— Repite lo que acabas de decir, creo que perdí el conocimiento por un momento— pidió Kara algo confundida y consternada.
— Grayson y yo prácticamente terminamos— comentó para luego darle un gran trago a la botella de tequila. Se lo pasó a la rubia quien bebió también — y besé a Diana—
Kara la miró perpleja y volvió la vista a la botella — Debe haber algo en la bebida— dijo silbando y examinándola. Bárbara carraspeó haciendo que se enfocara de nuevo — perdóname, todavía lo sigo procesando...—
— Pues no eres la única— susurró en voz baja casi imperceptible.
— ¿Qué fue exactamente lo qué pasó?— la pelirroja cerró los ojos y apoyó su cabeza contra el hombro de su amiga.
— Le conté— abrió sus ojos y miró al vacío de la habitación. No tuvo que decir más, la rubia entendió todo — y solo lo ignoró—
— Pero, ¿por qué aceptaste cuando te propuso matrimonio?—
— Creí que yo lo superaría, resultó que solo me estaba mintiendo—
Para tener un vínculo significativo con la persona que más amas no necesita un acta de matrimonio o una ceremonia toda grande y pomposa. Hay algunos que tienen aquello en su lista de deseos y sueñan desde la infancia con el día de su boda. Sin embargo, no todos piensan igual.
Quienes tienen miedo a ese paso poseen un historial familiar relativamente malo. Bajo la experiencia de otros, crean su juicio de valor y deciden que el matrimonio no es para ellos. La verdad es que el matrimonio no es la única manera de sentir o dar amor; así como un empleo no es la única forma de trabajar, ni la religión es la única forma de ser espiritual.
— Le conté como al mes de la muerte de mi padre, mi madre se volvió a casar— dijo con dolor y enojo — Que luego se divorció y se volvió a casar, y así sucesivamente hasta llegar al esposo número 5— agarró de nuevo la botella y tomó más hasta sentir que la garganta le quemaba — El matrimonio no garantiza nada, absolutamente nada. No garantiza que te lastimen, tampoco que funcione a largo plazo; es solo querer llenar esa necesidad de poseer—
Kara asintió comprendiendo — Sabes, las cosas pasan por algo. Solo hay que dejar las cosas atrás y seguir. Si Grayson se atreve a decirte algo, lo noquearé— la pelirroja rió un poco.
En un restaurante italiano, cerca del gran parque de Seattle, Alex y Diana se encontraban cenando a gusto. La cita iba bien y ambas cirujanas se divertían con la presencia de la otra. Sin embargo, Diana aún mantenía claro el recuerdo de hace un par de horas.
— Sabes, por un momento, creí que no aceptarías—
— ¿Por qué?—
— No lo sé. Yo...— dejó los cubiertos a un lado y levantó la mirada — yo no quería que fuera algo de una sola noche— agarró su mano sobre la mesa y la apretó ligeramente — Seré directa. Me gustas, Diana, y quisiera conocerte mejor. Claro si me lo permites—
La cirujana ortopédica tragó saliva nerviosa y asintió — ¿Por qué no? Entonces, estamos saliendo—
— Si, estamos saliendo—
Diana sonrió. No sentía presión ni nada parecido, estaba tranquila y apreciaba la calma que le generaba estar a lado de Alex. Tal vez debería darse otra oportunidad para el amor, no perdía nada con intentarlo.
————————————————————
Al siguiente día, Kara y Bárbara estaban juntas como garrapatas. La rubia sabía que el día podía ser intenso y que ahora más que nunca su persona la necesitaba.
ESTÁS LEYENDO
I was made for you (Supercorp)
FanficAU Grey's Anatomy - Supercorp 🏳️🌈 (No es necesario que hayas visto la serie) Kara Danvers trabaja en el Seattle Grace Hospital como interna. Sin imaginarlo, Danvers se meterá en un triángulo amoroso complicando aún más las cosas. Y es que la espos...