LIGHT A FLAME. |JohnTen|

4.

estuvieron juntos hasta el amanecer, luego cada uno volvió a sus casas. johnny se metió a su cuarto quedándose dormido tan pronto tocó su cama, ten no podía darse el lujo de dormir en esa mañana, su madre y hermana tenían un vuelo a tailandia al medio día y el se había ofrecido - como el hombre de la casa - para preparar todo y ayudar a su hermana.

dejó que tern durmiera un rato más, acomodó su maleta y se aseguró de que llevara todo lo necesario, le preparó la ropa que usaría para el viaje y le dejó un dulce en el comedor donde serviría su desayuno después. ayudó con la maleta de su madre también para que pudiera descansar y no tuviera que hacer mil cosas antes de irse al aeropuerto, se bañó y se vistió tranquilamente antes de ir a la cocina para preparar el desayuno para ellas, ya eran las ocho y media.

– tennie..– escuchó y se giró encontrándose con la pequeña tern, ella frotaba sus ojos con sus manos mientras en su antebrazo estaba su peluche favorito, un regalo de la hermana mayor.

– ¿te desperté? – ten se acercó a ella agachándose para darle su abrazo de buenos días, la pequeña negó rodeando los hombros de su hermano con sus bracitos, amaba sus abrazos. – ve a bañarte, ¿si? te dejé tu ropa encima del escritorio, no hagas mucho ruido que vas a despertar a mamá.

la pequeña asintió rápidamente y en silencio fue a su cuarto, bañándose lentamente ya que no era muy experta en bañarse sola pero gracias a ten se sentía más segura sobre eso, se vistió con algo de trabajo y se puso un lindo moño en su cabeza. fue pronto a sentarse en el comedor sonriendo por el delicioso sabor de la comida de su hermano.

– te amo mucho, ten ten. – ella habló con una enorme sonrisa comiendo su desayuno.

el sonrió también y salió del comedor yendo con calma a buscar a su madre, ella suspiró despacio al despertar, a ella le pesaba demasiado que su hijo tuviera que comportarse como el padre que jamás estuvo para ellos. la madre se preparó tranquila y fue a desayunar, casi sintiéndose inútil cuando notó que su hija pequeña ya estaba en la sala viendo caricaturas y comiendo un dulce esperando por ella.

en la vereda de enfrente johnny estaba paseando a su perrito, había perdido una apuesta con su madre así que tuvo que aguantarse el solo dormir un rato y ya tenía que sacar a pasear al perro, luego tendría que hacer las compras para la semana. de pronto el cachorro corrió hacia alguna dirección haciendo que la correa se llevara a johnny con el, ahí una hermosa muchacha estaba acariciando y mimando al perrito haciéndolo emocionarse.

– que lindo bebé..¿cómo te llamas? – ella tenía un acento cuando hablaba así que supuso que era extranjera.

– se llama flower. – john sonrió por lo emocionado que estaba el cachorro con la atención que le estaba dando la muchacha. – parece que le caes muy bien, ¿cómo te llamas? no creo haberte visto antes.

– soy tea y no soy de aquí, solo vengo a buscar a mi madre y a mi hermana para ir a un viaje. – ella explicó levantándose cuando dejó de jugar con flower.

– oh, que lástima..flower no podrá verte más. – john hizo un puchero en broma y la muchacha empezó a reír.

– bueno, me tengo que ir. – ella asintió y jugó un rato más con flower antes de cruzar la calle, tocando el timbre de una de las casas esperando a ser atendida pronto.

john fue a su casa para dejar a flower y llevarse la lista del súper, una vez salió a la calle de vuelta vió como tea salía de esa casa cargando a una niña y con una mujer detrás, sonrió leve pero se sorprendió un poco al notar que ten también salía de la casa cargando maletas.

– ¡tigrito! – exclamó la niña bajando de los brazos de su hermana para saludar con ambas manos a john y todos miraron hacia el, ten no pudo evitar sonreír.

el americano sonrió cruzando la calle acercándose a la pequeña agachándose para abrazarla con ternura, no se esperaba que ella se hubiese encariñado con el pero le parecía lo más tierno del mundo.