Mar de Agua Verde

¿Dónde está Alessia?

Al día siguiente me desperté muy contenta, Alessia me hizo de desayunar y cuando estuve lista me llevó al colegio, comenzaba a llevarme bien con mis compañeros y me sentía más cómoda, además no podía evitar sentirme positiva ese día, recordaba una y otra vez las palabras de Alessia la noche anterior "eres lo más bonito que me ha pasado" y mi corazón se iluminaba, me sentía protegida y querida por ella y eso era todo lo que necesitaba.

Saliendo de la escuela me fui a caminando como de costumbre a casa, iba distraída pensando en todas las tareas que tenía que hacer, quería terminar todo a tiempo para poder pasar la tarde con Alessia quería convencerla de salir a algún lugar o quizás podríamos ver una película juntas en su cama, tenía muchas ganas de abrazarla y sentir la calidez de su piel, quería pasarla bien ese día.

Cada día mis clases aumentaban el nivel de dificultad, pero aún así me esforzaba en sacar buenas notas y hacer todas mis tareas, por primera vez en mucho tiempo quería que me fuera bien en el colegio, me había propuesto ser la mejor de la clase porque quería que mi tía se sintiera orgullosa de mi, además estaba agradecida por todo lo que hacía por mi y esta era la forma en que podía demostrárselo, también había empezado a ayudar más con las tareas del hogar y tenía muchas ganas de aprender a cocinar. Sentía que cada día mi vida tenía más sentido y que vivir valía la pena. 

-¡Ya llegué!- Grité en cuanto entré a la casa al mismo tiempo que cerraba la puerta, aventé mi mochila al sillón como solía hacerlo diariamente y me dirigí a la cocina. Había pasta recién hecha en la estufa, Alessia había hecho el primer platillo que comí cuando llegué a Florencia "Panzanella", podía recordar con bastante claridad aquel día. Tomé un plato y me serví; mientras comía me puse a ver videos en Youtube y cuando terminé me subí a buscar a Alessia, recorrí toda la casa pero no estaba, por un momento pensé que quizás había ido a trabajar pero empecé a dudar cuando me di cuenta y recordé que cuando llegué la pasta estaba todavía caliente y su camioneta estaba estacionada afuera. Quise mantener la calma y no pensar en qué algo le había pasado, quizás habían pasado por ella para ir al Hospital o quizás salió a la tienda caminando y en cualquier momento llegaría. Decidí comenzar con mi tarea para mantener mi mente ocupada. 

Pasaron varias horas y Alessia todavía no volvía, el cielo comenzó a oscurecerse y cada minuto me sentía más ansiosa, empezaba a tener un mal presentimiento y el estómago se me había revuelto, así que tomé mi celular y le marqué. Dos tonos después escuche una melodía en la planta alta de la casa, subí corriendo y ahí estaba el celular de Alessia, lo había guardado en uno de los cajones de su cuarto. En ese momento mi corazón empezó a retumbar y no pude contener el llanto, estaba segura de que algo malo le había pasado, podía sentirlo dentro de mi piel, si en algún momento de mi vida pensé que conocía el miedo estaba muy equivocada, nada podría compararse con lo que sentía en ese momento. Seguramente había venido a buscarla ese tal Eric. No lo pensé dos veces y decidí marcar a la policía, mis manos temblaban tanto que a penas podía presionar las teclas de mi celular, traté de calmarme para poder hablar y me recosté en la cama, después de unos segundos mientras estaba a la espera de ser atendida noté algo en el techo que me llamó la atención de inmediato. Me quité los zapatos y me puse de pie sobre la cama, era un papelito color rosa, pegado con cinta, no alcanzaba a leer lo que decía así que me pare de puntitas y lo despegué. 

"Zara tuve que irme del país, no sé si podamos volver a vernos necesitaba estar sola, espero puedas perdonarme, te dejé mis dos tarjetas de débito ya sabes dónde y pagué tus próximos semestres por adelantado, no quiero que dejes de ir a la escuela, quiero que estés bien. Por favor cuídate siempre, hazlo por mi, te quiero muchísimo no lo olvides nunca. Alessia"