Diez (p)

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Hinata no encontraba qué decir, y no porque ese momento fuera algo nuevo, sino que esas palabras lo habían congelado

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Hinata no encontraba qué decir, y no porque ese momento fuera algo nuevo, sino que esas palabras lo habían congelado.

Siempre que Atsumu buscaba de él, las palabras no eran precisamente la forma de expresarse entre ellos.

Pero, ahora entendía que la esperanza que había en el pecho del mayor ahora estaba muerta.

¿Eso era bueno o malo? No tenía idea.

Pero lo que sí sabía es que no le agradaba en lo más mínimo ver cómo su mejor amigo lloraba amargamente en sus brazos.

Lentamente tomó entre sus manos el rostro de Atsumu y acarició sus mejillas con sus pulgares.

Atsumu miró a su amigo aún con los ojos cristalizados, realmente roto hasta que sintió como los labios de Hinata acariciaban los suyos en un suave beso.

Por un momento cerró los ojos y se dejó llevar por el toque, escuchando después el susurro del mayor.

—Vamos a jugar a ser novios, pero el primero que diga te amo, perderá y se acabará todo.

Comenzó el juego.

Quisiera no amarte | AtsuHinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora