—Shace... Pensé que habías ido a desayunar — dije acercándome lentamente.Elliot alzó una ceja, pero no levantó el rostro como siempre hace cada que me escucha.
— Eh... Si, bueno — Shace desvió su mirada, y suspiro — Es que, quería saber cómo se encontraba Elliot, es todo.
Ocurría algo aquí, era obvio. Shace no sabía mentir, Elliot no reaccionó en cuanto me escucho, y yo sentía que algo ocurría, pero tal vez era cosa de ellos dos.
— ¡Nessa! ¡Nessita! — la voz de Adam, resonó en la casa. Adam se posó en el marco de la puerta de la habitación, y nos miró — Aquí hay tensión...
Hasta Adam lo notaba.
— Oh, mira, eres de mi talla — dijo Shace mirándolo.
— Si, se ve bien, ¿Verdad? — la sonrisa de Adam era amplía, y se veía a si mismo.
— Como sea, tengo hambre, llamaré a Nana, y le diré que quiero unos Waffles con tocino — Elliot se levantó, busco su bastón pegado a su mesita, y lo tomó.
— Pero Elliot, yo ya traje comida — menciono Shace levantándose de la cama para alcanzarlo.
— ¿Enserio? ¿Que es? — pregunto el pelinegro con curiosidad.
Shace tomó las bolsas y las dió a Adam
— Es comida china, y unas...
— Ahg, no — refunfuño Elliot con una mueca.
Shace hizo un puchero:
—Pero... Es comidita china, es rica.— No me gusta, recuerda... oh, ¿Dónde estás? — Shace se acercó a él, y entonces Elliot tocó su rostro, y dió un golpe con su dedo, en la frente de Shace.
Shace frunció las cejas, se acarició el golpe, y dijo algo entre dientes.
— Quiero Waffles, punto.
Elliot siguió caminando, y los tres nos quedamos viéndolo.
— Pero si él hombre es caprichoso — susurró Adam.
— Y sarcástico— siguió Shace.
— No puedo negar esos argumentos
— dije por último.Me adelante para guiar a Elliot, abajo, y los chicos vinieron tras de mi. Cuando bajamos, notamos a Gomita ya en la cocina, comiendo. Movió la colita en cuanto nos vió, y enseguida fue a darle un lengüetazo a la mano de Elliot.
— Bien, quiero... — se quedó callado, y frunció las cejas — ¿No traje mi celular, verdad?.
— No, se te olvidó — respondió burlón Adam.
— Oigan... ¿Y si vamos a mi casa para desayunar? — sugerí — No lo sé... Si ustedes quieren, podemos ir los cuatro, y...
— Tu mamá me conocerá — dijo Elliot.
Lo miré extrañada.
— Si, ¿Que tiene?
Elliot alzó los hombros, y bufó.
—¿Tu madre no se molestará por que tengas a un amigo "ciego"? — susurró eso con un tono de tristeza.
¿Que le habrá pasado para pensar así?
Cierto... Sus amigos le dieron la espalda en lugar de apoyarlo. Su novia lo dejo, y todos sus conocidos igual.
Elliot desarrollo inseguridades, por esa razón es como es. Desconfiado, e inseguro al momento de aceptar la mano de otra persona.
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El amor es Gris [Libro #1 Completa ✓]
Teen FictionVanessa nunca fue creyente del amor. Elliot jamás creyó que alguien lo pudiera amar. El amor es Gris a los ojos de ambos, gris ante los dos de diferentes formas. Mientras que uno de ellos no supera su pasado, el otro es consumido por la culpa de sus...