su hermano quien algo serio lo observaba. Al hacer contacto visual supo lo que este le quería decir por lo que sin decir nada tomó las bolsas de frituras para luego llevarlas hasta la caja en dónde una chica las estaba cobrando.

Ambos hermanos salieron del lugar dando un último vistazo hacia ambos Kim que se encontraban en la puerta viéndolos irse.

Jungkook estaba nervioso, no quería enojar a su hermano pero al observarlo notó que estaba algo diferente, mantenía una pequeña sonrisa y sus ojos brillaban. Era raro.

Por otro lado Jimin comenzó a burlarse de sus compañeros quienes quedaron tan embobados al ver a los hermanos. Aunque, en Taehyung era normal, pero, ¿Namjoon?, ¿qué le veía a Jin? No entendía nada de eso.

El azabache... creía haberse enamorado a primera vista.