HACE CATORCE AÑOS ATRÁS.
Alex se despertó un sábado por gritos de sus padres, estaban peleando otra vez.
Abrió la puerta de su habitación para ver y escuchar mejor.- ¡Te dije que quería un Omelette, mujer! – gritó aquel hombre alto con algo de sobrepeso por beber cerveza todos los días.
- Es que no había más huevos… y tú no hiciste las compras… - dijo con miedo.
- Ah, ¿Entonces es mí culpa?, Ese es tu trabajo mujer, no el mío – y la golpeó fuertemente, haciendo que los labios de aquella mujer sangren. – Eres una inútil, no puedes hacer ni un Omelette, pedazo de mierda – y la pateó varias veces en el estómago.
Alex cerró la puerta mientras se sentaba en el suelo y lloraba en silencio, todos los días era igual. Tan solo tenia cuatro años, y vivía con miedo de que un día su padre matara a su madre a golpes.
SEIS AÑOS DESPUÉS.
Su vida seguía igual, los días eran oscuros aunque el sol estuviera en el cielo.
Una tarde, precisamente un lunes, dónde cumplía diez años, luego de la escuela escuchó una voz en su cabeza, una voz adulta.- Alex – oyó dentro de su cabeza. - ¿Qué? ¿Quién eres? ¿Dónde estás? – y miró a su alrededor. -En tu cabeza, soy Dominik, soy tu amigo – afirmó. - ¿En serio? Yo no tengo amigos. – aclaró apenado. – Ahora me tienes a mí, estaré contigo siempre y te protegeré del mal de este mundo – dijo seguro de si mismo. - ¿Cómo harás eso? – preguntó confundido. – Tu tienes el poder de dejarme salir. – afirmó.
Luego de ese día Alex pensó mucho sobre lo que ese tal Dominik le había dicho, así que decidió hacerle caso.
Hablaba con el siempre y Dominik le decía que hacer o decir en peleas con niños o sus padres para defenderse. Con el se sentía seguro.
Una tarde su madre entró a su habitación.- Alex… - dijo mientras peinaba su cabello castaño oscuro hacía un costado y se sentaba en la cama. – Te llevaré a un psicólogo… se que la situación que estás viviendo conmigo y tu padre debe ser difícil y doloroso… así que iremos a uno, ¿Si? – y acarició su cabello negro.
Alex asintió, comenzó sesiones con un hombre llamado Harry, era un buen psicólogo y un hombre bueno.
CINCO AÑOS DESPUÉS.
A los quince años, en una de sus sesiones, Harry le dijo.
- Bueno, luego de varios años con estas sesiones fue difícil hacer un diagnóstico… descubrí que tienes trastorno múltiple de la personalidad… quiere decir que debido a situaciones traumáticas tu cerebro crea personalidades para protegerte de esos traumas y el dolor… -
- Usted no tiene idea de nada, yo soy real – afirmó con una voz más grave.
- Vaya, ¿A quien tenemos aquí? –
- Dominik – afirmó serio.
- Bien… bienvenido. – y anotó el nombre.
Aquel niño tomó un pañuelo que estaba en el escritorio y con eso sujetó una lapicera, rápidamente se la clavó en el cuello y luego colocó aquella lapicera en las manos de Harry. Suspiró y salió corriendo para llamar a su madre quién lo esperaba en la sala de espera.- ¡Mami! ¡Mami! El hombre…. ¡El hombre se mató! – gritó mientras hacía fuerza para que las lágrimas broten y así fue.
- ¡¿Qué?! – y aquella mujer fue al consultorio dónde vio al hombre con la lapicera en sus manos y el cuello abierto. Sus ojos marrones se abrieron mientras rápidamente llamaba a una ambulancia.
Descartaron el homicidio ya que no había pistas, así que dijeron que fue un suicidio.
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Aida
HorrorUna niña, llamada Aida fue secuestrada, vendieron su cuerpo para ganar dinero, sus padres biológicos la encontraron después de mucho tiempo, pero ya no sería la misma niña que conocían. Habla con Eryx, su reflejo dónde le cuenta todo. Eryx la proteg...