KAMA 🕉 SEXUAL PLEASURE. (2MIN) 🔞{EDITADA}

12.

 Minho se encontraba hablando por teléfono en su Boutique; era una conversación muy importante y delicada. La persona que estaba al otro lado de la línea era el Ministro Kim, el padre de Tetsu. Le informaba que ella estuvo en su mansión para hostigarlo.

-Mire, Ministro; yo entiendo que su hija extraña estar con su familia aquí en Corea, pero nosotros habíamos llegado a un acuerdo, y ese era que Tetsu no se acercaría más a mí, ni a la gente que me rodea; y ahora mismo, incluye a mi actual pareja, el señor Taemin Thakare. Ella se portó de una manera muy grosera y lo ofendió, diciéndole mentiras sobre una relación que no tenemos. Yo no quisiera que esto se volviese un problema nuevamente, Ministro, pero si Tetsu insiste en fastidiarme la vida; no me quedará de otra que poner una denuncia ante las autoridades.

--No, por favor. Le pido que no lo haga. Tetsu logró burlar la seguridad de sus guardaespaldas, pero yo me comprometo a que no se repita. He mandado que le pongan un rastreador en un dije que le acabamos de comprar, y no va a ser tan fácilmente que se lo quite. Además de que ella no lo sabe. Pero, por si algún motivo, mi hija regresa a importunarlo; no la enfrente y solo llámeme; enseguida habrá alguien para llevársela. Deme la oportunidad de que la podamos tener cerca de nosotros. Yo sabré agradecer su paciencia.

-No necesita agradecerme nada, Ministro; entiendo su posición como padre de Tetsu, pero no la pierdan de vista. La verdad es que yo la noté algo nerviosa, pero muy segura de que seguíamos sosteniendo una relación en la actualidad.

--Ya regresó con su psiquiatra aquí. Y no se preocupe, no se van a encontrar en la clínica; ella toma las terapias en casa.

Cuando Minho terminó la llamada, se relajó un poco; pues el Ministro Kim se había comprometido, una vez más, en ponerle un alto a su caprichosa hija.

Hoy era la cena con la familia de Key y Jonghyun. Taemin lo había invitado, pero se disculpó diciendo que no se había estado sintiendo bien, y era cierto; los medicamentos los tuvo que volver a tomar, pues su audiencia con el juez Cho era en dos semanas y le harían exámenes de orina para verificar que estaba siguiendo el tratamiento; de no ser así, lo internarían. Ese había sido el acuerdo con su abogado. Y claro está que esto no se lo dijo a Tae; pues habían quedado que ya no tomaría nada, pero, a como estaban las cosas, eso era imposible.

Antes de irse a su casa se tomó la dosis que le correspondía en ese momento; pasaron unos cinco minutos y comenzó a sentir que todo le daba vueltas; pero igual una sensación de angustia lo invadió. Se deshizo el nudo de la corbata y desabotonó su camisa de la parte del cuello, se estaba asfixiando. Se levantó de su silla y trató de alcanzar un vaso con agua, el mismo que utilizó para su medicamento. Sólo que no pudo hacerlo y este cayó al piso rompiéndose en pedazos. El ruido alertó a la única empleada que quedaba, y esa era Betty, la chica que golpeó al confundirla con Azami.

--Señor Choi, ¿Está usted bien? Toc...toc...toc... -Pero como no hubo contestación, sin más entró para ver qué sucedía. Y encontró a su jefe en el piso, quien balbuceaba palabras sin sentido, al menos para ella lo eran.

--¡AHHHH! Señor Choi, ¿Qué tiene? -Pero él no contestaba, sólo murmuraba. -Yo las maté, yo las maté. Perdóname, Tae. Perdóname, yo no quise hacerlo.

--Betty se quedó petrificada al oír decir semejante confesión, ya ni siquiera se acercó más. Tenía mucho miedo. Su instinto de conservación hizo que optara por salir rápido de ahí. --[[El Señor Choi está loco, y además es un asesino.]] [[Lo siento. Mejor voy a buscar otro trabajo. No vaya a ser que un día de estos si logre matarme como a esas personas.]]

Adentro de MEN CHOI'S las cosas se estaban poniendo muy difíciles para Minho, quien no paraba de alucinar. Sólo que ahora se encontraba sentado en cuclillas, recargado a la pared y hablando con alguien imaginario. -Azami, ¿Por qué no simplemente te vas y me dejas hacer mi vida? Ya...ya no quiero verte...me haces mucho daño. Yo no sé para qué me pediste que viniera hasta acá. ¿Qué necesitas? Ya te lo dije; no voy a hacer un trío con ustedes. Además, ella sigue casada. ¿No les da vergüenza? Cuando su esposo se entere, no creo que le vaya a gustar las cosas que ustedes hacen. Por favor, ya para; todo esto está muy mal. -Minho lloraba a mares mientras decía todas esas cosas que laceraban su alma; mismas que habían estado envenenando poco a poco su corazón. Ya no aguantaba más las porquerías que Azami quería que hicieran con su nueva pareja. Una mujer casada: Sayeko Nakamura.