El amor es Gris [Libro #1 Completa ✓]

Capitulo 27: Todo fue por ella

~ Elliot Thorne ~
(Sucesos antes de volver)

Cuando yo me fuí ese día... Sentí como todo mi ser se destruyó.

No pude decirle la verdad. No pude ni siquiera imaginarme esos ojos llorosos. No pude siquiera abrazarla una última vez.

Todo era negro para mí. Pero cuando ella llegó y me tomó de la mano, solo pude sentir paz. Y mientras más estaba a su lado, los colores que algunas vez olvidé, decoraron mi interior gris.

Mientras estuve en Suiza, solo pude pensar en Vanessa. Solo podía imaginarla, por qué yo no podría apreciarla como Shace lo haría. No podía...

Incluso cuando estuve en el quirófano solo escuché su voz en un susurró, llamándome. Si yo llegaba a morir, al menos ella se habría quedado con la idea de que yo estaba bien. Al menos tuve una última vez con ella, en esa colina.

Era lo mejor que podía tener en mi vida. Saber que baile con Nessa, saber que la bese por primera vez. Saber que ella me dijo: "Te quiero".

Estuve inconsciente por lo menos dos días. Sentía un fuerte dolor punzante en mis ojos. Los tenía cocidos del rabillo, hasta el final de mi ceja. Tenía vendado medio rostro.

Pero el dolor no importaba, si así yo podría verla a ella.

Estaba feliz, estaba más que feliz. Pude haber muerto. Pero elegí vivir por Ness. Por ella, mi pecosa.

Habían pasado días, semanas, meses... Ya era la hora de quitarme las vendas y hacer ejercicios. Me dijeron que debía usar lentes oscuros, en lo que mis ojos se acomodaban a la luz del sol.

Ver a mi hermano mayor y a mi hermano menor, lo mucho que habían cambiado tanto en tan solo cuatro años y sobre todo ver mi rostro y físico en el espejo, me hizo tener una crisis existencial. Tanto era mi asombro que estuve bajo terapia por tres días. Claro, mis padres pagaron toda una cirugía para que fuera lo mejor hecha posible y sin cicatrices, pero mi estado mental estaba muy deteriorado y aún así tuve que forzarme a seguir. Pero valía la pena si con esto iba a estar más que feliz con ella; pero mi miedo ahora, no era el morir sin haber sabido que se siente ser amado, era perder a la persona que me hizo sentir amado.

Pronto el día de volver a la ciudad había llegado. Después de estar unos meses en otro país y sin saber absolutamente nada de ella, volví. Pero obviamente todo lo tenía ya en mente y ordenado para cuando pusiera un pie en Forks. Por puro capricho mío, unas semanas antes de volver, ordené que inaugurarán un Starbucks. Le dije a Elian que investigara los días en que salía Ness al centro y que días no; eso era más que ilegal por supuesto, pero eso no importaba cuando Nessa se convertiría en mi esposa si o si. Por supuesto que él le pregunto a Shace, quién dijo que se encargaría de llevarla para que yo pudiera verla, pero solo verla, no quería me acercara a ella en lo absoluto. Es bastante fácil entender que estaba bastante molesto por ciertas cosas y no quería contestarme a mi los mensajes, pero si a mi hermano. Aún recuerdo ese día que quise inaugurar de la nada el dichoso Starbucks.

Papá estaba tan sorprendido de mi pronta y confusa decisión. Me cuestionaron demasiadas veces, pero no tanto porque sabían lo haría de todos modos, ya que el centro comercial era mío legalmente y podría monetizar los costos con mi propio dinero. La que si pego el grito en el cielo fue mi madre, no quería cometiera errores. ¿Pero eso era un error? No, en lo absoluto. Yo por ella soy capaz de construir el castillo más grande que anhele, darle un anillo de diamantes más vulgar y deslumbrante que pueda existir, o tan solo, por muy poco que sea, yo le daría mi alma. Aunque claro, esa ya la tiene y ella puede hacer con ella lo que deseé.

Pero olvidando eso, me sorprendía lo mucho que lograba cometer mis ideas.

Y justo en ese momento, la contrataron, tal como lo pedí. Su sueldo obviamente era mucho más elevado que el de los demás, pero eso nadie lo sabía.