Si a Yoongi le hubieran dicho que sería un omega, los hubiera pateado y... ¡Oh! esperen, si se lo dijeron y los pateo.
Por más que Yoongi negara desde pequeño que sería un omega, la adolescencia le dio un golpe en la cara diciéndole lo contrario. Po...
Hoseok y Taehyung estaban conversando amenamente cuando Yoongi y Namjoon llegaron a la oficina.
El lobo de Yoongi se cohibió al ver la amplia sonrisa en el alfa mientras platicaba con el omega pelirrojo. "Tú aroma no le afecta" recordó las palabras de su amigo. No había razón lógica para que el alfa no reaccionara a su aroma que no fuera el que el lobo de Taehyung eligiera pareja, se supone que tendría que existir marca alguna pero nunca se sabe.
Agitó las ideas colocando cada una en su lugar.
No tiene por qué importarme. Se dijo.
Entonces al acomodar las ideas recordó el incidente de días atrás.
—Hola ¿Ya desayunaron? —saludo un Taehyung animado.
—La mamá de Yoongi cocino —mencionó Namjoon.
Yoongi no podía hablar de la vergüenza, sentía las mejillas arder. Su salvación fue encerrarse en la oficina donde no lo vieran colapsar. Se desparramo en la silla. Segundos después la puerta se abrió. Taehyung entro con libertad.
—No sabes tocar —Yoongi se puso a la defensiva, la realidad era diferente.
—Algo me decía que no me dejarías entrar —comentó tranquilo. Se acercó sentándose en la silla. Fijo la mirada en el omega logrando ponerlo nervioso, Yoongi desvió la mirada —es algo natural de nuestro cuerpo no debes sentirte avergonzado, estoy bien, el golpe no fue nada —sonrío a lo que Yoongi se percató del lindo gesto del alfa.
¿Por qué no te atrae mi olor?
Negó. No debía preguntar aquello, ni siquiera debía tener interés por saber.
—Sigamos trabajando —sentencio Yoongi.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Las horas pasaron hasta que por fin terminaron los portafolios. La tensión de Yoongi se esfumó con la concentración que esta vez sí tuvo al hacer los diseños.
—Ahora elijamos cuales quedarán —hablo Yoongi.
—Hagamos eso —asintió un Taehyung seguro.
Para el Yoongi resultaba fácil trabajar con Taehyung debido a que confiaba en que haría un buen trabajo, al final de cuentas no era la primera colección que lanzaba.
—Me recuerda a mi primer lanzamiento —comento Yoongi nostálgico —no creí que a la gente le gustaría lo que hago —una sonrisa se dibujó en su rostro mientras veía sus diseños.
—¿Por qué te ocultas Yoongi? Eres talentoso, un omega —Taehyung se mostró exasperado.
Taehyung podría preguntar todo lo que quisiera, pero Yoongi no estaba dispuesto a hablar. Ni siquiera estaba completamente seguro de querer salir a la luz.
—Lo que importa es que lo haré, me daré a conocer —apretó los dientes, lanzó una mirada fría al alfa —Si planeas seguir cuestionándome es mejor que lo dejemos aquí.
Yoongi se levantó enfadado para salir del taller.
—Espera Yoongi.
Taehyung corrió rápido para interponerse en el camino del omega. Yoongi se detuvo antes de estamparse contra su pecho.
—Quítate —exigió. La diferencia de altura lo molestaba por hacerlo verlo inferior al tener que alzar la vista.
—No preguntare más. De verdad —puso el rostro más angelical que tenía.
—Aun así, muévete alfa apestoso —gruño.
Sorpresa aún más cuando su lobo también lo hizo. Rara vez su lobo se enojaba con los alfas.
—No apesto, mi aroma es agradable —menciono indagando, una mano fue a parar a su pecho con ofensa.
—¿Según quién? Tu mamá —se burló sonriente. Cruzó las manos sobre el pecho y dejo caer el peso de su cuerpo sobre un pie.
—Hoseok lo dijo.
Yoongi rodo los ojos al escucharlo.
—Bla, bla, bla —alzo una mano al aire abriéndola y cerrando como imitando una boca. Caminó para rodearlo.
—Pues tu tampoco huele tan bonito —ataco el alfa.
—¿Qué acabas de decir? —entonces Yoongi se atacó de risa —que tu seas un alfa con mal olfato no es mi problema.
—Huelo a kilómetros tu aroma a manzana. Mi nariz esta perfecta —dijo con indignación.
—Entonces no sirves como alfa si no reaccionas a mis feromonas —gruño.
—Wow que infantil eres —Taehyung fue ahora quien se cruzó de brazos, tenía una sonrisa sarcástica en el rostro.
—Yo no soy ningún infantil.
El alfa lo miro con ironía y una sonrisa ladina. Yoongi apretaba los puños que estaban pegados a su costado, estaba a centímetros de Taehyung, con el cuello levantado y el rostro de un niño a medio berrinche.
Reacciono cuando su cerebro se conectó con la coherencia de sus palabras. Acababa de hacer un berrinche y no solo eso, le reclamo por no verse afectado por su celo.
¿Qué rayos pasa contigo Min Yoongi?
Gritó internamente.
En eso Hoseok entró despreocupado sin saber lo que acontecía segundo antes. De quedó petrificado en la puerta con los ojos bien abiertos y rostro inocente.
—¿Interrumpo?
~Quita tu maldita linda cara de mi vista ~bufo el lobo de Yoongi.
—Despídelo —bufo Yoongi, molestó.
Salió a zancadas del taller, Hoseok alcanzó a darle paso antes de que lo arroyara.
—¿Qué pasó?
Taehyung se encogió de hombros alzando las manos a la altura de estos e hizo un gesto de "yo que se". En cambio, por dentro le recorrió una satisfacción por ver esa faceta del omega.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.