No es para mí (Omegaverse)

IX

Los hermanos Jiang habían tomado el control de la constructora familiar.

Eso había causado una gran conmoción. Todos sabían que esos tres en su tiempo llevaron a la constructora a su mayor éxito, aunque a muchos de sus clientes le alegró saber que los prodigios que habían renunciado volvieron, otros se fueron y las acción nes de su compañía se habían estabilizado un poco, pero aún así seguían teniendo problemas.

En una semana no habían encontrado no rastro del ingeniero del edificio que colapsó, además de que habían tenido que suspender las obras para realizar una revisión de que los materiales fueran los correctos, que la construcción se llevaba a cabo sin contratiempos, pero sobre todo que la infraestructura estuviera quedando sin ningún tipo de problema a futuro.

Ahora, sin embargo tenía que concentrarse en el problema que tenía frente a él.

Si bien en el derrumbe no hubieron heridos muertos, muchas personas perdieron sus casas y ni siquiera la noticia de que él era el nuevo Presidente Ejecutivo de la constructora había cortado el hilo de la noticia.

Jin Zixuan le había dicho que no había con que hacer una demanda la mala publicidad es peor que una demanda.

Así que ahora en su antiguo penthouse sentado en el suelo de su balcón veía los expedientes de esas familias que se quedaron sin hogar, todo por culpa de la negligencia de maldito ingeniero.

No.

La culpa no era solo de ese ingeniero, también fue suya por creer que alguien que no sabía de construcción podría dirigir una compañía de construcción. Realmente ya no sabía que pensar de su habilidad para juzgar a las personas correctamente. Se había equivocado y por su equivocación esas personas se quedaron sin hogar, por su equivocación los clientes estaban dejando la constructora y sus empleados y las familias de los mismos quedarían sin sustento. Quería una respuesta a cómo salir de todo esto y lo peor era que se sentía como la mierda.

Estaba solo, estaba triste por su ineptitud y tenía miedo.

Después que sus padres le dieran el cargo se fue de la mansión Lan, no quería permanecer ahí por más tiempo, estaba cansado de sentirse un Omega doméstico, pero su trabajo tampoco rendía frutos y estaba estancado, por lo que toda la constructora estaba estancada.

Durante toda la semana se había reunido con sus clientes para explicarles superficialmente y aunque la mayoría siguió con ellos los que se fueron hicieron mucho daño a la imagen pública de la empresa.

Estaba tan concentrado en culparse y pensar en todo lo malo que había hecho que cuando el timbre sonó se sobresaltó, otro toque lo hizo levantarse y dirigirse a la puerta.

Del otro lado se encontraban las personas que esperaba, era un equipo de personas en los que él confiaba y sobre todo no los buscaba menos que fuera realmente necesario.

- Estás preñado - fue el saludo que le devolvió Xue Yang y Son ZiChen golpeó su cabeza.

- No le hagas caso - habló el dulce Xiao XingChen.

- No creí que te atreverías a juntarme con la basura de Xue Yang - habló el fuerte alfa detrás de los demás.

El Omega sonrió y los invitó a pasar, una vez todos sentado en la sala de su casa se miraron fijamente y después de analizarse unos a otros hablaron.

- ¿Qué necesitas de nosotros, A-Cheng? - habló Qing Su.

El Omega suspiró, solo esperaba que esto que estaba planeando no sea contraproducente.

Jiang YanLi estaba satisfecha.

Su reunión con las personas que habían perdido su casa fue un éxito, si bien algunos se mostraron reacios a un trato al principio, pudo convencerlos de que en vez de una demanda civil que no iba a progresar, cubrir los gastos de una reparación de sus casas y becas de estudio para sus hijos.