¿Qué tanta confianza tienes contigo mismo?, ¿con los demás?, ¿con tu pareja?
¿Eres capaz de creer en la palabra de alguien o te dejas influenciar por los demás?
Un malentendido que pondrá a prueba la confianza de dos adolescentes que están iniciando...
—Bien, no le puedes decir esto a Teresa porque se arrepentirá de ir, pero la semana que viene en el parque de atracciones comienza la temporada de terror.
—Y eso significa...—menciono sin terminar su oración esperando respuesta, Avril giro los ojos todavía sonriendo.
—Ella le tiene miedo a esas cosas, Lazy igual, pero tendrá a Mark para abrazarse con él...
—Y quieres que dejar a Teresa sola con Henry—interrumpió Gideon, básicamente resumiendo toda la explicación.
—Exacto, por eso eres mi mejor amigo, siempre me entiendes.
—¿Y qué harás cuando ella se quiera acercar a ti?
—Ya veré como soluciono eso, pero el plan es dejar a la pareja cursi juntos, obviamente, tú y yo juntos por otro lado y dejar a Teresa y Henry para que se acerquen más.
—Mmm es un buen plan, pero aquí mi pregunta es, ¿ella aguantará... ya sabes todo lo de terror? —Preguntó Gideon refiriéndose a Teresa.
—Tampoco le digas que te conté, pero de pequeña se vio varias películas de terror con sus primos y digamos que las tolera.
—¿Por qué no le gustaría que me dijeras?
—No tengo la menor idea, pero supongo yo que le avergüenza tener miedo a pesar de haber visto películas de ese tipo—dijo encogiéndose de hombros, Gideon suspiro.
—De acuerdo, no tendría que avergonzarse, pero ahí cada quien—dejaron sólo unos segundos de silencio cuando Gideon habló nuevamente—. Bueno... nos vemos mañana Abby.
—Claro—El chico se acercó a darle un abrazo que ella correspondió inmediatamente, para luego despeinarla un poco y despedirse con un movimiento de mano. Se formó un leve puchero en los labios de Avril para después volverse una pequeña sonrisa.
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Teresa y Avril ya tenían listo el plan para el día siguiente sólo les faltaba una parte importante, avisarle a Mark. Parecía fácil, pero se complicaba por el hecho de que él se la pasaba con Lazy y no querían interrumpir nada, pero dado que ya era miércoles no tenían otra opción, sólo esperaban que Lazy no sospechara nada.
—¿Tus ojos son así de brillantes? —Dijo coqueto Mark. Ambos se encontraban caminando por los pasillos tomados de las manos, claro que si veían a un profesor se soltaban las manos, dejando salir pequeñas risas.
—Dios no digas eso, me haces sonrojar—respondió tratando de ocultar su sonrojo con su otra mano y riendo un poco nerviosa.
—Eres muy tierna Lee—mencionó ahora abrazándola por los hombros, ambos se voltearon a mirar sonriendo cuando escucharon un sonido que los hizo voltearse. Teresa y Avril estaba atrás de ellos sonriendo un poco nerviosas.
—Eh yo... odio interrumpirlos, pero...—hablo nerviosa Teresa, la pareja miraba a ambas chicas un poco confundidas.
—Necesitamos hablar contigo Mark... a solas—ambos se voltearon a ver mutuamente.
