12

5.3K 747 162
                                        

Roces y despedidas

Los siguientes días a lo que pasó, son extraños para los dos. Al parecer, ambos somos más conscientes de la cercanía que tenemos, ya sea física o no. Cada vez que nuestras pieles rozan, damos un brinco, sorprendidos.

También, cada vez que Paimon nos deja solos, el aire se hace tenso; nos miramos simplemente esperando algo, pienso. Tal vez si fuera lo suficientemente valiente, yo...

Reacciona, Xiao.

Me encuentro a mí mismo pensando cosas extrañas más seguido. Me reprendo antes de levantarme, llamando la atención del rubio y la cosa voladora; me estiro y comienzo a caminar.

— ¿Eh? ¿A dónde va, Adeptus Xiao? — la cosa voladora me grita cuando ya he dado algunos pasos.

— Debo partir.

En parte es cierto, en parte no. Llevo algunos días de descanso de mi trabajo como Adeptus; pienso que debería revisar cómo están las cosas el Liyue, no quiero que pase nada malo.

Cuando estoy a punto de usar mi poder elemental, una mano toca mi espalda, poniéndome en guardia instantáneamente. Doy media vuelta y apunto con mi lanza, aunque rápidamente la alejo.

— Viaj- ack... Aether — él sonríe suavemente.

— Gracias por usar mi nombre — murmura — ¿debes irte? Tienes que volver a liyue, ¿no es así? — su voz es baja y suave.

— Aún si me he tomado un descanso, tengo responsabilidades que cumplir en liyue. — respondo simplemente.

El rubio asiente, como entendiendo y luego levanta su cabeza un poco.

— ¿Vas a volver?

— Tú también tienes cosas que hacer aquí.

— Sí... — suspira — entonces déjame darte un recuerdo antes de que te vayas.

Acepto su regalo, tal vez así no sienta el vacío que sentí antes. Me mantengo de pie frente a él, cuando comienza a acercarse, caigo en qué tipo de regalo podría darme.

El rubio pone sus manos en mis mejillas y tira un poco de mí hasta que nuestros rostros están realmente cerca, puedo sentir su respiración sobre mi piel. Me estremezco y, sin decir nada, él une nuestros labios.

No sé cuánto tiempo nos quedamos así, tal vez son segundos, o minutos, realmente no estoy seguro; lo que sí sé, es que cuando intenta dar un paso atrás, mi cuerpo se mueve sin permiso, apresando el suyo contra mí. Escondo mi rostro en su hombro y siento sus manos en mi espalda.

— Xiao...

— Si deseas verme, luego de que me vaya. Si... si llegas a necesitarme, solo llama mi nombre y yo vendré por ti.

— Gracias, Xiao.

Save me  ♡ XiaoAetherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora