Emma Jhonson.
Los chicos reían a carcajadas mientras recordaban el magnífico día de ayer. Entre todos me habían hecho una corona de cartón y me la colocaron, la cual no me he quitado desde ayer y no dejo de alardear mi gran victoria.
A pesar de estar súper alegre por haber ganado, no dejo de pensar en Lucas y todo lo que dijo ayer. Esa canción... Maldición, la amo más que nunca ahora, el significado, cada letra, cada nota, cada estrofa, todo de esa canción, la amo.
Pero tampoco puedo evitar el hecho de que sus actitudes me confunden, no sé si lo dijo por la emoción del momento, si lo dijo solo por decirlo o si de verdad cada cosa dicha en esa canción describe lo que está sintiendo por mí.
— ¿Saben lo que aún no me explico? —Preguntó Sofía y todos le prestaron atención—. Él por qué el traje de Evan, tenía dos balas negras y una rosa. ¿Quién fue el traidor?
Todos los chicos se miraban confusos entre ellos y de la nada la carcajada de Mateo lo delató.
—Y yo que pensaba que me habías salvado la vida bro. —Evan negó fingiendo decepción.
—Te lo merecías. —se encogió de hombros.
—Pensé que había sido yo. —me crucé de brazos fingiendo estar molesta.
—La verdad fueron ambos, no sé si la bala tuya pegó primero que la de Mateo, o fue al revés, pero sé que ambas balas estaban en la espalda y fueron la que acabaron con el juego de Evan. —explicó Astrid y Evan nos fulminaba con la mirada a ambos.
—Y por la espalda, menos mal no jugábamos con cuchillos, aunque sentí esa fea puñalada de traición por parte de Mateo. —todos rieron ante el dramatismo de Evan.
— ¿Cuándo tendremos segundo raund? Aun no supero que Emma me ganara en algo. —dijo Abdiel haciéndome reír.
En el poco tiempo que llevo conociéndolo hemos agarrado confianza el uno en el otro y se podría decir que es muy amigable y divertido.
—De hecho hoy quería que tuviéramos nuestro segundo round. —Sofía nos miró a todos con complicidad.
— ¡¿Y hasta ahora lo dices?! ¡Secuestremos a Lucas para dar inicio! —gritó Mateo poniéndose de pie pero volvió a sentarse ante la mirada de advertencia que le lanzó Lucas.
—Emm... No, nada de secuestros. Los llevaré a un sitio para hacer nuestro segundo round. Sin tener que secuestrar a nadie esta vez. —todos rieron y nos pusimos de pie para irnos con Sofía.
Rato después...
El viaje fue algo largo, de unas dos o tres horas pero al final de todo estábamos en la playa, un día soleado nos acogía y yo estaba pensando seriamente que me pondría si íbamos a nadar.
—No nos dijiste nada de una playa, no traje mi bikini. —se quejó Ángela.
—De eso me encargué yo, vayan a la casa de playa de allá, tengo bikinis para ustedes y a los chicos también. —todos sonrieron y nos adentramos a la casa que estaba allí.
Era hermosa, no muy grande pero acogedora y con lo suficientes espacios para cada uno de nosotros.
Sofía nos llevó a las chicas a un cuarto grande con tres literas súper modernas con estantes incluidos y todos, el cuarto estaba pintado de blanco y tenía las paredes pintadas con toques delicados de rosa y amarillos, líneas y curvas que creaban una especie de raíz en la pared.
— ¿De dónde has sacado todos estos lugares? —le pregunté a Sofía muerta de la intriga.
—La casa en la ciudad es de mi propiedad, me costó esfuerzo y sudor para darle lo mejor a mi hijo —abrazó al pequeño niño entre sus brazos y continuó hablando—. Esta casa de playa era de Drake, al igual que el laberinto el cual utilizaba para cosas no muy buenas, pero bien, como saben su papá era mi padrastro también, cuando se enteró de que Gael era hijo de Drake me ofreció varios lugares según con la intención de "ayudar", pero estoy segura que tal como mi mamá solo quería alejarme de la ciudad y de ellos, para evitar dañarles su reputación de mierda. En fin, pensé con calma todo y rechacé sus ofertas, no quiero tener nada que nos ligue a ellos porque no son buenas personas, sin embargo el dijo algo en que tiene totalmente la razón, todas la propiedades serán de Gael en algún momento, así que eso no podía declinarlo pues, las acepté y todas las propiedades de Drake ahora están a nombre de Gael, en conclusión, él no tiene nada, yo tengo la custodia total de mi bebé y Gael y yo disfrutaremos de esto hasta que él tenga la edad correcta para poder preguntarle que quiere hacer con todo esto. Con el trabajo que manejo ahora no necesitamos nada de esto, aun así no le quitaré lo que por derecho es de mi hijo. —explicó haciéndome sentir orgullosa de la persona que se ha convertido ahora.
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Mi Amado Problema. (Problemáticos #2)
JugendliteraturLucas Morris, un chico frío, rudo, cruel, insensible y deshonesto. Esas son las características de este chico, pero luego de haber conocido a una chica de abundantes rizos y ojos verdes, su vida cambio. Poco a poco empezó a mejorar, pero aun guardab...