—Eso es muy dulce.
—Por supuesto, pero estoy segura de que la va a llevar al bosque y la va a hacer suya un millón de veces...
—Oh, como Grey, dios, espero que sea...
Alce, la mano, sintiéndome horrorizada ante las palabras de mí compañera de habitación y Sonjin. Estábamos las tres reunidas en mí habitación, yo comentándoles lo que Jungkook me había dicho y ellas diciendo cosas como esas. Lo gracioso es que ellas creían todos esos rumores de él e imaginaban un montón de cosas más... Cómo que es un pequeño Christian Grey. Espero que no lo sea. Por cierto. Aún no lo ha demostrado.
Aun así, sus estupideces eran más suaves que la de los chicos. Yoongi había dicho que tenía que esperar para tener sexo con él. Y eso no estaba tan alejado de lo que las chicas dijeron, por cierto. Myungsoo dijo que era seguro que Jungkook quería raptarme y pedirle dinero a mis padres como recompensa y Jimin fue el peor. Él invento toda una historia y fue tan horrorosa que no siquiera la recuerdo del todo por el simple hecho de que no sepa tener ese tipo de imágenes en mí cabeza.
—Oye, pero no dijo cuándo vendría por ti, ¿o sí? —dijo repentinamente Sonjin, deteniendo sus murmullos sobre lo que habían leído en las 50 sombras.
Negué un par de veces, pensando en que eso era un poco molestó.
—No, no me lo dijo.
—Eso quiere decir que él vendrá por ti en cualquier momento. Debes estar maquillada y bonita todo el tiempo —agregó mí compañera de habitación.
Lamentablemente, ellas tenían razón, Yoongi llego un día jueves a mí habitación, golpeando la puerta cuando yo estaba en mí sesión semanal de belleza con mi compañera de habitación. Tenía plata en mí rostro y pepinos sobre mis ojos y eso no es muy agradable de ver, estoy realmente segura de eso, pero a Jungkook no le pareció importante mucho.
Solo lo suficiente para burlarse de mí durante los próximos cien años.Aun así, él se quedó en mí habitación hasta que vio que mi amiga me retiraba todo eso del rostro, y pareció entusiasmarse mucho cuando mí compañera dijo que debía quitarme la bata. Casi lo echo, pero el juro que no vería nada, mientras se daba la vuelta. Él era un pequeño pervertido, al parecer.
—Entonces, Jungkook —comenzó a decir mí compañera de habitación—. ¿Dónde planeas llevar a mí chica?
Reí entre dientes al pie eso, mientras subía unos jeans ajustados por mis piernas, cubierta por las sábanas y frazadas de mí cama.
—Si Eider no lo sabe, menos lo sabrás tú —contesto Jungkook.
Acomodé mí camiseta y chaleco de lana que mamá me había hecho y dije.
—Bien, si me parece justo.
Cuando estuve completamente abrigada y Jungkook me dio un beso en la frente a modo de saludo, salimos juntos de mí habitación y fuimos hasta el estacionamiento de la universidad. Había un montón de autos, camionetas y 4x4, pero no nos detuvimos frente a ninguno de ellos.
Nos detuvimos frente a la hermosa Herley Devidson de Jungkook.
Es la motocicleta más hermosa que he visto en mi vida. Y soy consciente de que estoy hablando como un chico estos momentos, pero es realmente hermosa. No creo que sea buena describiendo motocicleta y esas cosas, pero cuando la veo, no puedo evitar pensar en que todo en ella es perfecto. Es de un negro cromado y un poco baja, pero muy rápida.—¿Qué se supone que hacemos frente a tu Harley? —le pregunté, deseando desde lo más profundo de mí ser que dijera que me la estaba regalando, aunque por otro lado sabía que era completamente incorrecto desear eso.