Taeyong es un niño de siete años que diagnosticaron con Hafefobia a muy temprana edad. Yuta es un niño de nueve años que no sabe por que tiene que jugar con otro pequeño que ni siquiera conoce y además parece tenerle miedo.
🌴 Este es un fanfic, cat...
Taeyong se alejó rápido y chocó con la pared por culpa del reflejo involuntario.
Se lastimó el brazo e hizo una mueca de dolor.
Quizá el golpe no había sido tan fuerte, pero había dolido un poquito.
"Taeyongie, lo siento. Yo... Yo lo olvidé, perdón, perdón, perdón."
Yuta juntó ambas manos a la altura de su pecho, rogando por que el menor aceptara sus disculpas.
Taeyong asintió lentamente y se incorporó con algo de duda.
"Me iré, adiós Taeyong, adiós Yuta"
Jaemin abandonó el lugar.
Yuta miró a Taeyong quien estaba tratando de controlar su respiración.
"Hey, mira. Inhala, exhala." El de cabellos rubios imitó una respiración calmada, la cual Taeyong intentó seguir "¿Recuerdas lo que siempre te digo? Hazlo despacio, como los pasitos de pingüino."
"Si, y-ya estoy bien."
"¿Vamos a casa?"
Ambos caminaron en silencio hasta su hogar. Ahora que Yuta se había mudado a la casa junto a la del menor, les era más sencillo irse juntos de regreso.
Al llegar, se despidieron y cada uno entró a su respectivo lugar.
Yuta dejó sus cosas en la cama, y se recostó a un lado mientras miraba la pantalla de su teléfono. Su madre regresaría del trabajo más tarde.
Le escribió un mensaje a Taeyong.
Lo siento, por lo de hoy. Sabes que nunca haría nada para hacerte daño ¿Cierto? Somos amigos, y prometí protegerte de todo lo malo.
Yuta se quedó dormido poco tiempo después de presionar el botón "enviar". Y no vio la respuesta del menor.
Disculpas aceptadas, no te preocupes. Te quiero mucho, Yuta-Hyung.
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Taeyong rió cuando vio la foto que le había enviado a Yuta, porque nunca le había dado un abrazo al mayor y tampoco se sentia capaz de hacerlo. Pero esperaba poder algún día.
