Amor joven

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-          ¡Es que no puede ser posible!

-          Dean...

-          ¡De verdad, Castiel! ¡Ese muchacho me va a escuchar!

-          Dean

-          ¡Y tú ni me hables, Sam! Estoy seguro que tu sabias de todo esto, ¡pero como siempre solapando a tu cachorrito, pero déjame decirte que de esta no se salva!

-          ¡Dean!

- ¡¿Qué quieren?! -Gritó el omega más que furioso, pero dio un ligero respingo cuando su alfa lo hizo frenar a la fuerza y su hermano le señalo el semáforo que estaba en rojo, el cual había ignorado por estar muy ocupado peleando- Ah, eso.

-          No es sólo eso, Dean -Dijo Castiel, aprovechando que su esposo lo había dejado terminar una oración completa- Es sobre Jack.

-          Oh, claro que es sobre Jack, sólo deja que lo encuentre y verá...

-          Dean -Esta vez fue Sam el que hablo, callando a su hermano y ganándose por primera vez su atención en todo ese rato- No hablamos sobre eso...

-          ¿Entonces que podría ser? -Preguntó confundido y sin paciencia el omega.

Sam y Castiel compartieron una mirada significativa antes de que el peli negro volteara a ver a su omega.

-          A Jack parece que de verdad le gusta Peter...

Entonces, los ojos de Dean se abrieron al máximo.

-          Oh, no. Oh, no. No me digas que tú también lo sabías y no me dijiste nada, Castiel ¡Ahora todo el mundo lo sabía menos yo! -Gritó irónico el omega, golpeando levemente el volante, sin importarle que el semáforo ya había cambiado a verde- Genial, perfecto, simplemente asombroso.

-          Dean -Volvió a decir el alfa con toda la paciencia que sólo él podía tener y viendo a su esposo sin inmutarse- Yo no lo sé porque Jack me lo dijera.

-          ¿Entonces?

-          Se notaba -Dijo el alfa, ahora ganándose la mirada curiosa del rubio- Desde hace bastante tiempo Jack se notaba extraño, diferente, pero para bien... Creí que era porque le estaba yendo bien en la escuela, pero...

-          Era Peter -Dijo Sam, metiéndose a la conversación y abogando por su hijo- Siempre fue Peter.

Dean volteó a ver a su hermano y su esposo sin entender realmente nada, antes de empezar a negar con la cabeza.

-          No, no, no me van a hacer esto -Dijo señalando a los otros dos, empezando a manejar de nuevo- No me van a dejar como el villano del cuento ¡Saben perfectamente que los Stark son peligrosos!

-          Dean -Llamó por milésima vez a su esposo Castiel, ahora con una pequeña sonrisa, tal vez resignada, tal vez contento por su hijo- Tú sabes que Jack lo va a hacer con o sin tu permiso.

Dean no pudo negar nada ante eso, ahora viendo por el parabrisas sin realmente saber que decir.

-          Es muy pequeño para esto, Castiel... -Susurro el omega con pesar, pasando una de sus manos por su rostro, sin saber ahora donde encontrar a su cachorro, sólo siguiendo el camino donde se suponía debía encontrar una vieja cafetería- No quiero que salga herido.

-          Tú sabes que no podemos protegerlo de eso, Dean -Dijo Castiel con una sonrisa compresiva mientras volteaba a ver su omega, sólo como ellos dos podían hacerlo, y Dean, Dean ya no pudo objetar nada contra eso.

You belong with meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora