"Adrian Haggard, antiguo militar y mercenario, además de gran amigo de la familia Stone, es contratado para cuidar a Morrigan Stone, quién además de sensual, es algo alocada y a veces un poco irresponsable. Adrian no es la excepción y sucumbe ante l...
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Thunder, Adrian y su gente descendieron de sus deslizadores, dejándolos bien ocultos y en un lugar seguro, mientras caminaban con sigilo. Aún estaban a una distancia considerable de la base de Nakamura. No deseaban acercarse más de lo prudente, pues estaban seguros que Azami mantenía intacto el circuito cerrado y el sistema de seguridad, de ese modo se aseguraba que nadie se acercara a su cuartel. Sin embargo, Adrian estaba muy nervioso, ya que desde hacía un rato podía ver humo, proveniente del cuartel de Azami.
-Debemos apresurarnos - Exclamó Haggard y trató de adelantarse.
-No creo que sea una muy buena idea - Dijo Thunder y lo sujetó del brazo - Azami puede vernos y...
-¡Nosotros somos más, con un carajo! - Gritó Adrian y se soltó, echándose a andar a gran velocidad, estaba desesperado por saber que estaba sucediendo.
Thunder negó con la cabeza y lo siguió de cerca; comprendía la desesperación de Adrian, él mismo no podía dejar de preguntarse porque había humo en la base. Seguramente Azami y Beckett habían tratado de hacer algo contra esa joven. Haggard tenía razón, debían darse prisa antes de que ocurrieran cosas que lamentar. El felino pidió a su gente que se apresuraran y pronto alcanzaron a Adrian.
Adrian continuó corriendo, la base de Azami estaba cada vez más cerca, el olor a humo era cada vez más perceptible y eso no le gustaba nada. Tenía un mal presentimiento respecto a esa situación, pero intentaría pensar de la manera más positiva y sacudirse esos extraños pensamientos que sólo lograban alterarlo.
Haggard se detuvo en seco al observar la nave de Tristan; ¡ahora sí debía moverse con sigilo! Preparó su arma y continuó andando; expectante y mirando hacia todos lados. No deseaba toparse con presencias desagradables. Esperaba que AB hubiese mantenido a Morrigan a salvo y... lo que sus ojos contemplaron le pareció inesperado, penoso y muy lamentable. Delante de sus ojos se encontraban los restos de la War Hawk, su nave, su preciado vehículo había sido hecho pedazos.
-¡No, no, no! - Gritó Adrian y se echó a correr hacia su nave - ¡No puede ser! ¡Carajo! - Volvió a gritar - ¡Debí llevarlos conmigo y no dejarlos aquí! - Bufó - Fui un tonto al confiar en Azami.
Thunder también se detuvo, mirando con pesar la lamentable escena; Adrian buscando entre los escombros de esa nave y gritando, desesperado.
-Se nos han adelantado, Adrian - Gruñó Thunder y lo sujetó del brazo.
-Puede ser - Bufó Haggard - Pero sé que AB y Morrigan se encuentran bien, ellos...
Adrian ya no continuó, se inclinó al ver un trozo de metal retorcido debajo de los restos del War Hawk. Lentamente lo extrajo, mirándolo atentamente. Se trataba de la bota de AB, su compañero más fiel. Tristan había destruido la nave con AB dentro, pero ¿y Morrigan? Se preguntó mientras continuaba buscando más restos entre los escombros.
-Es inútil Adrian - exclamó Thunder quién también revolvía los restos de la nave junto a su gente - No creo que haya quedado algo de la chica, la explosión fue contundente...
