ꜰɪꜰᴛᴇᴇɴ

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Lo primero que hicieron muchos al llegar a sus hogares fue ducharse, tenían que sacar todas esas cosas raras y pegajosas de encima.

-De verdad me pregunto como es que termine igual que ustedes, debí haberme ido con Tadashi, ¿Crees que se haya enojado por que no le quise decir lo que paso?

-Realmente no creo que se enoje por cosas así -- Osamu lo miro serio -- bueno tal vez si se enojo, pero no creo que dure mucho, igualmente puedes pedirle disculpas.

-No lo puedo creer

-¿Que cosa? -- el rubio se acerco a su hermano que estaba en la cocina comiendo algo de lo que había sobrado el día anterior.

-Acabas de usar el cerebro, al parecer juntarte con Sho- kun te hace bien, sigue así Tsumu.

-Maldito Samu -- el peli-gris comenzó a correr hasta la sala mientras era perseguido por su gemelo, estaba por entrar a su habitación cuando un cojín se estrello contra su cabeza, cosa que solo ocasiono que riera von mas fuerza.

-Era broma, mejor ven y ayúdame, ¿Qué le puedo regalar a Tadashi?

-No te quiero ayudar, tu puedes solito.

-Tsumu, es enserio, no se que podría darle.

- ¿Y por que no le preguntas directamente?

-Y volvió el idiota -- su hermano lo miro mal.

-Ya me voy, aquí solo me maltratan. -- Osamu lo tomo del brazo evitando que se fuera.

-Crees que podrías... Ya sabes... Preguntarle a Hinata, por favor.

El rubio estaba por burlarse de su hermano, pero al ver su cara se sentó junto a él en su cama y saco su celular mientras suspiraba.

-Hola otra vez, Sho- kun, aquí Samu te quiere preguntar algo.

-Hola, Atsumu- san, ¿Qué es lo que quiere preguntarme Osamu- san?

-Ummm tú eres un amigo cercano de Tadashi, ¿verdad?

-Claro que si, Guchi y yo somos buenos amigos, pero ¿a que se debe la pregunta?

-Se claro, Samu,

-¿Crees que se haya enojado por lo de hoy?

-No lo creo, si se estuviera molesto ya lo sabría, Guchi es muy fácil de leer, y tampoco es que se enoje fácilmente.

Osamu suspiro aliviado y sonrió.

-Bueno... Aún así quiero darle algo como disculpa, ¿Qué crees que pueda darle, Hinata?

-Chocolates -- contestó al instante -- Guchi ama los chocolates, si está enojado dale chocolates, lo mismo si está triste o emocionado.

La sonrisa en el rostro del peli-gris se hizo más grande.

-Gracias por el consejo, Hinata, ahora tengo que irme, adiós.

-¿A donde vas, Samu?

-Al super, no es tan tarde, sigue abierto, regreso más tarde, hermano.

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