Un año después de que Ben y compañía salvarán a la tierra de la invasión Highbreed, viven sus vidas de la manera más común que les permite el ser plomeros; pero todo cambiará en el momento que una invasión llegué con intenciones no de supervivencia...
Ben, Kai, Rex y Heather llegaron al hogar de Ben, notando un sepulcral silencio en su vecindario, notando como es que había botes de basura por los suelos, regados y algunos hogares tenían las puertas abiertas, sin alguna señal de que las personas estuvieran en sus interiores, asustadas en espera de la salvación divina o alguna otra fuerza que conbatiera la llegada de los alienígenas de a la Tierra, en especial siendo Bellwood el punto zero de la conquista de Vilgax.
—¿Donde están todos?— pregunto Kai, mientras temerosa salía del auto
—Evacuados, espero...— susurro Ben, intentando no notarse preocupado; Ben avanzo con una calmada rapidez hasta la puerta de su casa, abriéndola rápidamente y notando con notoria tristeza el verla totalmente vacía y carente de algún más sonido más alla del que estos creaban —¿Mamá? ¿Papá?— pregunto al aire Ben, mientras callaba para intentar oír a alguien, pero no hubo respuesta
Las paredes carecían de fotografías en ellas, no había comida en el refrigerador y muchas más cosas al azar en el hogar estaban perdidas, dando una muy sólida imagen de un lugar que en algún momento fue un hogar y ahora no era más que una casa vacía. Ben se dirigió hacia los cuartos en compañía de Rex, mientras que Heather y Kai se mantuvieron cuidando la entrada, en búsqueda de algo que pudiera indicar el destino de los Tennyson.
—"Ben 10"— leyó Heather, mientras tomaba una nota de la mesa —¡Oye, chica lobo!— llamó Heather, a lo que Kai acudió con rapidez, tomando esta pronto la nota
—Es de sus padres— habló al aire Kai, justo antes de empezar a leer la nota —Hay que bueno...— aseguró entre un suspiro alivio
Ben, y Rex entraron al cuarto del primero, notando que ahí también faltaban algunas cosas, siendo la más llamativa de estas aquella fotografía que de Ben y Kai que ella le había firmado a los trece años, sacando un suspiro aliviado en Ben al notar esto, sabiendo que su madre se llevaría las fotos en una situación así.
—¿Y este es tu cuarto?— pregunto Rex, a lo que Ben asintió —Mucho verde viejo, le pondría un poco más de naranja o azul, pero se ve chido...
—Si bueno, menos mal el destino te hizo héroe y no decorador de habitaciones— bromeo Ben en un intento de aliviarse
—Las fotografías no están en el pasillo ni aquí, si tuviera madre creo que se llevaría también nuestras fotografías familiares así que creo que están bien ¿O tu que opinas?— pregunto Rex, mientras veía el escritorio de Ben, notando un cesto de basura lleno de vasos de smoothies
—Están bien.— aseguró alegre Kai, llegando al cuarto —Dejaron una nota, fueron de los primeros en ser evacuados, Ben...— aquella declaración logró que Ben diera un último suspiro con todo el pendiente en su interior
—Bien, ahora solo queda ir a la base de los plomeros y esperar, la nave de Vilgax no se quedará mucho tiempo sobre Bellwood— añadió con seguridad Ben, dirigiéndose hasta una caja de zapatos bajo su cama
—¿Y que haremos?— pregunto Heather, llegando a la puerta y viendo hacia adentro mientras miraba por la misma
—La vamos a derribar— finalizó Ben, ante una segura afirmación
—Me encanta ese plan— añadió seguro Ben, abriendo la caje y mostrando un claro brillo en sus ojos al ver el contenido de la caja
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