Nido de amor [JiCheol]

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En cuanto aquella semana terminó, comenzaron a tener citas como Seungcheol había dicho que quería, y cada una de ellas era más perfecta que la anterior, pues el alfa siempre lograba maravillar a Jihoon, no sólo por los lugares caros y extravagantes a los que lo llevaba, sin porque siempre era dulce, educado, coqueto sin pasarse de los límites, procurando cuidarlo de cualquier cosa y respetándolo. Tenían una cada semana, o al menos cuando el alfa tenía la oportunidad, pues a veces el trabajo lo consumía, así como el de Jihoon.

El omega volvió al colegio donde daba clases, amaba hacerlo y Seungcheol no le prohibió ejercer su profesión; aunque tuvo un poco de problemas ya que había desaparecido por casi 3 semanas, pues desde que se adelantó la boda con el señor Wen, sus padres le habían prohibido seguir dando clases para que no tuviese oportunidad de ver a Seungcheol.

Pero pudo hacerse cargo del asunto y volvieron a aceptarlo en el colegio, donde siguió dando clases a sus niños, preparando sus materiales para sus clases y siendo admirado por su alfa cada vez que le ponía empeño en cualquier manualidad que hacía para los niños.

Se divertían mucho en el departamento de Seungcheol, conversaban de todo, contándose sus días, desahogando sus enfados y corajes al contarle al otro ciertos hechos que los había puesto de malas, también conociéndose mutuamente, preguntando sus gustos, mirando películas, viendo series, coqueteándose... pero cuando llegaba la noche, ambos dormían separados, aunque al alfa le habría gustado dormir abrazando a su omega, Jihoon aún no se sentía con la confianza de hacerlo, y él lo respetaba.

Seungcheol dormía en el sillón de la sala, dándole su espacio y privacidad a Jihoon, habría comprado otra cama, pero el departamento sólo tenía una habitación, pues era un departamento para solteros, y aunque era de gran espacio, con las cosas de Jihoon que Seokmin había guardado para él, no había tanto espacio como les gustaría.

También, con el pasar de las semanas, las visitas al médico se hacían constantes, estaban haciéndole todo tipo de estudios para verificar las reacciones que el tratamiento de control del celo pudo haberle provocado, entre ellas, la infertilidad. Los resultados tardaban en salir aunque Seungcheol le había dicho al médico que era de prioridad, aún así tuvieron que esperar al menos dos semanas hasta saber los resultados de todos los estudios.

Jihoon movía con impaciencia su pierna mientras se encontraban frente al doctor en su consultorio, no quería saber si realmente era infértil, quería ahorrarse el dolor de confirmar algo que Seungcheol le hizo saber, aunque claro, el alfa no estaba cien por cierto seguro y no se lo había afirmado, sólo mencionó que era una alta probabilidad.

Por otro lado, Seungcheol ya quería escuchar las palabras del doctor de la familia, quería saber si había una mínima posibilidad de tener hijos con Jihoon o no. Finalmente el doctor terminó de ver los documentos en su computadora y los miró para hablar.

—Hay buenas y malas noticias, la buena es que el tratamiento no causó demasiado daño, a pesar de que los medicamentos administrados eran todos supresores completos, no eran de la calidad óptima. ¿Cumplían su función? Sí, pero si Jihoon hubiese tenido sexo sin protección durante sus temporadas de celo, habría quedado embarazado por la baja efectividad del medicamento. Así que esto no causó daños en los órganos afectado sus funciones, sin embargo, como este tipo de supresores usan una alta cantidad de hormonas, eso sí que afectó el sistema reproductivo. El útero de Jihoon se encogió y siendo de tan pequeño tamaño no es posible quedar embarazado— miró a la pareja, explicando lo más claro que podía, sin usar palabras técnicas para que entendieran lo que ocurría.

—Entonces, ¿no vamos a poder tener hijos?— preguntó Seungcheol.

El omega se encogió en el interior de Jihoon al pensar que no podía cumplir con su única función, la cual era traer cachorros para su alfa, si no podía hacerlo, simplemente era un omega inútil, que no le serviría para nada a Seungcheol.

—Sí pueden tenerlos— comentó luego de una breve pausa —los óvulos no fueron tan afectados, tal vez ya no los produce en cada celo para quedar preñado como naturalmente es, debido al tratamiento que parte de su función era detener la liberación del óvulo en cada ciclo, pero los pocos que se generan en algunos celos, como marcan los estudios, son completamente fértiles, por eso es que había dicho que Jihoon pudo haber quedado preñado si hubiese tenido sexo sin protección, en alguno de esos ciclos, pudo haber liberado un óvulo y habría pasado.

—Pero si dice que su útero se redujo y es imposible el embarazo, ¿cómo es posible que podamos tener hijos?

—Por medio de una fecundación in vitro en una madre sustituta, se toman sus óvulos maduros y fértiles y se fecundan en un laboratorio con tus espermatozoides, se implantan en un omega o beta compatible y capaz de llevar a fin el embarazo, así, el cachorro que nazca, será completamente suyo.

Jihoon y Seungcheol se miraron con un brillo en los ojos que reflejaba esperanza, aunque les habría gustado que el embarazo lo llevara acabo el omega, si iban a tener hijos, no les importaba el método que usaran. Se tomaron de las manos y enlazaron sus dedos, escuchando otras explicaciones del doctor.

Estaban satisfechos con el resultado, no era el mejor, ni el que querían, pero eso era mejor que nada. De todas formas, tenían tiempo para pensarlo, no es como que fuesen a tener hijos esa misma noche, pues aún debían casarse y entonces podrían hacer la labor, pretendiendo que si hacían el amor el día que la fecundación fuese hecha, eso haría que el omega quedara embarazado.

Aún no iban a comentar nada con nadie, después de todo el único que sabía de la infertilidad de Jihoon era Wonwoo y a él tampoco querían contarle hasta que tomaran una decisión: si tener un hijo de aquella manera o simplemente no tenerlo. Igual el hermano del alfa no tenía idea que habían hecho los estudios, así que podría esperar un poco antes de enterarse.

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