Prom Night © Kookmin

˚┇∦ Capítulo 02

El rechazo era como un balde de agua fría en un día de invierno.

Jimin se sentía exactamente así desde que los nuevos estudiantes habían llegado al instituto, esa misma mañana se dió cuenta que dos de ellos iban a la misma asignatura, por lo que escuchó, sus nombres eran Yoongi y Yugyeom, venían de Daegu y tenían 18 años. La chica de largas coletas únicamente compartía educación física, y enserio agradecía eso porque le había caído increíblemente mal.

Y era extraño porque Jimin no solía tomarle ideas a las personas, sentía que bajo esa altanería existían motivos de ser así. Quizás él era demasiado tonto, o quizás tenía mucha vulnerabilidad a las personas, más que todo al fulano "qué dirán".

Esta mañana estaba transcurriendo con normalidad, Jimin como siempre apareció en primer lugar en la cartelera informativa, tuvo que dar los anuncios matutinos en la cafetería y ayudar al comité del baile para empezar con las inscripciones, una vez aprobada por el director, empezaría desde cero con los preparativos. Le emocionaba todo esto de los adornos, preparativos, la música, los trajes y la graduación.

Era de esos momentos felices donde te das cuenta que valió completamente la pena esforzarte para llegar a este momento, que quizás tuviste tropiezos en el camino de llegada, pero cada golpe fue un escalón a la meta principal.

Sí, estaba sonando jodidamente cursi, pero ¿Qué iba a hacer? Ese era el sueño que cada estudiante en Hybe tenía, posiblemente lo guardaban bajo llave porque sentían que decirlo en voz alta sería una llave para abrir la puerta de las burlas. Y por esos motivos nefastos, muchos estudiantes callaban sus pensamientos, veían en silencio y tragaban opiniones que posiblemente se convertirían en debates compartidos con otra mente desconocida.

Todo era una balanza, y Jimin siempre procuraba quedarse en el lado neutro, ese que no le traía problemas, más bien reconocimiento.

Cuando la campana sonó, todos los estudiantes ingresaron a sus respectivos salones, Jimin cerró su casillero para encaminarse a su salón de clases, hoy le tocaba biología, justamente su asignatura favorita entre tantas. Al tomar asiento en su silla, Hoseok y Taehyung se acercaron como policías encubiertos buscando sospechosos en un caso sin resolver.

—Hice mi tarea del día. —habló Hoseok.

—¿La que dejaste a última hora? —cuestionó Jimin con sarcasmo.

—No, tonto. Hablo de los nuevos. —aquello último lo susurró para no ser oído por el resto—. Tengo un amigo que tiene un primo que sale con una chica que tiene un conocido que es mejor que el FBI.

—Hoseok, ve al grano. —pidió el rubio frunciendo sus labios.

—¡Vale! Joder, le quitas el dramatismo a todo. —Jimin rodó los ojos—. La cosa es que, según lo que dicen en los pasillos, los nuevos vienen de un colegio público situado en Busan.

—¡Que asco, colegio público! —exclamó Taehyung horrorizado.

Jimin se cruzó de brazos.

—¿Y qué tiene? —interrogó de vuelta.

Hoseok golpeó con sus nudillos la mesa.

—Era un colegio para criminales, no sé los detalles, pero dicen que fue creado para estudiantes con malas calificaciones, problemas económicos y que sus padres sean unos hijos de puta.

—Dudo mucho que un instituto así exista. —reparó el rubio—. Además, si fue un lugar malo, entonces está bien que hayan venido ¿No creen? Es decir, quizás su educación no era la mejor, quién sabe.

—Jimin, eres tan bueno. —susurró Hoseok, el rubio sonrió—. Pero menudo idiota también, eh.

La sonrisa se esfumó.