Prom Night © Kookmin

˚┇∦ Capítulo 22

Las navidades ya habían llegado a Seúl de la manera más bonita. Las tiendas estaban decoradas con adornos navideños y villancicos, el clima era frío, por ende las personas se abrigaban con sus más cálidos abrigos para refugiarse.

—¿Y si trabajas como Santa? —cuestionó Hannah mirando disfraces de Santa Claus en tiendas.

Jungkook rodó los ojos.

—Ya dije que no voy a disfrazarme como Santa. —le aclaró.

Jimin sonrió divertido mirando de reojo Jungkook bufar ante las numerosas sugerencias de trabajo. Entraron al centro comercial siendo recibidos por trabajadores disfrazados, un frondoso árbol de navidad y niños corriendo pidiendo regalos.

—Joder, esto parece una feria de mocosos consentidos. —murmuró Jeon al lado de Jimin. Hannah corrió a una tienda mirando consolas gigantes de videojuegos y un trampolín.

Jimin miró al pelinegro con una sonrisita risueña.

—Mira el lado positivo, cuando nuestro hijo nazca, tendrás que venir a este lugar y comprarle regalos.

Jungkook alzó sus cejas de par en par.

—¿Y calarme tremendas filas por un juguete de mierda? —bufó— Ni lo sueñes, le daré una pelota de esas que vienen en cajitas feliz.

—¡Jungkook! Que cruel eres. —se quejó el menor soltándose de su agarre, Jungkook rio bajito y lo volvió a tomar para besar su mejilla.

—Es broma, mi pollito enojón. —susurró sobre sus labios— Por nuestro hijo haría lo que fuera, y si tengo que hacer una puta fila de 2 días para comprarle un feo muñeco que le alumbren los ojos, entonces lo haré.

El rubio soltó una carcajada ante sus palabras, le dio un besito en los labios a Jungkook y después caminaron hasta la tienda donde Hannah estaba. Ingresaron al local mirando la enorme jugueteria frente a ellos, los uniformes de los trabajadores eran graciosos y ridículos a la vista de Jeon.

—Buenas tardes, ¿en qué puedo ayudarlos? —dijo una mujer sonriente.

Jimin decidió hablar por su novio.

—Buenas tardes, estamos buscando vacante para empleados.

—Oh, justo en nuestra jugueteria necesitamos nuevos empleados, las vísperas navideñas ya están a la vuelta de la esquina y nuestra tienda se llena de padres desesperados.

Jimin sonrió emocionado.

—¡Genial! Mi novio está buscando empleo, es muy responsable y puntual. —tomó la mano de Jungkook para acercarlo a la mujer de cabello castaño.

—¿Tienes experiencia con caprichos para niños? —le preguntó la mujer.

Jungkook bufó mirando a Hannah.

—Ni lo dude, lidio con dos niños y próximamente tres.

El rubio golpeó su brazo entendiendo la referencia, la mujer sonrió y tomó un formulario del mostrador para entregárselo a Jungkook.

—Puedes poner tus datos ahí para llenar el puesto de empleado, el uniforme lo tendrás en tu primer día.

—¿Y eso sería..?

—Mañana mismo, por supuesto.

Jungkook alzó sorprendido sus cejas, Jimin sonrió feliz por el éxito que tuvieron, el tatuado llenó el formulario colocando sus datos personales. Una vez entregado, la mujer le dio una tarjeta con el nombre de la tienda. Jimin se despidió amablemente y salieron de la tienda cantando victoria.