¡Ya no más! [ Mo Dao Zu Shi ]

Capítulo 07:

Los días pasaron con relativa calma.

Wei Wuxian, por consejo de sus padres no fue demasiado extravagante en cuanto a sus habilidades con el cultivo demoníaco. Manejando siempre lo necesario sin ser excesivo.

Poco a poco la Campaña SunShot comenzó a tomar más y más fuerza y se podría decir que  Qiren había querido huir de vez en cuando para ahorrarse malos ratos con su madre cerca. Por supuesto, CangSe no se lo permitió.

Wei Wuxian podía ver a menudo como su madre acosaba sin descanso a Lan Qiren, su padre y él solo necesitaban ponerse a un lado y disfrutar de la función.

Wei Wuxian comenzaba a sentir pena por el maestro Qiren. Aunque no negaba que ayudó a su madre a cortarle la barba porque a él también le incomodaba verlo con esa cosa en la cara.

En fin, detalles.

Sus padres se habían centrado de todo corazón en darle una comida adecuada, a veces metiendo bocadillos en los bolsillos de su túnica por si en medio de la batalla le daba hambre.

En las noches solían acercarse a él y darle masajes en el cuerpo. Su madre especialmente utilizaba algunas de las habilidades aprendidas de su maestra para hacer que su cuerpo se recuperará rápidamente.

Las pesadillas y malas noches de sueño disminuyeron. Su madre siempre atenta a cuando le diera algún episodio, lista para consolarlo.

Dormían juntos, lo abrazaban, en las mañanas cepillaban sus cabellos y lo ayudaban a peinarse, su madre no dudaba en mimarlo con algún dulce o bocadillo, defenderlo cuando alguien se creía la gran cosa.

Se sentía bien.

Hacia mucho tiempo que nadie se había preocupado por él de esta manera. Su madre era muy cálida y su padre lo hacía sentir seguro.

— Wei Ying — llamó Lan Zhan.

El Cultivador demoníaco volteó.

— Ah, Lan Zhan. — exclamó. — ¿Te gustaría hablar? Esta tan silencioso que da un poco de miedo — soltó con una risita. — madre está ocupada y padre sigue con Jiang Cheng y los demás líderes planificando el siguiente movimiento.

El Lan frunció el ceño ligeramente, antes de asentir con la cabeza, poniéndose a su lado.

Hace unos días, su madre había hablado con el Lan, le había dejado en claro que no era necesario que se preocupará demasiado. Que su seguridad ya estaba en manos suyas y que mejor se centrará en evitar que su tío muriera de rabia.

Que ella específicamente disfrutaba ponerlo al límite.

Lan Wangji dejó de insistir en llevarlo a Gusu después de eso, lo cual era un alivio.

También hace dos días Jin GuangShan apareció en el campo de batalla, a su lado venía una doncella acurrucada en sus brazos.

Su madre no dudó en humillarlo e incluso, sin pena alguna, lo pateó en la entrepierna luego de que tratara de pasarse con sus comentarios despectivos hacia ella. ChangZe tuvo que intervenir para evitar que dejara inválido al hombre. Luego de eso, su madre se emocionó bastante en la línea de combate.

Wei Ying podría jurar que muchos ahí le habían tomado miedo a su madre. Parecía un Asura, matando como si fueran juguetes o simplemente blancos para descargar su energía. ChangZe y el no pudieron reprimir el orgullo que sentían como esposo e hijo de la mujer.

— A-Ying, iré a la retaguardia, tu cuida la línea del frente junto a tu padre — murmuró su madre aquella mañana, acomodando sus túnicas oscuras para dejarlo lo mejor presentable pese al tiempo y el lugar.

No sé negó y la dejó ir, cada vez se acercaban más a Qishan. Últimamente habían obtenido información especial y tanto Lan XiChen como sus padres decían que era de fuentes confiables. No dudó de ellos porque sabía que varias veces cartas aparecían entre sus cosas informándoles y advirtiéndoles. Las iniciales MY siempre presentes.

— Cuando matemos a Ruohan, te presentaré al hijo de una amiga. Es chiquito y está bonito, te agradará — Exclamó su madre aquella noche.

Supuso que el hijo de la amiga de su madre era el responsable de las cartas. No preguntó más y solo asintió.

El tiempo pasó muy rápido. Y cuando llegaron a Qishan, las cosas estaban algo tensas. Pues anteriormente su madre había resultado herida en una emboscada en la retaguardia y tanto su padre como el habían estado enojados por eso.

Wei Ying sobretodo estaba preocupado. Su querida madre era demasiado insistente y pese a aún no estar del todo bien, insistió en salir a luchar con los de Yummeng.

Otra cosa resaltable aquí, es que tanto su padre como su madre estaban demasiado pendientes de Jiang Cheng. Usualmente su padre enfrentandose de manera verbal hacia el líder de secta Yao, mismo que seguía insistiendo en mandar al frente a los discípulos de Yummeng.

— ¿Que cree ese sujeto? ¿Que son carne de cañón? Jiang Wanyin puede ser un líder joven e inexperto pero no permitiré que abusen de esa manera de él, apenas a logrado conseguir discípulos y ya quieren erradicarlos mandandolos al frente sin entrenamiento ni preparación previa — refunfuño su padre aquella noche.

Tanto su madre como él tuvieron que actuar de forma coqueta para calmar su mal genio. Su padre podría ser tranquilo pero notó que su carácter se activaba cuando se trataban de pasar de listos con los de Yummeng y cuando le preguntó la razón de aquello respondió:

— El hijo de mi mejor amigo está solo al mando de una secta que aún necesita de reparación, tiene pocos discípulos y poco dinero ¿Crees que es justo que traten de aprovecharse de su situación? Independientemente, quiero ayudarlo hasta que se estabilice, Fengmian te dió un techo y evitó que vivieras en la calle, Jiang Cheng está solo y no hay nadie que lo guíe, es un trato justo  — luego de eso, no dijo más.

Desde entonces verlo al lado de Jiang Cheng en las reuniones era natural, siempre silencioso cuando no viera ningún problema y siempre saltando cuando quisieran entregar más de lo debido a las tropas Jiang.

Jiang Cheng también lucía más tranquilo sabiendo que no tendría que mandar como sacrificio a los discípulos recién integrados, además de que, aunque no lo dijera, estaba feliz de que alguien lo defendiera y diera  lugar a los derechos de los más jóvenes.

Wei Ying estaba feliz pese a todo.

Tal vez lo único que necesitaba mejorar era su relación con él joven de cinta.