Cap 10: Protegerte

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¿Los habrán escuchado?

Esa fue la pregunta que más les aterraba descubrir.

Izuku estaba tratando de calmar al rubio quien temblaba de tan solo pensar que habían entrado para ponerles fin a sus vidas.

--Quédate aquí, yo voy a ver -Decía el pecoso vistiéndose mientras le alcanzaba la ropa al cenizo quien la recibía con un miedo que trataba de esconder, pero Izuku lo conocía y ya sabía lo que le pasaba a su niño- Hey, no te preocupes cariño, todo va a estar bien ¿ok?

Katsuki solo podía ver como el chico que tanto ama estaba listo para salir de ese cuarto y quién sabe si lo volvería a ver.

--Yo también voy -decía mientras terminaba de vestirse.

--No, tu quédate, no quiero que te pase nada malo. -dijo susurrando.

--Esta es mi puta casa y no voy a dejar que vayas solo -Dijo decidido a ir, la cosa que más le aterraba era ya no volverlo a ver justo ahora que tenía la oportunidad de ser feliz- Te guste o no iré.

Con el corazón en la mano ambos chicos salieron, aunque claro, Deku iba primero pues quería proteger a su novio.

--Deku, tú ve a la sala yo revisaré aquí. -Dijo señalando la cocina pues era uno de los lugares más cercanos a la entrada.

El pecoso lo dudó un rato, pero luego asintió.

--Suerte Deku -lo bueno es que desde la cocina se podía apreciar gran parte de la sala así que estaría viendo al pecoso, pero un ruido se escuchó justamente de la sala y al llegar vio a su novio inconsciente en el piso y a su madre jalándolo del polo para que le diga que carajos hace en la casa de su bebé...
Espera, ¡Su madre!

--¡¿Qué diablos pasa contigo, vieja loca?!

--¡Hah! ¡Claramente estoy sacando a una maldita rata de tu casa, debes de ser más precavido si quieres que no te roben!

--¡Él no es un ladrón y no entra a la casa de los demás sabe Dios como!

--¡Pues a mí no me da buena espina este muchacho! -Dijo tironeando al pecoso.

Katsuki no quería pelear con su progenitora mientras Deku estaba medio muerto en el piso.

--Podemos hablarlo con más calma, vieja. Tengo que curar a... mi amigo, no quiero que mi casa sea el centro de un asesinato.

Mitsuki soltó sin delicadeza al pecoso causando que se golpeé con fuerza contra el suelo, Katsuki palideció al ver esto y le dio una mirada asesina a su madre antes de ir a ver a su chico.

--Oi Deku, levántate, tengo que curarte.
NO TE QUEDES AHÍ PARADA Y ALCÁNZAME EL PUTO BOTIQUÍN.

--ME VAS BAJANDO LA VOZ MOCOSO.

Una vez curo la herida que tenía su novio en la cabeza puso un ligero vendaje para evitar accidentes futuros.

--Deku, ¿Puedes escucharme?

--Kacchan, porque veo doble. -Katsuki rodó los ojos ante tal comentario.

--Es mi madre imbécil.

--¡¿Madre?!

--Desgraciadamente lo es... Auch, ¡Oye, qué mierda te pasa!

--Respétame mocoso malcriado.

--B-Buenas tardes señora Bakugo, es un placer conocerla. -Dijo mientras se paraba pues aún estaba en el piso.

--Un placer mi culo, ella casi te mata idiota.

--¡Cállate Katsuki! -otro golpe y un jalón de orejas fue lo que el rubio menor recibió- Disculpa la actitud de mi hijo, se cayó al nacer. -le dio una mirada a su hijo quien estaba que se quejaba, pero noto algo raro su cuello- Ah y como decías que te llamabas.

Entre Cuatro ParedesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora