Brothers Love (Omegaverse)

20

En la mesa todos se encontraban callados, el único ruido eran los cubiertos chocando con los platos y el ambiente se sentía pesado. Desde esa vez que Dante y Cassian pelearon en la cafetería han tenido actitudes demasiado hostiles entre ellos.

Así mismo mi hermano menor evitaba cualquier tipo de acercamiento de Cassian y yo. El Alfa mayor estaba en frente de mi, podía sentir su mirada. A veces por pura curiosidad lo miraba y nuestros ojos se conectaban.

—niños— habló mi madre, bajando sus cubiertos y mirándonos desde su asiento que encabezaba la mesa— su padre y yo tendremos que salir hoy, solo por esta noche les pido que se comporten, no hemos querido salir en mucho tiempo pero en la fábrica al otro lado de la ciudad ha ocurrido algo bastante grave y tenemos que encargarnos.

—¿Tienen que ir los dos?— hablé yo.

—si, tenemos que ir ambos, porque por más que yo sea la autoridad directa su padre también es importante como autoridad al ser mi pareja.

—madre, ¿no podría ir alguien más en lugar de nuestro padre?— está vez fue Dante quién preguntó.

—tienen razón cariño, podría ir Cassian, él debe ya estar involucrado con la empresa para cuando pase a ser de él.

—tal vez, pero este asunto solo nos requiere a nosotros, Cassian irá para otro momento.

No se dijo nada más, no quería que se vayan, me sentía inseguro y juro que apenas ellos pasen esa puerta yo me iría a los departamentos de mi universidad, aún si ya era bastante tarde.
Terminaron de comer mis padres de primero y después se levantó Dante, poco después fui yo a la cocina a dejar mi plato pero ví que mis padres al tener prisa no lavaron los suyos por lo que me dispuse a hacerlo yo.

Ya estaba casi terminando cuando escuché que alguien había entrado. No dije nada y seguí con lo mío.

—podemos... ¿Podemos hablar?

Me detuve al escuchar su voz.

—no hay nada de lo que debamos hablar— retomé lo que estaba haciendo.

—yo quería pedirte perdón...

—si ya lo sé, siempre escucho tus disculpas y aún así siempre vuelves a hacerlo de nuevo, probablemente puedes estarme diciendo "perdon" en estos momentos pero apenas nuestros padres pongan un pie afuera de la casa vas a aprovechar y... — suspiré con frustración— igual no importa, cuando nuestro padres se vayan yo también me iré.

—¿Qué? ¿A dónde irás?

—eso a ti no te importa, sé que frustra tus planes pero me importa una mierda, prefiero dormir en la calle que dormir bajo el mismo techo que tú.

Sacudí mis manos y las seque con un trapo, pase por su lado sin mirarlo. Pero una mano en mi antebrazo me detuvo.

—por favor, perdóname. Yo de verdad quiero explicártelo, quiero ganarme tu confianza.

—ese es el problema, Cassian, y es que tú nunca has tenido mi confianza porque desde niños me has hecho la vida imposible, ¿Por qué intentar explicarme después de hacerlo? ¿Por qué no antes para que al menos se pueda justificar? Y lo gracioso es que "esto" no se puede justificar. Yo moriré odiandote, Cassian.

Me solté y salí de la cocina.

Cómo dije, cuando oí el auto de mi madre alejarse tomé solo una chaqueta y me la puse, la lluvia aún seguía y por lo visto, duraría toda la noche. Aún así salí y empecé a caminar bajo la lluvia importandome poco lo helada que estaba.

Las calles ya estaban casi desérticas y solo pasaba uno que otro carro. En mi camino me topé con una avenida que tenía que cruzar por un puente, al estar ya arriba de este me quedé observando la orilla.

[Narrador omnisciente]

El Omega se había encerrado en su habitación a penas había terminado su cena, ya que no le apetecía convivir con su hermano mayor Alfa, no al menos después de aquella pelea de la que no recuerda nada, y seguramente el contrario tampoco lo hacía.

A pesar de no querer estar abajo con ellos, se mantenía pendiente por si escuchaba algo, no le gustaba dejar a Ethan solo por mucho tiempo con Cassian.
Y eso fue exactamente lo que le preocupó, la falta de algún ruido.

Los conocía muy bien, Ethan odiaba a Cassian, y Cassian odiaba ver a Ethan tranquilo. Siempre estaban insultandose o peleando si podían. Por eso cuando no escuchó nada le resultó raro pero aún así esperó un poco más.

Pasado una media hora bajó encontrándose a Cassian en la sala de estar.

—te ves preocupado— le dijo el Alfa, quiso ignorarlo pero no veía a Ethan por ningún lado y estaba empezando a preocuparse de verdad— ¿se te perdió algo? —volvio a decir.

—callate mierda.

—tranquilo, solo estaba haciendo una pregunta. No es necesario que saques las garras— tuvo en respuesta un gruñido.

—¿Dónde está?

—¿Dónde está qué?

—¿Dónde carajos está Ethan?

—tambien quisiera saberlo, pero solo tomó su chaqueta y salió.

—¡¿Qué? Está lloviendo a cántaros, ¿Por qué mierda no lo detuviste?!

—no soy niñera de nadie, él decide a dónde carajos irse a morir— las palabras frías del Alfa lo descolocaron, ¿Cómo podía hablar como si nada de algo así?

Y es que el Alfa podía decirlas más no sentirlas, en el fondo el Alfa estaba que se lo llevaba el carajo por la preocupación, su lobo quería salir y desgarrar todo lo que encontrara a su paso. Y lo único que mostraba era una calma y una cara neutra.

—eres un imbécil de mierda.

Y su hermano menor tenía toda la maldita razón.

[POV. Ethan]

Miraba hacia abajo sin hacer nada, solo mirar lo que podría ser la manera de encontrarme de nuevo con él. Perdí la noción del tiempo, no supe que hora era hasta que mi celular empezó a vibrar en mi bolsillo.

Era un milagro que siga encendido, pensé que ya estaría muerto por a verse mojado. Dejé que sonara unos minutos hasta que me harté de la insistencia.

—¿Si?

—¡¿Ethan, dónde carajos estás?!— sonó la voz de mi hermano Omega por los altavoces del aparato.

—yo... — miré a mi al rededor. ¿Dónde estaba?— estoy arriba de un puente, abajo de una avenida.

—¡¿Qué?! ¡Mierda Ethan, está lloviendo demasiado fuerte! Pásame tu ubicación iré por tí.

—esta bien.

Colgué y volví a mirar a la nada. Hoy no es un bello día.

Janneth.