18. Marck

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- ¡Me has dicho te que callara! - 

- Ya. Ya lo sé, pero no así - 

- ¿Que esperabas? - 

- ¡Que me tiraras un cojín no que me besaras! -

- ¿No te ha gustado?- dije mientras me levantaba - supongo que tendré que repetir - noté que en mi rostro surcaba una sonrisa picarona.

- Para - me puso un dedo en el pecho para que no pudiera seguir avanzando - no hace gracia, no me puedes besarme cuando a ti te plazca, además llevas una semana evitándome y hoy te veo y te estabas besando con otra -

-¿Por qué no dejas de sacar el tema? - dije poniendo los ojos en blanco.

- Porque si, quiero que hablemos. -

- ¿Y de que quieres hablar? - sabía perfectamente a lo que se refería pero me gustaba enfadarla.

- ¡¿Estas de coña?! - casi lo grito - ¡Quiero saber el motivo porque has estado siete días sin hablarme!-

- La verdad no tengo ningún motivo no quería verte y punto. -

- Eres increíble, llevas siete días sin querer verme y ahora me besas  - y explotó - No puedes estar evitando los problemas constantemente, eres un cobarde de mierda, nunca te enfrentas a nada, seguro que cuando hay un problema en tu vida desapareces, eres incapaz de quedarte y aceptar las consecuencias de hablarlo y entenderlo - tenía un nudo en la garganta, porque decía la verdad, no me gustaba afrontar los problemas siempre era más fácil alejarse de ellos, como había hecho con el divorcio de mis padres - y por lo que me han contando, estos días has estado yéndote de bar en bar a emborracharte y follando con la primera que se plante delante tuyo -

- ¿Que sabrás tú?, no me conoces ni un pelo -

- Intento conocerte, pero eres más difícil de lo que crees si no me dejas -

- ¿Que te importa lo que yo haga con mi vida? ¿Acaso estás celosa?- eso último lo dije con indiferencia creyéndome mejor que ella, cosa que no era verdad.

Se río secamente.

- ¿De verdad crees que estoy celosa?, en lo único que piensas es en tu ombligo o como va la cosa. Me importas Marck y ni siquiera sé por qué si me tratas como la mierda -

- Eso no es verdad y lo sabes -

- Lo que tú digas  - 

- Me importas - dije retomando la conversación - y no estoy seguro de por qué - la verdad sí, porque me gustaba, me gustaba con locura la conocía de hace poco sí, ¿y qué? Me encantaba picarla, que me llamara idiota y todo lo relacionado con ella, nunca lo admitiría en voz alta o aún no - Si no me importases te hubiera follado el día de la fiesta pero después vi que eras la hermanita de Tay y doy gracias por no haberlo hecho - dije muy brusco sin pensar en las consecuencias.

- Te odio - y vi como le caía una lágrima por la mejilla quería acercarme a ella y secársela con besos, pero sabía perfectamente que después de esto me mandaría a la mierda y sabía perfectamente que me había comportado como un imbécil evitándola toda la semana.

Me límite a cerrar los ojos cuando oí el portazo de su puerta.

Genial Marck has conseguido que se enfade contigo.

Era la primera vez que me pasaba me refiero a que me gustase alguien, porque sí, me gustaba.

Me quedé pensando qué hacer o qué decir para que Lexy me perdonara, lo primero sería quedar con Melany y decirle que no quería seguir viéndola.

Así que eso hice le mandé un mensaje que decía que quería verla en una hora.

- Hey - me saludó Tay que acababa de entrar.

Le saludé de vuelta con un movimiento de cabeza y estuvimos hablando un rato, pero lo noté raro, estaba apagado no era el de siempre y tuve que preguntarle.

-¿Estás bien? Te veo raro -

- He discutido con Soph -

- No es la primera vez, mañana estaréis bien -

- No, esta vez ha sido peor, ha sido una pelea de las gordas, nos hemos gritado de todo y a acabado llorando - me quedé en silencio sin saber que decir, para estas cosas era pésimo.

-¿Quieres hablar de como te sientes o de que ha sido la pelea? -

- Nunca lo entenderías -

- Prueba, nunca se sabe -

- Marck enserio, no estoy de humor, además tu nunca has tenido una relación que dure más de diez días -

- ¿Y? se me dan bien las chicas y además si la vas a tomar conmigo mejor me voy - hice un adamen de levantarme pero su voz hizo que me quedara en mi sitio.

- Espera - dijo mientras se pasaba una mano por el pelo - yo no sé hablar de esto y menos contigo, la pelea a empezado por un gilipollez.

Cuando acabó de contarme la pelea - que por cierto escuché con atención - le dije que me tenía que ir.

-¿Dónde está Lexy?- Me preguntó.

- En su habitación -

Me despedí de Tay y le dije que le vería dentro de un rato y salí de casa.

***

-Hola Marck - dijo Mellany cuando entré en su casa- ¿Por qué querías verme? -

- Mira no me voy a andar con rodeos. No quiero seguir con el rollo este que tenemos - 

- Emm pues está bien - 

¿Qué?, la verdad no esperaba esa respuesta, pensaba que insistiría aunque sea un poco.

Mellany y yo éramos amigos desde pequeños y nos conocíamos muy bien y cuando se me tiró encima iba muy mal, a la mañana siguiente me arrepentí porque no quería joder la amistad con ella.

Aunque seguí con eso hasta hoy.

Pues Tay va a tener razón mis ligues no duran ni diez días.

- Bueno supongo que nos vemos - pasé por su lado y le di un beso en la mejilla.

- Oye... sabes que si necesitas cualquier cosa estoy aquí y que seguimos siendo amigos -

- Lo tendré en cuenta -

Pues la verdad había sido más fácil de lo que esperaba.

Ahora tocaba que Lexy me perdonara y para eso tenía un plan.

Este cap a sido un poco más corto que el anterior pero no se me ocurrían ideas espero que os guste y pronto tendréis otro.

Y también quería decir que estoy trabajando en otra historia <3

Nos vemos pronto.

¿Por qué tenías que ser tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora