Te admiro (Endeavor y tú)[TERMINADA]

• 43 •

Residencia 4/7

Viernes. 10:00 AM

- ___-chan tenemos que hablar - Dijo la pelinegra ya estando afuera de la comisaría.

- ¿Qué ocurre Nana-san? ¿Te duele algo? - Pregunté preocupada.

- ¡No tonta! - Rió - ayer hablé con Neru-san luego de tu entrenamiento mental, quería saber las ilusiones que te dio para entender tus puntos débiles.

- O-Oh sobre eso... Yo-

- No diré nada a nadie querida, tranquila - Dijo palpando mi espalda y suspiré levemente - no te voy a juzgar, solo quiero saber qué hay entre él y tú - Sonrió amable.

La miré detenidamente leyendo todas sus expresiones faciales y lenguaje corporal, tenía mucho miedo de cómo podía terminar esta conversación.

- Por favor guarda el secreto Nana-san - Dije levantando el meñique y ella contenta enredó su meñique con el mío.

- ¡Lo guardaré! - Dijo como una joven de mi edad, sonreí a modo de agradecimiento - antes de que empieces será mejor no estar en tierra firme donde pueden escucharnos todos, volemos alto ___-chan.

Asentí, la seguí mientras controlaba mi ansiedad de confiarle algo tan importante sobre mi vida personal.

- Ahora si puedes empezar, soy todo oídos - Dijo observándome atentamente.

- Pues todo esto empezó cuando mi padre había sido atacado por All for one, yo apenas había ingresado a la UA y ya me estaba metiendo en problemas por salvar a un héroe vestida con el uniforme. Mientras trataba de llevarlo al hospital mi vida corrió peligro unos segundos, pero Endeavor me salvó a tiempo...

° ° °

- Después de tantas experiencias, conocer personas y probar ambientes diferentes... cada vez que pienso en el futuro, siempre está él a mi lado. No puedo visualizar otro rostro que no sea el suyo - Dije observando el atardecer, el tiempo dejó de existir mientras le relataba a Nana toda mi situación con el pelirrojo.

- ¿Puedo darte un consejo al respecto?

- S-Si eso es lo que quieres, hazlo - Sonreí nerviosa.

- Cuando cumplas la mayoría de edad ya no te reprimas nada ____, la vida es muy corta y larga a la vez. No dejes que los pensamientos ajenos lleguen a destruir tus sentimientos... o a personas que son valiosas para tí - Acarició mi cabello - cuando el amor toca a tu puerta una vez, ya es imposible de olvidarse de ello. El sentimiento no vuelve de la misma manera, y por como hablas de Endeavor creo que hay un bonito futuro para ambos.

- Gracias Nana-san - La abracé - ya no quiero llorar más durante mi residencia, me lo dejas muy difícil - Bromee mientras limpiaba algunas lágrimas de mi rostro.

- Si tienes que llorar, hazlo - Miro el cielo - nos hace más humanos a los héroes demostrar de vez en cuando nuestras emociones.

- Mm esa última frase siento que no fue para mí - Dije mirándola atentamente.

Ella bajo la mirada y soltó una pequeña risa, acomodó sus guantes y solo se limitó a guiñarme un ojo. Lo entiendo, capaz y no es el momento adecuado para saber.

- Todavía podemos entrenar arduamente una hora antes de que vayas con tu bizcochito - Habló coqueta la pelinegra.

- ¿Ir con quién a dónde?

- Serás mensa - Se quejó sacando su celular de su bolsillo y comenzando a teclearlo.

Se alejó un poco e hizo una llamada, no entendía nada pero tampoco quería interrumpirla. De pronto reía histéricamente como si le hubieran contado el chisme más gracioso del mundo, pero ya entendí que ella ríe por todo... y me agrada.