44. Escapemos

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En algún lugar de Australia

-Señora - dijo Sasha - le busca Alex.

-Hazle pasar, no le hagas esperar - dijo mientras se paraba de su escritorio.

La señora Wakasa se acomodó el cabello mientras bajaba de por las escaleras, al pie de estas estaba Sasha y a un lado Alex, no se le encontraba muy feliz que digamos, ya que su expresión facial era nefasta.

-Bienvenido, querido - dijo la señora Wakasa dándole dos besos, uno en cada mejilla - ¿qué te trae por aquí?

-El matrimonio con ________ no va a ser posible - dijo sin rodeos.

-¿Por qué dices eso, si cuando hablé con ella se le escuchaba muy feliz? - dijo la señora con una sonrisa falsa.

-Por qué sigue pensando en aquel pandillero pelón - dijo enojado.

-¿A qué te refieres? - preguntó la pelirroja con un tono más serio.

-Cuando regresamos a Japón por que la invitaron a una audiencia para cierre de caso, se encontró de nuevo con su ex novio y pues me dijo que aún lo extrañaba, me cortó en ese instante, obviamente no iba a dejar que se volviera a dañar de esa forma y me quedé en el estacionamiento y minutos después salió en su moto y la seguí y ¿a dónde cree que fue? Exacto, con su ex - dijo quitándose falsas lágrimas - pero yo pensé que iba a salir hasta el día siguiente o acompañada de él, pero salió llorando.

-No tiene sentido - dijo un poco anonadada la señora.

-Me puse a investigar y Ken Ryuguji comenzó a andar con Senju Kawaragi, supongo que cuando fue a buscarle le vio con su nueva pareja.

-Hay que separarles, mandarla de regreso a Boston o a otro lado - dijo la pelirroja algo enojada- _______ debe de casarse contigo, se la prometí a tus padre cuando me la encargaron.

Años atrás cuando tenías 12 años la señora Wakasa intentó juntarte con un chico de tu edad, sin embargo tu lo rechazaste fríamente, años más tarde cuando escapaste con tus hermanos la tu abuela entró en crisis ya que la alianza que había hecho de los matrimonio arreglados para ti y tu hermano se disolvieron, pero al momento que volvió a tenerte con ella volvió a reanudar el trato, pero esta vez apostando a lo grande que si ibas a casarte con él, ella quiso hacerlo de forma "disimulada" donde el te conquistara lentamente para que luego dijeras que sí por voluntad, pero no contaba que tú volverías a Japón.

-¿Sabes dónde se encuentra en este momento? - preguntó la abuela.

-Sigue en Japón, supongo - dijo mientras se rascaba la nuca Alex - recuerdo que se iba a quedar unas semanas más después del caso ya que una de sus amigas de allá le había invitado a una boda.

-Está bien, la buscaremos allá. - dijo mientras volvía a subir las escaleras. - prepara tu estadía, sabes que esta es tu casa, en dos días partimos a Japón.

{...}

-Necesitas contarme todo - decía Hannah mientras terminaba de comer su cereal.

Ambas estaban en el taller de tu hermano, después de la boda tu y Draken desaparecieron, cosa que todos sabían que iba a pasar, pero lo que nadie sabía es que se fueron a un parque en la noche a mirar estrellas, de ahí te regresó a tu departamento y se retiró.

-Nada, realmente no pasó nada - dijiste con toda la cara sonrojada - literalmente fuimos a un parque a mirar estrellas.

-No sé porqué, pero no te creo - dijo tu hermano terminando de cocer un trozo de tela.

Lo peligroso del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora