TÚ Y YO

19.

Doble actualización: 1/2

ALMAS GEMELAS

• Jessica Allen •

—Si Chiara es invisible estás en la obligación de decirme si lo es o no—digo con gracia—No tengo visión ultra X, Marc.

El pelinegro resopla y se recuesta tranquilo en la pared.

—No le va eso de la puntualidad.

—No me digas—digo con sarcasmo.

Ambos sonreímos, y pocos minutos después veo a una chica algo perdida, de pelo marrón claro, tez morena clara y ojos rasgados.
Llevaba un vestido azul celeste con algunas líneas blancas, el cabello recogido y unas botas negras—igual que yo—.

Vale, vamos bien.

—H-hola—sonríe nerviosa—Me surgió algo con mi madre... y bueno, lo siento, ¿Lleváis mucho tiempo esperándome?

—Solo veinte minutos, pero no es nada—le sonrío amablemente, viendo cómo va directamente al lado de mi mejor amigo para darle un leve beso.

Qué raro fue ver eso.

—¿Jessica, verdad?—se giró en mi dirección.

—La misma.—me acerqué y le di un abrazo, el cual recibe.

—Por fin te conozco, ya estaba aturdida de oír hablar de ti y no tener el privilegio de conocerte.

Enarque una ceja y mire directamente a Marc.

—No te creas, tú también ocupas una gran parte de mi día a día.

Ella enrojeció. Pero al fin y al cabo tampoco era mentira, los últimos días estuve hablado de ella con Marc, y por lo que me contó, a él si que le gustaba.

—¿Siguen hablado por el camino? Vamos tarde.—masculló él.

Nosotras asentimos y mientras íbamos al coche decidimos sentarnos en la parte de atrás para poder conocernos más cómodamente.

Resultó que Chiara era una amante de la ciencia y los vídeo juegos. Vivía con su madre y trabaja de camarera en varios sitios.

Algo que me gustó de ella fue su personalidad, era una chica amable y su mentalidad sobre ciertas cosas era alucinante, podía quedarme por horas escuchándola hablar sobre algo y no aburrirme.

De vez en cuando le daba unas cuantas ojeadas a Marc, y, solo con mirarlo le di a entender varias veces que Chiara me agradaba. Y me pareció ver que eso a él le gustó.

Cuando llegamos al lugar—una casa con piscina en la zona alta—Nos dirigimos a la entrada para un rato después encontrar al resto de mis amigos.

Las presentaciones fueron muy agradables, todos trasmitimos buenas sensaciones a Chiara y ella a nosotros. Ali y Paul la saludaron con un abrazo, y Thomas...—el cual estaba hastiado con el teléfono en la oreja— le hizo solo un asentimiento con la cabeza.

Ella comprendió que estaba ocupado y solo le saludo moviendo la mano.

Todos se fueron hacer lo suyo, y yo, con sigilo me acerqué a Thomas. Tenía el ceño fruncido, y suspiraba repetidamente dando vueltas al alrededor.

—Claro. Keyla se ira en el vuelo de hoy a media noche, no, dijo que le venia mejor así.—puso los ojos en blanco—Barrett, los documentos sobre la administración de Marketing y las cuentas basadas en las estadísticas financieras los tengo yo... También eso, sí. A esa hora va bien.—él escuchó atento y al final se despidió secamente.