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Estar frente a la mansión de los Min resulto en un nerviosismo, la casa era hermosa tanto por fuera y por dentro y es que ya se encontraba sentado en la sala, solo llevaba 5 minutos sentado pero el nerviosismo no se iba, no entendía porque estaba tan nervioso.

Por la puerta entro una esbelta mujer, era la viva imagen de Yoongi, era hermosa. Le sorprendió que al estar más cerca la belleza de la omega reflejaba que era natural, las ligeras arrugas cerca de los ojos se lo confirmaron, la edad era lo de menos en la mujer si lucia de esa manera.

De pronto se encontró preguntándose si Yoongi se vería igual al llegar a una edad más adulta. Su lobo se regocijo ante el pensamiento, tuvo que golpearse mentalmente para apartar los pensamientos. El semblante inexpresivo de la omega ayudo a regresar a la realidad.

—Eres Taehyung —afirmo la mujer —¿Qué haces aquí? —tomo asiento frente a él, en ese momento se dio cuenta de que se había puesto de pie, la imito y se sentó.

—Un placer conocerla Sra. Min—saludo cordialmente.

—No puedo decir lo mismo.

Basto una corta conversación para descubrir de donde Yoongi heredo el carácter fuerte, la omega no disimulaba que no le agradaba su presencia. Respiro hondo, tenía una razón de estar ahí y no se iría sin cumplirla.

—Quiero ver a Yoongi —pidió con firmeza sin llegar a ser altanero.

—Mi Yoongi cayó en una depresión terrible —la omega hablaba con coraje —afortunadamente esta vez está cooperando. Es un descaro que vengas buscarlo —la madre de Yoongi sabia de lo sucedido, posiblemente lo sabía la familia entera, pensó Taehyung.

Un joven anuncio su llegada desde la puerta principal, venia felizmente saludando al personal de servicio, al llegar a la sala saludo a la omega cariñosamente.

—¿Quién es el, madre?

—Kim Taehyung —al escuchar el nombre, las manos del alfa se cerraron en puño.

Se puso en alerta, no le gustaba pelear y el sujeto se veía muy dispuesto.

—Ni lo pienses, Jungkook —la cuarta voz los hizo girar las cabezas.

Yoongi miro severamente al alfa y este abrió los puños de nuevo, nuevamente. Taehyung se di cuenta que era la primera vez que no veía la apariencia pulcra del omega, llevaba lo que parecía una pijama, el cabello ligeramente despeinado y unas ojeras pronunciadas, su rostro también se veía pálido y sus mejillas algo hundidas.

—Te llevare a tu habitación —Jungkook tomo del brazo a Yoongi.

—No necesito un guía en mi casa hermanito —dijo medio burlón, lo que de nueva cuenta sorprendió a Taehyung. La mirada de Yoongi cayó en él, su cuerpo se tensó —déjenos hablar.

—No deberías —gruño Jungkook.

—Mamá —Yoongi la llamo en ayuda.

A regañadientes la mujer complació a su hijo, se llevó al otro y los dejo solos. Ya a solas Yoongi cerró la puerta para más privacidad.

—Namjoon ya te dijo que no revelare mi identidad. De una vez te digo que no me vas a convencer de lo contrario —Yoongi hablo sin mirarlo, miraba a un punto en específico.

—Estabas seguro de hacerlo, no debes cambiar la decisión por mi —Taehyung no lo sabía, pero estaba casi implorando.

—Mas bien me di cuenta de que una de las razones por las que quería mostrarme era para darte gusto. Nunca antes había querido salir a la luz, estaba bien como estaba.

—¿Realmente lo estabas?

La incredulidad de Taehyung le molesto. Lo miro con molestia, pronto aparto la vista cuando su lobo comenzó a chillar de tristeza.

—Al menos no tenía el corazón roto —murmuro enojado.

—Vez, no estas bien.

Yoongi rio amargamente.

—Evitas de nuevo el tema —Yoongi rodo los ojos —mi psicóloga dice que tienes un problema, tal vez miedo al compromiso —se encogió de hombros.

—No le temo al compromiso —Taehyung respondió indignado.

—Tal vez alguien te rompió el corazón y tienes miedo de amar, o simplemente soy yo no queriendo aceptar que no te gusto —los altibajos de emociones que tenía eran incontrolables, su madre le había dicho que se había vuelto transparente. La decepción no pasó desapercibida para el alfa.

—Lamento que la situación haya llegado a tal punto, no debí besarte.

—No preguntare porque lo hiciste porque es obvio que fue porque lo deseabas —Yoongi tuvo el valor de mirarlo a los ojos y su corazón se oprimo ¿En qué momento se enamoró? —Agradecería que no vuelvas a buscarme. Tengo un problema grave de depresión, a eso súmale mi baja autoestima, el odio a mí mismo. Tu eres un extra que hace que todo se multiplique —la garganta se le cerro, su lobo pedía que no lo dejara ir, su lobo no entendía que no existía razón para luchar.

Luego de darle vueltas a las palabras de Yoongi, formulo la pregunta.

—¿Porque te odias? —la curiosidad mato al gato.

—No es obvio. No me gusta ser omega —se señaló a si mismo —crecí rogando por ser un alfa y fui esto.

—Está bien ser omega —Taehyung comento con una expresión que Yoongi no supo descifrar.

—Lo dice el alfa. Vete Taehyung y olvida que una vez conociste a Min Yoongi el dueño de M.Y

El pecho se le oprimió ante la despedida, le dolía y el sentimiento amargo no le gustaba.

¿Quién de ellos era el dueño de aquel sentimiento dolido? 

¿Quién de ellos era el dueño de aquel sentimiento dolido? 

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𝓞𝓶𝓮𝓰𝓪 𝓝𝓮𝓰𝓪𝓭𝓸 ~ 𝓣𝓪𝓮𝓰𝓲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora