La magia de nuestro enlace ( Camilo Madrigal x Lector)

12.

Los Moreno por otra parte se negaban a irse sin que ___ les diera una explicación, no sabían si debían amar o matar a Camilo y Dolores tampoco había sido de ayuda, se juntaron las tias junto a los primos de edad más cercana a ___ delante de su puerta.

- Cariño ¿Nos vas a decir que ha pasado? - Luz asomó la cabeza

- ¿Tengo que matar a un Madrigal? - Uno de los primos estalló a hacer amenazas al segundo que la puerta se abrió, más bien exageradas y poco creíbles, pero su madre le acalló.

Sin preguntar ni avisar entraron a su habitación encontrándose a ___ con la cara enterrada en la almohada y moviendo los pies de arriba abajo dándole suaves patadas al colchón, una de las dos mujeres se sentó a su lado y entonces él brinco dejando a la luz su rostro sonrojado exclamando "¡Le besé!".

Los familiares se miraron confundidos, hacía unos minutos había salido corriendo disgustado por culpa de aquel joven y ahora gritaba de alegría.

- ¿Quién entiende a los jóvenes? - susurró Angela que se había quedado con sus nietas menores en la planta de abajo

___ estaba demasiado ilusionado para articular palabra, se habían desvanecido las dudas en cuestión de segundos tan solo se podía plantear en si debería correr hacía su casa o esperar a mañana.

- Pero ¿Pensé que había sido un cretino? - Preguntó su primo mayor.

- Y también el mayor amor de ___ desde que tiene memoria.

- Espera, ¿entonces sí son novios?

Cansado por los comentarios ___ echó a la gente de su cuarto empujandolos con la almohada para hacerlos retroceder hasta que pudo cerrar la puerta pero rápidamente las palabras de su primo volvieron a su mente, se habían besado pero no eran nada oficial, las dudas comenzaron a caer sobre ___ ¿Querría Camilo realmente ser pareja? ¿Fue tan solo un beso fuera de lugar?

Una cosa llevó a la otra y comenzó a pensar en el beso, no solo chocaron sus dientes en el primer intento si no que le había besado después de llorar desconsoladamente y llenar su manga de lágrimas y mocos, no había sido glamuroso ni como para tirar cohetes, no podía simplemente presentarse delante de su puerta para pedirle ser su novio debía de hacer un gran gesto y ahora estaba entrando en pánico.

- ¿Qué voy a hacer? - le preguntó a la fotografía.

Se durmió pensando en los posibles escenarios dónde podía pedirle salir a Camilo, problemática que actuaba de manera diferente en este, Camilo estaba despierto y con los ojos clavados en el techo de su cuarto, las innumerables preguntas de su familia acerca de cuándo se volverían a verse hicieron que llegará a la misma conclusión.

- Ugh ¿Por qué no aproveche el camino de vuelta para pedirselo?- pensó en voz alta

El sol había aparecido y Camilo desfilaba unas ojeras profundas hacía la mesa con el desayuno.

- ¡Camilo!- Julieta corrió en comprobar la temperatura de su sobrino- ¿Estás enfermo? Tomo, come algo.

- No, tía. Estoy bien, solo no he dormido.

-¿Y eso?

Mientras le explicaba su dilema ___ abría los ojos, en su reposo no se le había ocurrido nada, decidió bajar a pedir consejo a su abuela pero se encontró con la casa vacía a excepción de una nota.

"Querido, la señora Sánchez me ha pedido que vaya a buscar unas prendas que necesitan un arreglo, si necesitas cualquier cosa volveré por la tarde. Hay comida en la cocina por si tienes hambre y ya sabes dónde esta el dinero."

Suspiró arrugando el papel, tendría que arreglárselas solo esta vez.