China, Pekín
5 años antesLa primera vez que Lan XiChen habló con Jiang WanYin había quedado sorprendido, a pesar de que el Omega había insultado a toda la junta de Lan Company, ese chico era completamente encantador; y más lo era la manera en que apoyaba a su hermano para que no se rinda con WangJi.
Lo estaba observando ingresar a su auto cuando de repente se detuvo, miró a los lados como si estuviera buscando a alguien y cuando no encontró a nadie en el solitario estacionamiento habló.
– Deje de esconderse, Lan XiChen –
Viéndose descubierto, el mayor salió de su escondite apenado y su apuesto rostro estaba coloreado con el rojo de la vergüenza, y se acercó al menor.
– No era mi intención espiarlo, joven Jiang – dijo con la cabeza baja.
– Levante la cabeza presidente Lan – habló el menor y el mayor obedeció – No es bueno bajar la cabeza, es señal de sumisión y según sé usted... – lo miró de arriba hacia abajo – no lo es – lo miró directo a los ojos al decir esto último.
– Acepte almorzar conmigo como disculpa por el comportamiento del consejo, por favor – el menor suspiró y negó.
– Aceptó sus disculpas, pero no almorzaré con usted, Lan XiChen; ahora me retiro – entonces fue tomado del brazo por el mayor.
– Entonces cena conmigo – habló – sin ser por disculpas, solo conmigo, Lan XiChen –
El Omega negó y se soltó del agarre del más alto – Estábamos ebrios y no debió pasar, solo olvídalo – el menor se puso de puntillas y alcanzó la mejilla del Alfa donde dejó un suave beso – Adiós, Lan XiChen – el mayor se quedó pasando viendo como el Omega entraba a su auto y empezaba a encenderlo y así el Omega salió del lugar, el único rastro de la presencia del Omega fue un casi imperceptible aroma a loto violeta, vainilla y... tal vez si el aroma fuese más claro se hubiese dado cuenta de los demás componentes de su aroma.
El alfa seguía mirando por dónde se había ido el Omega y sonrió como bobo.
Jiang WanYin, era una fiera, una que a él le encantaría adiestrar y de algo estaba seguro y era de que lo haría, pues, ese solo sería el primero de muchos encuentros y que Dios lo ayudara.
Porque ese Omega era una tentación en la que él ya había y quería caer una y otra vez.
Ese lindo Omega era fuego y él quería quemarse.
Solo qué, ni en sus más profundos sueños imaginó que su más grande deseo de ese tiempo se convertiría en una prisión decorada con cadenas de oro y plata, sábanas de seda y paredes de jade.
..........
Días más tarde los gemelos Jade se encontraban revisando la propuesta que había hecho el joven Jiang (excelente por cierto), hasta que escucharon gritos provenientes de afuera de la oficina y la normalmente silenciosa estancia se volvió un bullicio en un instante.
Ambos hermanos se miraron entre sí sin entender que pasaba y levantándose de sus respectivos asientos de encaminaron hasta la sala de espera de la oficina de vicepresidencia... y el panorama no era nada bueno.
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No es para mí (Omegaverse)
FanfictionJiang Wanyin había nacido para muchas cosas. Ser amado no era una de ellas. Había nacido para ser el heredero de su padre, a pesar de ser un Omega, había nacido para llevar Jiang S.A. a lo más alto del mundo, había nacido para no contar con nadie, p...