- ¿Puedo saber de dónde vienes?
___ era recibido por su abuela que parecía haber estado esperando en la puerta de casa con los brazos cruzados desde que volvió, el día había corrido y se había hecho tarde pero eso no solía ser problema para Angela, su nieto salía prácticamente cuando quería y volvía cuando se le antojaba, este comportamiento sorprendió a ___ al punto de quedarse quieto frente a ella reflexionando en lo que estaba pasando.
- Bueno ¿Vas a contestarme? - Frunció el ceño llena de impaciencia.
- A casa de mi tío... ¿Por?
- ¡Lo sabía! ¡Lo sabía! - Empezó a negar con la cabeza mientras se mordía el labio en desaprobación - ¿Puedo saber por qué harías eso?
- No lo sé, abuela ¿Te has parado a pensar que es mi familia?
Ambos comenzaron a alzar más la voz y pronto comenzaron a discutir, ahora no tan solo Dolores podía escuchar la pelea desde el exterior si no que las casas vecinas también tenían acceso a ella.
El tío Vito era un tema delicado, si se puede decir así, entre ellos dos. ____ estaba resentido con Angela desde hacía tiempo pues se pasó 5 años de su vida escondiendo la existencia de su tío y Angela se molestaba cada vez que pasaba tiempo con él.
- Si necesitas consejo tienes a todos tus primos y tías aquí ¡Los que realmente te han cuidado!
- ¡El tío Vito no estuvo en mi infancia porque TÚ no quisiste!
-¿Qué te hace pensar que él realmente hubiera estado en tu vida?
- ¿Por qué le odias tanto, abuela? ¡Es la única persona que me habla de mi madre!
-¡Toda la familia de tu madre esta loca, ___!
- ¿Incluso yo? - gritó
El silencio se hizo tenso y abrumador cuando no hubo respuesta inmediata, tras unos segundos dónde ___ buscaba la mirada de su abuela con la suya que estaba impregnada de sorpresa e incredulidad Angela le envió a su habitación.
- No salgas hasta nuevo aviso. - añadió mientras subía las escaleras.
Cuando llegó a su cuarto se encontró con el resto de fotografías rotas encima de su almohada, tiradas con maldad y destripadas en trozos pequeños, ___ ni siquiera tenía fuerzas para llorar solo se sentó en el colchón y trató de juntarlas como si fueran un puzzle, acabó durmiendo encima de ellas.
El sol salió pero Camilo llevaba despierto mucho más que la gran estrella, se movía de un lado a otro en su cuarto murmurando su confesión de amor, se saltó el desayuno y evitó a todos sus familiares en una mezcla de nervios y adrenalina.
- Camilo, tengo que decirte algo.
- ¡Ahora no, Dolores! ¡Tengo que coger las velas!
Y continuó así toda la mañana ignorando la preocupación de su hermana no fue hasta que Dolores se plantó en lo alto de la escalera y gritó:
- ¡No va a poder ser hoy!
No era habitual oír a esta Madrigal gritar por lo que todos se quedaron expectantes esperando que continuará hablando, bajo las escaleras rápido hasta llegar a su hermano que miraba a todos lados confuso.
- ____ esta castigado, Camilo, no puede salir de casa.
- ¿Qué?
- ¡Lo he oído! Tuvieron una discusión anoche ¡Angela dijo que ___ estaba loco como su madre! Bueno... no lo "dijo" pero ¡Lo dijo!
El de cabellera rizada comenzó a pensar mirando fijamente al suelo, su cabeza iba a explotar de lo rápido que iba, de golpe levantó la cabeza chasqueando los dedos y dijo "lo tengo", tomó todo lo necesario entre sus dos manos y aunque Luisa se ofreció a ayudar su primo ya había salido corriendo sin escucharla.
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La magia de nuestro enlace ( Camilo Madrigal x Lector)
FanfictionPuede que todo parezca posible cuando naces en una familia llena de gente extraordinaria pero a veces las cosas más simples pueden ser los verdaderos retos. Retomar la amistad de la persona de la que llevas enamorado desde tu infancia puede ser comp...