Capitulo 13 ✝️

39 9 1
                                    


Narra el espectador.

"Soy luz y un simple espectador"

No sabemos cuándo el caos se apoderará totalmente del mundo. Un mundo donde el pecado es el alimento de cada día.

Con el gran anunció de Sara rompiendo su compromiso, la iglesia cayó en un total silencio, un silencio incómodo donde todos se miraban entre sí, sintiendo lástima por Damián.

Diana Sanders caminaba hacia su asiento con aire ausente. Mientras el padre Gael se debatía entre seguir con su sermón o terminar todo.

Todos miraban a Damián con lástima, pobre de él.

Giró el rostro como si del exorcista se trataba cuando un estruendoso grito se escuchó para después dejar ver a una Kira Sanders totalmente irreconocible.

Su cabello estaba totalmente desarreglado, en sus muñecas se podían apreciar pequeños cortes y cómo la sangre salía de estos, machando el piso con cada paso que daba.

Caminó hacia su padre, quien la miraba horrorizado.

Sus ojos llamaron mi atención. Bien dicen que los ojos son las puertas del alma, ¿crees que mentiría si te dijera que los ojos de Kira denotaban una gran vacía como si no sintiera nada?

Parecía como si se encontraba perdida, las lágrimas bajaban por sus mejillas, está mientras trataba de emitir palabras.

—¡Fui iluminada! —dice mirando a la nada, sus manos tiemblan.

Trató de ocultar una sonrisa mientras evaluó cada uno de sus pasos.

— Nuestro señor Dalias Igor se me apareció y sabes qué dijo — dice caminando hacia adelante mientras Damián la mira fijamente.

Levantó una ceja tratando de descubrir lo que está pasando.

— Dijo que los pecadores deben morir — la miró sacar una navaja y llevarla directamente a su cuello.

Sus ojos miran hacia una sola persona, Damián.

Niego con la cabeza incrédulo, mi rostro gira hacia aquella persona que sonríe mientras ella continúa sosteniendo la navaja en su cuello.

El padre Gael se acerca a ella y detiene abrutadamente sus pasos cuando ella acerca la navaja hasta tal punto que de su cuello sale un rastro de sangre.

— Yo soy una pecadora, papá — pronuncia mirando a Gael mientras este niega.

— No, cariño, suelta la navaja y habla conmigo —susurra en modo de súplica.

Miró hacia el asiento del frente, los hermanos Peterson presencia la escena con total calma, como si esto fuera un hecho insignificante.

— No quiero morir, papá — dice mientras solloza.

Sus ojos siguen viendo fijamente a Damián mientras yo trato de comprobar mi teoría.

Así que no eres el bueno de la historia, de todos modos, el principal sospechoso de toda historia es el buen camino. Con pasos rápidos voy a salvar una vida.

Las personas se acumulan alrededor de Kira tratando de que ella soltara la navaja mientras mis pasos iban directamente hacia Damián. Sabía que, si hacía cualquier cosa, nadie lo notaría debido a la cantidad de personas acumuladas.

Con fuerza lo empujo, hacía que callera con torpeza directamente a los pies de Kira. La miró arrodillarse junto a él y su susurrar algo muy cerca de su oído, a lo que este asiente.

Kira suelta la navaja sollozando con fuerza mientras Damián la abraza y sujeta con delicadeza.

Niego tratando de ahogar aquella carcajada que brota de mi ser, ¿cómo es posible que manipules a tu hermana a tal punto que le pidas quitarse la vida?

Miro a Diana limpiar sus lágrimas mientras trata de cubrir las heridas de Kira.

No eres bueno, Damián también, eres oscuridad y Jackson no necesita más personas así.

Jaece se levanta de su asiento junto a Dexter y Dalton. Cuando pasa por mi lado, sus pasos se detienen y me mira de arriba abajo efectuando una mueca.

— Deberías dedicarte solo a observar — dice. Lo miro con incredulidad mientras él pasa por mi lado con rapidez.

No es posible, niego sujetándome la cabeza.

— Cómo él sabe de mí — pienso.

Camino hacia la puerta, dejando el caos atrás. Mis pasos son lo único que se escuchan en el gran silencio mientras dirijo la vista en mi reloj.

Me detengo junto al Parker central, mientras miro el lugar detalladamente y tomo asiento en un banco.

Las horas pasan con rapidez mientras la noche cae y junto a ella llega la persona que estuve esperando. Enderezo la espalda cuando escucho sus pasos, no planeo voltear a verlo porque sé que estaría cometiendo un error.

—¿Crees que acercarte a la casa de Sara está bien? — reclamó en un susurro.

— Eso no te incumbe — responde con voz ronca.

—Asesinas a diestra y siniestra y supones que la oscuridad es un buen escondite para ti — digo con burla.

— Tal vez lo sabes.

—Aléjate de Kira — digo con rapidez.

Su carcajada se escuchaba escalofriante.

— Porque lo haría, crees que al decirlo milagrosamente dejaría de acercarme a ella.

— Ella no te ha hecho nada, es inocente — trató de mantener la calma, mientras convierto mis manos en puños.

— Es una pecadora, no la viste, ella subió de nivel, conoció a nuestro señor Dalias.

— Crees esa estupidez — digo.

— Deberías ocuparte de quienes te observan, y dejarme hacer mi trabajo.

Levantó una ceja cuando lo escuchó decir aquello.

— Y según tú, cuál es tu trabajo.

— eliminar a los pecadores — susurra.

Volteó al momento en que logró ver su espalda alejándose con pasos rápidos.

Debería tomar medidas drásticas, pero ¿cómo podría moverme sabiendo que Jaece también me observaba?

A Través De Las Sombras [Sin Editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora