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Gritos.

Gente intentando apartarme de él.

—¡Cassian!— «no, no lo llames a él. Yo estoy aquí para protegerte»

Más gritos.

—¡Ethan, detente ahora!— «no me órdenes qué hacer»—¡ETHAN!— Mi cuerpo se detiene al instante al escuchar su voz.

Ha utilizado "la voz". Los Alfas tienen la voz de mando, un tono de voz lo suficientemente potente para hacer que otros hagan lo que dice, pero hay una gran diferencia entre la mía y la de él, como siempre siendo mejor yo. La de los Alfas recesivos no tiene gran poder como el de los Alfas dominantes, la voz de los dominantes es incluso capaz de doblegar a otros Alfas e incluso Betas.

levantate ahora— mi cuerpo obedeció como si él fuera dueño de mi cuerpo— lárgate a la casa y espérame en mi habitación.

«no tienes derecho a mandarme, no tengo porqué hacerte caso»

Pero mi cuerpo una vez más le hizo caso, me di la vuelta si poder impedirlo y empecé a caminar a la salida, cuando estaba a mitad del camino mi cuerpo reaccionó y volví a tener control de él.

«no sirve de nada regresar, mejor  voy a la casa, al final de cuentas mamá y papá no están»

Cuando llegué a la casa subí a mi habitación y me tiré directo en mi cama.

«por dios ¿Qué hiciste Ethan»

Me preguntó mi lado racional.

«él no era digno de Dante, hizo lo correcto»

¿Hice lo correcto?

«claramente no»

Mis párpados empezaron a pesar y poco a poco fui cayendo en un sueño profundo.

°•°•°

Pisadas.

Alguien se está acercando.

El estruendo producido por mi puerta siendo abierta de golpe me hizo despertarme y hacerme saltar de mi cama al suelo.

Levanté la mirada y Cassian cerraba detrás de si la puerta de mi recamara.

—te dije esperaras en mi habitación.

—no tengo que seguir tus órdenes.

Su entrecejo de por sí fruncido se arrugó más y sus ojos destellaban rabia y enojo.

—¿Qué mierda pretendías al golpear a la pareja de Dante?

—ese idiota no puede estar con Dante.

—¿Ah sí? ¿Por qué mierda no?

—era un Alfa recesivo.

—¡Él lo escogió!

—¡Dante no sabe lo que quiere!

—¡No puedes mandar en la vida de Dante, no puedes cuidarlo para siempre Ethan!

—¡Si está con un recesivo probablemente arruine la familia con otro recesivo!

—¡Nadie asegura que entre uno recesivo y un dominante haya más probabilidad de dar a luz a un recesivo, mira a nuestros padres, dos dominantes y aún así dieron a luz a un recesivo!

Cayó en cuenta de sus palabras, hubo un silencio pero no se disculpó, de hecho se acercó más a mi hasta que dar cara a cara.

—ya sé que soy la vergüenza de la familia, sé muy bien que el solo hecho de haber nacido siendo un recesivo es el motivo más válido para ser inferior a ti— golpee su pecho con mi dedo, mis ojos picaban e intentaba no dejar caer las lágrimas que amenazaban por salir— sé que a los ojos de nuestros padres eres mejor que yo.

—Ethan...

—siempre fuiste mejor que yo.

—Ethan...— su voz era de advertencia, se empezaba a enojar, pero no me importó.

—¿No te basta con dejarme solo toda mi vida? ¿Con hacer que me humillen? No importa qué haga, o diga, tu siempre serás mejor que...

Sentí un intenso ardor en mi pómulo y mi cuerpo cayó al suelo, me había golpeado.

—deja de ser tan patético por al menos una vez en tu vida.

Me miró desde de arriba con superioridad.

—sigues siendo el mismo imbécil que antes— le dije con rabia.

Con su aura amenazante se acercó y se puso de cuclillas para estar a mi altura, tomó mi mentón con fuerza y acercó nuestros rostros hasta estar a unos centímetros. Por inercia solté un gruñido pero fue apagado por uno más potente.

Sentí incluso a mi lobo meter la cola entre las patas. Tenía razón, soy patético, incluso como Alfa.

—¿Sabes qué? Lo sé, soy una mierda de persona, y seguiré haciendo tu vida miserable— soltó de golpe mi mentón haciendo que mi cabeza se golpeara con el suelo— iré a una fiesta, no tengo ganas de seguir viendo tu cara.

Y sin más salió de mi habitación cerrando la puerta con fuerza para un poco después escuchar la puerta de la entrada hacer lo mismo.

Era de madrugada, era lo único que sabía, escuchaba pasos pesados por la casa, Cassian había llegado y al parecer, borracho. No le di importancia pues no quería ni verle la cara a ese idiota y sentir su aroma apestando todo era aún más molesto, por lo que me cubrí con mi cobija.

Me pareció tener un deja vu cuando los pasos se empezaron a acercar a mi habitación y la puerta se abrió de golpe, me incorporé en la cama de un salto y solo pude ver su silueta entrar a tropezones.

Mientras intentaba mantener el equilibrio yo me le quedé mirando, decidí pararme e intentar acercarme a él con cautela, su cuerpo se dejó de mover y de la nada levantó la cabeza y sus ojos conectaron con los míos. Sus ojos estaban rojos escarlata, era su lobo quién tenía el control en ese momento.

Se acercó veloz y quedó a centímetros de mi.

Nos quedamos así por un tiempo, en medio de la oscuridad y con un silencio sepulcral en dónde solo se escuchaban nuestras respiraciones, el olor a alcohol me llegaba con fuerza.

—Cassian, ¿Qué...?— fui interrumpido.

Sus labios chocaron contra los míos haciéndome callar de golpe. Intenté apartarlo pero sus dos manos se pusieron a los lados de mi cara impidiendo separarme.

—¡No!— pero no se separó, sino que aprovechó que abrí la boca y metió su lengua en mi cavidad bucal, se paseaba deseosa por mi boca, soltando unos gemidos de placer.

Se separó mordiendo y jalando mi labio inferior entre sus dientes y cuando pensaba que se iría al verlo dirigirse a la puerta hizo algo que me puso aún más asustado de lo que ya estaba.

Janneth.

Brothers Love (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora