Just a baby ➸ 𝐒𝐞𝐨𝐧𝐠𝐣𝐨𝐨𝐧𝐠

๑ 𝚂𝚎𝚘𝚗𝚐𝚑𝚠𝚊 𝚢 𝙷𝚘𝚗𝚐𝚓𝚘𝚘𝚗𝚐 ๑

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Seonghwa y Hongjoong se casaron cuando su primer hijo cumplió tres meses, fue una ceremonia muy pequeña, solo asistieron sus padres y los testigos de matrimonio. Después de ello, planearon un viaje a la playa por una semana completa, los padres del pelinegro cuidarían a Mingi mientras tanto, pero lo que no sé esperaban era el llanto escandaloso del gatito al ser arrancado de los brazos de Hong, tanto fue el lloriqueo que el pelinegro y el castaño decidieron llevarlo junto a ellos.

Habían pasado algunas horas desde que los Park-Kim llegaron al hotel. Hong se encargaba de desempacar las maletas mientras Hwa mecía a su hijo a lo largo de la habitación.

ㅡCreo que ya se durmió ㅡel bebé comenzó a llorar buscando a Hongjoongㅡ. Me engaño, quizás tenga hambre.

El castaño toma asiento sobre la cama para alimentar a Mingi.

ㅡDebería de ser yo quien hiciera eso y no Mingi ㅡdijo Seonghwa disgustado, pero una almohada viajó directo a la bonita cara de Hwa.

ㅡ¡Eres un pervertido!, controla tu boca, nuestro bebé está presente,... además, ésto es de mi hijo, tu solo le quitarías su leche ㅡHong retiró la boquita de Mingi de su pecho y le sobo la espaldita por unos minutos antes de recostarlo sobre la cama.

ㅡNo me decías eso antes del nacimiento de gatito ㅡel pelinegro estaba hablando muy coquetamente, queriendo atraer la atención de su esposo, pero el menor solo ríeㅡ. ¡Vamos Hong!, ¿No quieres ir al baño?, es grande.

Hongjoong ríe otra vez.

ㅡ¡Deja de rogar sexo, pareces un puberto caliente!.

ㅡ¿Sexo? pensé que hacíamos algo especial ㅡSeonghwa cruza los brazos indignado, Hongjoong dejo al bebé en la cama, rodeado de almohadas y aprovecha el descuido para saltar hacia a su recién esposo y ambos caen por falta de equilibrio.

Apenas se acerco al rostro del pelinegro, éste sin dudarlo junto sus labios con los contrarios siendo correspondido casi de inmediato, conforme pasaban los segundos el beso se hacía cada vez más intenso y con miradas avergonzadas se dirigieron al baño. Tal vez si fue una buena idea después de todo, dentro del no tan pequeño espacio las cosas se tornaron aún más fogosas, Hongjoong intentaba callar sus gemidos mordiendo los hombros de Seonghwa, las embestidas lo estaban volviendo loco, el deseo los estaba consumiendo ambos, sin darles un aviso previo, ambos llegaron al oasis de su encuentro.

El apasionado momento fue interrumpido a los pocos minutos de haber concluido. A lo lejos oían quejas y ruiditos por parte del bebé, Seonghwa bajo al castaño de sus brazos y acomodaron sus prendas lo más rápido que pudieron para después salir del baño.

ㅡ¿Qué haces Gigi? ㅡel cuerpo del pequeño comienza a sacudirse emocionado al escuchar la voz agitada de su papáㅡ. ¿Quieres ir a la playa, bebé? ㅡreparte pequeños besitos en el diminuto vientre del menor.

Mientras pasean por las calles, Hongjoong cuenta sus famosos chistes, todo es risa hasta que el castaño observa una pareja, aparentemente de la misma edad que ellos, con la diferencia que no portaban un bebé en los brazos. A veces, Hong se quedaba llorando toda la noche, pensando en como hubiese sido su vida sin el bebé, amaba mucho a su hijo pero extrañaba las salidas con los amigos, dormir hasta tarde, no preocuparse de los cambios de pañal ni de los horarios de sueño y comida.

ㅡ¿Te hubiese gustado seguir así... cómo ellos? ㅡsuelta de repente y esquiva la mirada de Hwa.

ㅡ¿A qué te refieres, a... ser solo dos? ㅡsu cuerpo tiembla, sin embargo, asiente aún con la mirada bajaㅡ ...algunas veces, no creí que cuidar a un bebé fuera aún más difícil de lo que parece.

Suelta una risita pequeña, un apretón en su mano lo despierta de su trance, Seonghwa volvió a entrelazar ambas manos.

ㅡTranquilo mi amor, a cualquiera le puede pasar, no te sientas mal por pensar así, estas cansado, es normal, Mingi llegó antes a nuestras vidas, pero lo protegemos y amamos. Te prometo que estaremos juntos por toda la eternidad.

El menor no estaba dispuesto alejarse del pelinegro, ni en un billón de años, paso toda su vida enamorado de él, ahora que tenían a un pequeño gatito a su cuidado, menos dejaría de amar al atento, talentoso y perfecto de su marido.