Un año después de que Ben y compañía salvarán a la tierra de la invasión Highbreed, viven sus vidas de la manera más común que les permite el ser plomeros; pero todo cambiará en el momento que una invasión llegué con intenciones no de supervivencia...
Muy Grande Supremo caía lentamente por desde los aires mientras era visto por todos aquellos que habían hecho un esfuerzo para pelear con Vikgax en las afueras de Bellwood; Incurseanos, humanos y todo aquel alienígena unido a la batalla de parte de los plomeros, todos juntos para detener a Vilgax. A apenas un kilómetro de tierra firme, Muy Grande perdió la forma suprema y aterrizó con firmeza en el suelo, perdiendo así la forma de To'kustar y volviendo a ser el Ben de siempre, ante los ojos de todos los presentes, y aquellas valientes cámaras que estaban ahí reporteando lo sucedió, un joven llamado Ben Tennyson y su equipo, había expulsado a un conquistador galáctico del planeta. Kevin se puso de pie con la ayuda de Gwen, quien no hizo más que recibirlo con un profundo beso, que se convirtió en una fuerte bofetada de parte de Gwen, solo para tornarse nuevamente en un profundo beso de parte de Gwen. Cooper y Lucy llegaban en compañía de Albedo y Julie junto a los demás, viendo con cierto entusiasmo como Kai esperaba ansiosa a Ben, que apenas llegó a ellos, corrió a abrazarlo y besarlo como su fuera el último día en que se verían, todo claro, después de haberse ganado todos los días por venir.
—¿Ya no trataras de matarme?— pregunto Ben tras extenderle su mano libre, pues con la otra rodeaba la cadera de Kai
—Por un rato no creo que haga eso, sería repetitivo— declaró Kevin, con frialdad pero seguridad mientras se acercaba a abrazar a su mejor amigo
—¿Kevin? ¿Estas bien?— pregunto Gwen al ver que el oído de Kevin mostraba un poco de sangre
—S-Si, todo bien, solo son residuos de mi castigo por meter la pata— explicó Kevin, abrazando a Gwen y mirando a Rex y Albedo —. Lamento haberles frutado sonicamente.
—Mi consuelo es que tal vez estés medio sordo— explicó Albedo, mientras giraba aquel brazo que tenía destrozado hace apenas un rato
—No hay como enloquecer para encontrar a tus amigos de verdad ¿No?— pregunto Rex, mientras miraba de reojo a Charmcaster, desapeaciendo entre los Plomeros, no sin antes, mandarle un beso —¿Heather?— pregunto Rex entre dientes, viendo finalmente como desaparecía, al igual que todos los demás
—Ya volverá Rex, estas loquitas siempre vuelven— declaró Ben, tras besar la frente de Kai con cariño y luego bajar a besar sus labios
—Eso espero... no le pedí su númer...— pero Rex fue interrumpido cuando, desde la ahora nave nodriza de los Incurseanos, descendía a través de un rayo atractor la princesa, ahora reina, Attea
—¿Tienen un momento, terrícolas?— pregunto bromista la Reina Attea, mientras miraba a su alrededor, viéndose rodeada por desconfianza —. Okey, okey ya se que tal vez estan algo enojados, pero ¡Ey! ¿¡Los ayudamos con Vilgax no!?
—Invadiste nuestro planeta— declaró tajante Gwen
—Mi padre y yo temiamos a Vilgax y su armada, debíamos unirnos— añadió Attea, con nerviosismo ante tal respuesta
—Tuve que volverme un monstruo para tratar de solucionar esto— añadió Kevin —¡Y falle!
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