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Feliz viernes e inicio de diciembre ❣️
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Chuuya no entendía qué estaba pasando, ¿por qué Fyodor le había alejado de Dazai tan de la nada? ¿Tal vez Sasaki volvió del baño y los vio? ¿O alguien le pidió a Fyodor que los separara? Todo era un completo enigma que estaba dispuesto a descubrir ahora mismo. 

Se alejaron hasta llegar al otro lado de la pista de baile, Chuuya volteando de vez en cuando sobre su hombro, viendo que Dazai aún los observaba y... se veía bastante molesto, no se lo iba a negar. 

—Oi, ¿por qué tuviste que interrumpir tan de la nada?

El azabache suspiró, dejando ir la mano de Chuuya ahora que estaban lejos. 

—¿No es obvio? —le devolvió él la pregunta, siguiendo su explicación cuando Chuuya le alzó una ceja, confundido —. Ese baile que se estaban montando era muy... intenso para los ojos del público. Parecía que necesitabas ayuda tratando de alejarte de Osamu... Además, molestarlo es uno de mis pasatiempos favoritos. 

Chuuya dejó salir un suspiro del alivio... pensó que había hecho algo peor, que le regañaría tal vez por la pequeña broma que le hizo a Sasaki, o porque esta los vio y estaba furiosa... Pero solo fue por la intensidad y, sinceramente, no lo culpaba. Esta era la fiesta de compromiso de su hermano y, que este esté bailando muy animadamente con el niñero de la casa... Definitivamente no se veía bien.

—Como sea, podría haberme alejado de Dazai cuando quisiera, no necesitaba ayuda. 

Fyodor sonrió tranquilo, una de sus manos sobre el hombro de Chuuya, la otra agarrada de su mano, ambos moviéndose de un lado a otro en sincronía, sin importar que no estuvieran yendo al ritmo de la música. 

—No lo parecía... Mira, no sé lo que esté pasando entre ustedes dos, pero no se veía muy divertido y las relaciones entre adultos siempre deberían ser divertidas, ¿no crees? 

Chuuya estuvo a punto de objetar, cuando Fyodor hizo que diera una vuelta sobre su eje, provocando que se riera por lo estúpido de la acción. 

—¿Ves? Te estás divirtiendo más y Dazai lo sabe.

Desvió la mirada al escuchar el nombre del castaño, buscándolo entre la multitud y... Efectivamente, les seguía observando, su expresión aún más enojada que la de antes. 

Tal vez habían avanzado un poco con lo de "Tenemos que hablar", pero había algo de cierto en las palabras de Fyodor, así que siguió bailando con él las siguientes canciones. 

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Antes de que se dieran cuenta, ya estaban todos reunidos para el brindis que darían Dazai y Sasaki. 

—Muchas gracias a todos los que vinieron esta noche —Sasaki andaba con una sonrisa de oreja a oreja a pesar de que se tuvo que cambiar de vestido después del pastel globo —. Todo esto es un sueño hecho realidad para mí... Osamu es un sueño hecho realidad para mí. 

Alzó la copa de vino hacia la dirección de Dazai, parpadeando varias veces de forma coqueta, sonriendo victoriosa. Chuuya viró los ojos. 

—¿Habla en serio? —susurró Chuuya asqueado con la escena, podría estar hasta el final de la habitación, pero escuchaba y veía muy bien todo. 

—Oh, por supuesto —Fyodor andaba al lado de él, sonriendo —. Es un negocio muy importante para Sasaki, por algo contrató a alguien para que le escribiera su brindis. 

Un Asunto de NiñeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora