«Eɴᴀᴍᴏʀᴀʀᴛᴇ sᴇʀᴀ ᴍɪ ᴘᴏᴅᴇʀ, ɴᴏ ᴅᴇᴊᴀʀᴇ ǫᴜᴇ ᴇsᴛᴇs ᴛʀɪsᴛᴇ ɴᴜɴᴄᴀ ᴍᴀs. ᴛᴜ sᴏʟᴏ ʟᴇᴇᴍᴇ ʏ sᴏɴʀɪᴇ»
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NamJoon era uno de los chicos más populares de la escuela. Tenía su grupo de amigos, pero no salía de esas personas. Era conocido por su gran...
La escritura es un arte, uno de los más fáciles de acceder. Muchos saben escribir, lo aprendemos apenas somos unos niños. Pero una cosa era redactar un simple párrafo porque se lo piden en la escuela, y otra cosa era realizar un poema. Una carta o novela, cualquier cosa que, a través de las palabras, trates de explicar que esa frecuencia que recorre todo tu cuerpo.
Muchos de nosotros no somos buenos explicando que es lo que sentimos cuando lo sentimos. Tratamos de mostrarnos sinceros, queriendo decir lo que sucede en nuestro interior, pero a penas separamos los labios para decir algo, las palabras simplemente no salen. Puede que seamos tímidos, puede que el vocabulario sea corto. O puede que simplemente no tengamos el valor.
Escribir era una forma en la que NamJoon descubrió una sutil manera de poder acercarse a su crush, al chico que mucho tachaban como "extraño". Trato de ensayar como decirlo, pero cuando planeaba reunirse con sus amigos para hacer una repasada con uno, simplemente no podía.
Trato por meses buscar una respuesta, una forma de poderle decir "Dios, date cuenta que te amo".
Curiosamente fue la escritura la que le ayudo a poder expresarse. Al inicio fueron únicamente cartas que se las guardaba para sí mismo. Lo escribía y lo guardaba, lo escribía y lo volvía a guardar. A final de mes, todo se iba a la trituradora, así nadie podría leer sus sentimientos. Luego de algunos meses, esa rutina se volvió monótona, aburrida. Ya no quería eso, le estaba hablando a la nada, no al chico que amaba.
Por eso empezó a mandarle cartas a aquel chico que hacía que su corazón se acelere en la clase de arte.
Sabía que a SeokJin le gustaba la literatura y unas de las cosas que siempre deseo es tener una historia de amor como los de la época antigua. Donde su caballero le entregaría notas de amor, proclamándole amor eterno. Él ya no quería lo típico de conocer a alguien en una fiesta y empezar a salir. Deseaba algo dulce y especial que contarles a sus hijos cuando ellos pregunten sobre cómo se conocieron sus padres.
Así que ahí estaba NamJoon, dispuesto a convertirse en el príncipe de sus sueños.
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