Saturday In The Morning (Jikook)[Adap.]

❥Capítulo O7.

—Extrañé tocarte toda esta semana cariño— murmúro besando con rudeza los abultados labios del menor, lo cuáles se encontraban hinchados por la reciente sesión de besos que tuvieron.

—Usted y yo sabemos que se divirtió tocando otros cuerpos que no fuera el mío. Así que no me venga con cursilerías Park.

Se sorprendió por la actitud que mostró su menor y sonrió.

Ya debería estar acostumbrado a esto. Aquel degenerado sujeto siempre lo sorprendía de una u otra forma.

Se levantó del sofá cuándo vió el desnudo cuerpo del menor pasearse sin pena por toda la sala en busca de su móvil.

Llegó por atrás y le dió una fuerte nalgada causando que sus glúteos reboten mientras la marca roja de su mano aparecía en ellos.

—¿A caso quieres otra ronda?— preguntó dándose la vuelta observando la risa burlona del mayor.

—Contigo nunca estoy satisfecho, siempre quiero más y más Jungkook; ya deberías de saberlo.

—Tienes razón, pero aún no me acostumbro a hacerlo más de cinco veces en cuatro horas Jimin.

—Si lo ves de esa forma entonces nos quedan dos rondas más— habló tomándolo de la cadera pegando su gran erección a la pelvis del menor.

Se acercó nuevamente a sus labios chupando sus gruesos belfos escuchando el chasquido de estos en segundos.

Jungkook dejó caer su móvil al suelo y cruzó sus brazos por el torso de Jimin.

Este fué deslizando sus escurridizas manos por su espalda baja deteniéndose a dejar pequeñas caricias en esa zona mientras le seguía devorando la boca.

—Mhm— gimió cuándo sintió su trasero ser apretujado ricamente.
Gustoso de acariciar tremendo trasero lo tomó de la cintura e hizo que enrollara las piernas en su cintura.

Lo cargó hasta la cocina mientras besaba sus labios, introduciendo su hábil lengua en el proceso causando un gemido satisfactorio de Jungkook.

—Te haré mío otra vez, no importa cuánta veces lo haga, siempre serás mío.

El castaño sonrió mientras bajaba de los brazos de Park y acariciaba la erección de este mirándolo a los ojos. No podía creer que tenía a ese hombre prácticamente bajo sus pies.

—No te confundas cuñado, esto es sólo para pasar el rato; cuándo me aburra de tí no dudaré en dejarte.

—¿Enserio me dices esto cuándo estamos apunto de follar?— Jungkook rió en voz alta echando su cabeza hacia atras recargandose en la barra de la cocina.

—Tu fuiste el que comenzó con esto.

Relamió sus labios cuándo Jimin le dió vuelta bruscamente quedando su pecho pegado a la barra de la cocina y su trasero expuesto a un hambriento rubio.

—¡Ah!— gritó cuándo sintió un ardor en sus glúteos, resultado del fuerte azote que acababa de recibir.

El mayor tomó su virilidad y la masturbó rápidamente, la alineó en la húmeda entrada del menor y entró de una sóla estocada.

—¡Jimin!— gimió abriendo su boca y cerrando los ojos, con sus manos sosteniéndose fuertemente de la barra.

—Agh— gruñó tomando las caderas ajenas ejerciendo un agarre fuerte en ellas.

Sacó nuevamente su pene y volvió a meterlo con fuerza.

—M-me estás tor-torturando.

Sonrió mientras que repetía aquella acción constantemente frustrado a un exitado Jungkook.

—¡Joder Park! Métemela de una maldita vez y no la saques.

El rubio se permitió reír en voz alta proporcionandole varios azotes al redondo trasero de su menor.
Empujó sus caderas y comenzó con sus estocadas; sintió su virilidad ser deliciosamente apretada por las paredes anales de su amante.

Cerró sus ojos y aceleró los movimientos de su pelvis escuchando los jadeos y gemidos de fondo.

—Oh Park...¡Si si si!— llevó una de sus manos a sus propios pezones comenzando a estimularlos.

Su cuerpo era sacudido constantemente por las embestidas que estaba recibiendo.
De sus labios salían ligeros caminos de saliva, entrecerró sus ojos y abrió su boca para gemir, sin embargo de estos no salió ningún sonido.

Jimin se inclinó hacia adelante besando su espalda y gruñendo en su oido logrando que su exitación aumentará.

Sintió la virilidad del mayor tocar esa zona que tanto lo volvía loco, que lo hacia jadear, gemir y gritar.
Joder, si su hermana supiera lo que hace con su novio jamás se lo perdonaría.

Pero ya no le importaba, Irene fué la primera en traicionarlo y tenía que cobrar venganza.

Sólo esperaba que no se acostumbrara al mayor.

Aunque últimamente lo estaba poniendo en duda, ver al mayor lo sábados en la mañana se volvió parte de su rutina.

—¡Ahí ahí ahí!— sus propios gemidos lo regresaron a la realidad.

Sonrió dejando de estimular sus pezones para llevar uno de sus dedos a su boca y lamerlos, dejándose llevar por la lujuria que ambos cuerpos desprendían.

—¡Uh uh! ¡Vamos si,si,si!.

Jimin tensó su quijada y aceleró sus movimientos de adelante hacia atrás.

El sudor corría por su rostro mientras regrasaba su cuerpo para mirar cómo las nalgas del menor chocaban con su pelvis mientras temblaban en el proceso.

—Fa-falta poco Park, ¡Ah ah ah si! ¡Dame más más más!

Jungkook apretó sus paredes anales para que su mayor se corriera junto a él, sintió cómo el pene ajeno palpitaba en su interior.

Bajó una de sus manos para comenzar a masturbar su pene el cuál goteaba pre-semen.

El rubio tomó de sus cabellos y jaló de ellos echando su cabeza para atrás.

Las lágrimas hicieron acto de presencia deslizandose con delicadeza por sus coloradas mejillas. Park comenzó a gruñir constantemente mientras sus embestidas aumentaban a un ritmo bestial que hacían delirar al castaño. El choque de pieles, con los jadeos, gemidos y gruñidos invadían todo el departamento.

—¡Jimin!— gritó el menor cuándo llegó al éxtasis escuchando el fuerte gruñido de Jimin detrás suyo, cuándo sintió el espeso líquido en su interior y escurrir por sus gruesas piernas.

Se quedaron unos minutos allí tratando de regular su respiración mientras sus cuerpos temblaban por los espasmos del orgasmo.
Sin salir de él, se inclinó y besó nuevamente su espalda escuchando la débil sonrisa de Jungkook.

—Tomemos una ducha— murmuro en su oído dandole una pequeña nalgada.

El menor asintió y entonces salió de él; lo cargó y se dirigieron a la ducha. Posiblemente a continuar con su última ronda.

Beren144